NOSOTROS/ LAURA

CAPÍTULO 1

Siempre me dieron miedo los cambios puede ser por el que dirán, o por el hecho de ser rechazada o también puede ser por ese sentimiento de extrañar tu "anterior vida", pero siempre me dieron miedo, mucho miedo. Y este verano me tocó enfrentarlo. Me mudaba de ciudad después de seis años allí, Valencia era mi hogar, mi refugio, o como dice mi amiga Sabela, "my safe place", dice que es algo así como el lugar en el que te sientes totalmente segura y cómoda, y sí, Valencia para mi era ese sitio.

Aún no sabía a dónde nos íbamos, quedaba una mísera semana para el día que mi vida cambiaría por cuarta vez y no sabía ni dónde viviría. Simplemente esperaba que fuese Madrid de nuevo, allí pasé años y años de mi vida junto a gente tan maravillosa que esperaba que me acompañasen hasta dentro de mucho tiempo. Deseaba con ansias que llegasen mis padres a casa para por fin contarme cual era mi próximo destino, pero eso no sucedería hasta las nueve y media de la noche, así que decidí ponerme a hacer la maleta. Cogí mi altavoz, lo conecté al móvil, puse este en modo avión, pero no antes de poner a retumbar por toda la casa la maravillosa música de Olivia Rodrigo y de Måneskin.

Mi teléfono sonó, ¡ERA MI MADRE! ¡DIOS! ¡TENÍA 8 LLAMADAS PERDIDAS!
- Laura!!!! - chilló ella.

- Dime...

- Porque no contestabas!!! Me tenías preocupada!!

 
- Lo siento mamá, estaba preparando la maleta.

- Bueno, no te llamaba para reñirte, sino para decirte a dónde vamos.

- ¡POR FIN!- exclamé yo- ¿A dónde iremos?

- Laura dios tranquilízate, morirás antes de que te lo diga- añadió ella.

- Moriré si no me lo dices, por favor mamá dímelo ya.

-Que si tranquila, nos vamos a Galicia.

-  Pufff, pero... ¿A qué ciudad?

- Eso... Eso está en tus manos. Hablando con tu padre decidimos que como era un gran cambio para ti, lo decidirás tu. Tienes estas opciones: A Coruña, Pontevedra, Vigo, Santiago de Compostela, Orense o Lugo. 

- Mamá, ¿hasta cuando tengo para pensarlo?, no es una decisión que se tome en un segundo...- Mi madre me acababa de meter en un gran apuro : Nos mudábamos a Galicia durante dos años como mínimo y yo tendría que decidir dónde viviríamos.

-Tendrás dos días, sé que es todo muy repentino pero a nosotros aún nos lo dijeron ahora.- Dijo mi madre con un tono indeciso y tembloroso.

- Vale. Voy a pensar. Adiós mamá, te quiero.- Instantes después colgué.

No rechisté, algo que siempre hago ya que soy la persona más cabezota de este planeta. No lo hice, pero ni se me pasó por la cabeza. Sabía perfectamente que esto no era solo duro para mí. También era duro para mi madre y para mi padre. Valencia era la ciudad dónde más tiempo había pasado después de Madrid, que es mi ciudad de nacimiento y la de mis padres igual.

 A todos nos sería duro este cambio, muy duro.