Capturar al Dragón para La Emperatriz [Abandonado]

Capítulo 8: Serpiente falsa y engreída*

*Nota: 虚与委蛇 (xū yǔ wēi shé) Serpiente falsa y engreída. Modismo chino que significa tratar a la gente con falsos sentimientos y con una actitud hipócrita, es decir que es poco sincera.

En el interior del camino amurallado del Palacio Bermellón, Yan Yuan estaba sentado encima del carruaje del dragón con su túnica de dragón, con una fila de doncellas de palacio y eunucos a su lado, dirigiéndose al Palacio Dorado. Estaba rememorando el cuerpo helado de Xuan Long cuando escuchó a Chen Yan, que lo seguía, preguntar con cautela. —Ya que ese joven ha sido favorecido por su Majestad, ¿Le dará un título?

Yan Yuan se enfrió al instante y miró al viejo eunuco inmortal. —Prometí estar con Zhiyu el resto de mi vida, ¿Cómo voy a faltar a mi palabra?

Chen Yan bajó apresuradamente su cuerpo. —Su Majestad, lo siento, este servidor ha hablado demasiado.

Yan Yuan dio un resoplido frío y se alejó de su vista.

Xuan Long y él tenían caminos diferentes. Si no fuera por Ning Zhiyu, nunca se habrían cruzado en esta vida, así que ¿Cómo podría darle un título?

El día en que Ning Zhiyu recuperara la salud sería el día en que se separara de Xuan Long.

—Ten cuidado, si A'Yu se despierta y escucha algo que no debería oír, tendrás que cuidar tu cabeza.

Chen Yan se levantó la manga y se limpió el sudor frío de la comisura de la frente, diciendo. —Ai, me aseguraré de que las doncellas de palacio y los eunucos mantengan la boca cerrada para que no se revele ni una palabra.

Sólo entonces Yan Yuan se sintió satisfecho, pero la imagen del placer de Xuan Long bajo él volvió a aparecer en su mente en un momento inoportuno.

Estaba bien obsesionarse con él cuando estaban juntos, pero seguir pensando en él cuando estaban separados... Podría estar realmente poseído. Yan Yuan se obligó a pensar en los asuntos del gobierno y en Ning Zhiyu, simplemente para dejar de pensar en Xuan Long, que era tan frío por fuera, pero en realidad era tan simple que podría calificarse como estúpido.

...

Si un demonio ha estado cultivando el taoísmo durante 10.000 años, no estará lejos de convertirse en un inmortal. De hecho, no necesitarán dormir mucho y estarán descansando cuando cierren sus mentes para cultivar. Sin embargo, al acercarse la tribulación celestial de Xuan Long, sus hábitos se degenerarán gradualmente hasta ser similares a los de los seres humanos.

Poco después de que Yan Yuan se marchara, Xuan Long volvió a dormirse, parecía que últimamente se había vuelto extraordinariamente perezoso y somnoliento.

Era casi mediodía, y el caluroso sol de la ventana hacía tiempo que había desaparecido. Las nubes oscuras cubrían la mitad del cielo, los relámpagos brillaban y las tormentas eléctricas se desataban, una señal ominosa en todo el sentido de la palabra.

Xuan Long se despertó en trance y recordó que había prometido a Yan Yuan que le entregaría las escamas de dragón al mediodía, así que se levantó y salió de la cama a pesar de su malestar.

La sangre entre sus piernas hacía tiempo que se había secado, pero el dolor era tan intenso que parecía que un cuchillo le raspaba a cada paso que daba. No necesitaba fingir en ausencia de Yan Yuan. Lentamente, se dirigió hacia la bañera, preparada antes por el personal de palacio, mientras un fino sudor se filtraba por las comisuras de su frente.

Después de limpiar apresuradamente su cuerpo, tomó una daga negra de hierro en su mano.

La daga de hierro cortaba el hierro como si fuera barro y cortaba las escamas del dragón muy suavemente, pero era demasiado doloroso, por lo que sus movimientos eran lentos. Cortó quince escamas seguidas antes de que su muñeca empezara a temblar y la sangre brotara de su pecho, tiñendo de rojo brillante el agua originalmente clara.

Xuan Long estaba durmiendo cuando Yan Yuan se fue, y seguía durmiendo cuando Yan Yuan regresó, que se sentó en el borde de la cama y sacudió al hombre que estaba en ella. —A'Po, despierta.

El rostro de Xuan Long estaba pálido y sus cejas estaban ligeramente fruncidas. Yan Yuan le llamó durante un largo tiempo antes de que abriera sus gélidas pupilas de demonio turquesa y mirara a Yan Yuan en silencio, diciendo débilmente. —Has vuelto.

—¿Por qué sigues durmiendo? —preguntó Yan Yuan con cierta insatisfacción—. Te he estado llamando desde mucho tiempo.

Xuan Long se apoyó en la cama y se incorporó lentamente, agarrando en silencio la caja de madera lacada negra de la cama y entregándosela a Yan Yuan.

Yan Yuan se quedó perplejo. —¿Qué es esto?

—Las escamas de dragón —no había ninguna expresión en el rostro de Xuan Long.

La cara de Yan Yuan estaba encantada y no podía esperar a abrir la caja. Dentro había treinta escamas de dragón limpias y ordenadas en filas, que emitían una tenue y familiar fragancia fría.

—A'Po, eres muy amable —Yan Yuan levantó la vista y sonrió.

Xuan Long no estaba acostumbrado a que le hicieran un cumplido así, y su frío rostro se calentó ligeramente mientras evitaba mirarle y no hablaba, antes de escuchar a Yan Yuan decir: —Tengo unos asuntos urgentes, no puedo acompañarte a comer para el mediodía, así que volveré a verte por la tarde.

—A'Po, no te enfadarás, ¿Verdad...?

Xuan Long se quedó congelado un momento, y luego negó con la cabeza.

Yan Yuan se acercó alegremente y le dio un beso, le dijo algunas otras palabras bonitas, y se alejó a toda prisa con las escamas de dragón.

Como ya había conseguido las escamas de dragón, no había forma de que tuviera el valor de quedarse a comer con él.

♡Edición por Cynnamon♡