Historias de invierno

Fuyu no hanashi

Ya había llegado a su departamento, en su mano estaba la USB que le había dado Haru antes de irse, ni siquiera se molestó en prender la luz, ver el ambiente en casa de su amigo le recordó a aquellos días con su amado Ash, se sentía una mierda por tener envidia de la forma tan íntima en la que se trataban sus amigos, buscó distraerse y revisó su celular, que hasta ese momento había mantenido apagado, el resultado, cuatro llamadas de Ibe-san y cinco de Max, suspiró pesadamente, no es que no quiera hablar con ellos pero... Sabía el porqué lo estaban buscando, faltando poco para el aniversario de la muerte de Ash era claro que lo iban a buscar para saber cómo se encontraba, no es como si fuera a hacer una locura, después de todo había prometido que viviría por los dos, pero al parecer eso no era suficiente para sus allegados, se sacó la camisa y el pantalón, estaba agotado, ya se bañaría mañana, estando solo en ropa interior se lanzó a la cama y cayó profundamente dormido...

"Eiji"

"Eiji"

"Eiji"

Abrió los ojos, en su sueño estaba en un auditorio, podía escuchar una melodía de violín al fondo, como si hubiera un concierto del otro lado de la puerta, estuvo a punto de entrar, más se acobardó al último, había algo en él que le pedía ir más allá, a seguir adelante, con curiosidad avanzó por cada pasillo, con cada pasó se dió cuenta de que se encontraba en una especie de conservatorio, siguió caminando y dando una vuelta a la derecha se topó con una extensa biblioteca, sí una biblioteca, podía verse las siluetas de las personas ir y venir, leer detrás de un encuadernado, murmurando cosas detrás de los anaqueles, sellando libros en el mostrador  y personas estudiando detrás de pilas de libros, caminó con cautela por el pasillo principal aquel que estaba en medio de las mesas, podía ver aquellas siluetas cada vez con más claridad, mientras más avanzaba más potente se volvía el sonido del violín, más fuerte, más desesperado, caminó tres pasos más y paró al instante, se descolocó con lo que vió, en una de las mesas se encontraba Ash, leyendo un libro, iba vestido como en el día del accidente, gabardina blanca, suéter negro y jeans de mezclilla, Eiji perdió la voz, un nudo se instaló en la garganta, un hueco en el pecho y en el estómago también, no podía dar crédito a lo que estaba viendo, o porfavor, al fin su mente le dejó que se apareciera en sueños, estaba tratando de llamar su atención cuando escuchó aquella voz que añoraba tanto, los violines se fueron serenando, convirtiéndose en una melodía suave...

"_Que sucede onii-chan? Cuánto tiempo más vas a quedarte ahí parado?

"ASH MALDITO DESCONSIDERADO SABES CUANTO TIEMPO TE HE EXTRAÑADO?!"

Su voz salió en un potente reclamo, mientras se mantenía en su sitio ya que su cuerpo no le respondía.

"-Desgraciadamente, lo sé perfectamente, y créeme que nunca fué mi intención el hacerte sufrir, cada solsticio de invierno te veo sufrir y maldecirme por haberte abandonado y créeme que esa nunca fue mi intención y tampoco lo será nunca, pero te pido, que mantengas la promesa que habías hecho de vivir por ambos aunque suene algo egoísta, nunca te voy a dejar solo, así como te cuidé en vida planeo seguirlo haciendo aún en la muerte ya que mi pacto sigue contigo, aquél en el que juré protegerte. No tengo mucho tiempo pero ame verte una vez más, Hasta siempre Eiji"

Cuando Ash terminó de hablar, el sonido de los violines iba cesando y la imagen de su amado se iba perdiendo,  intentó gritarle desesperadamente como aquel día en el hospital, pero no pudo hacer nada, al igual que ese día, todo a su alrededor se desvanecía y de repente todo se volvió negro.

Despertó abruptamente, con los ojos húmedos y la cama hecha un desastre, se había movido demasiado, todo fue tan real y a la vez tan doloroso, él ya no sabía cuánto tiempo más iba a aguantar, pero ahí estaba, buscando y aferrándose desesperadamente a sus recuerdos, no podía volver a conciliar el sueño, tenía miedo de volver a ver a Ash y de volverlo a perder, de modo que recordó que dejó puesta la USB con la canción de la banda de su amigo y le dió play, tal vez la música le ayudaría a dormir, esperanzado tomó la laptop y la puso a lado de su cama, se centró en la melodía de guitarra que estaba sonando, la voz de un joven comenzó a cantar.

Igual
A nieve huyendo del calor
Que evita derretirse por el sol
Estoy viendo con aquel sentir

Esa sola estrofa le removió el alma, no estaba seguro de si iba a terminar de escucharla pero lo iba a intentar.

Hey, no sé qué tengo que decir
Para proclamar el fin
El fin de nuestro amor

Por dios, el tampoco sabía, cómo fue la historia de este chico?

Ahora que tu ser está
Sin un futuro al cual mirar
Por toda la eternidad
Sin rumbo me acompañarás

"

Que demonios? De qué manera perdió  el amor este niño? De verdad tiene 16 años?!"
La profundidad de la letra le estaba dando con todo

Quedé varado en soledad
Ni un adiós logré decir
Y ya no estás aquí

"Yo tampoco pude decir adiós, jamás le dije adiós me rehúse a decirle adiós, *SA YO NA RA* nunca quise que aprendiera eso pero igualmente aprendió."

Igual
A magia imposible de romper
Igual que una maldición, tal vez
Estoy viendo con aquel pensar

"

Los pensamientos de lo que pudo haber sido y no fue me inundaban su mente, como si estuviera hechizado, maldito"

Hey, no sé si en esta gran ciudad
Podré ser capaz de hallar
Algún mañana ideal
Aaaha

S

e removió haciéndose bolita y abrazándose así mismo, aquel grito había sido desgarrador, las lágrimas ya estaban corriendo por sus mejillas, la letra seguía apuñalándole

Heladas lágrimas de amor
El cielo fue quien las heló
De a poco empiezan a caer
Y junto a mí las puedo ver

Había alguien junto a mí
Y simplemente lo perdí
No hay nada más, la historia es así

Ese estribillo le dió el golpe de gracia, la perdida de ese chico fue la misma que la de él, se sentía mal muy mal por ese joven, le daban ganas de abrazarlo y reconfortarlo, un día tenían todo lo que podían desear y al otro todo se desvaneció cuál copos de nieve.

Ahora que tu ser quizás
Su forma llegue a perder
Por toda la eternidad
Conmigo yo te llevaré

Eiji también intentaría llevar para siempre a Ash con él, la prueba más visible de ello era que su pelo seguía intacto, no había sido cortado en años. Y tampoco pensaba cortarlo.

Siguiendo sin mirar atrás
Ni un adiós logré decir
Te llevo siempre aquí.

Así es como seguiría, adelante, más Eiji no podía permitirse el no mirar atrás, ya que esa era otra de sus maneras de llevar a Ash con él.

La canción terminó, había decidido escuchar la canción para distraerse y acabó peor, él estaba seguro de que lo que es chico Mafuyu había pasado fue muy cruel para su corta edad, tal vez por eso Akihiko le había sugerido hablar con él, y definitivamente eso haría, pero primero tenía que limpiarse las lágrimas y dormir, de esa manera se propuso terminar con sus deberes para poder asistir al concierto, ahí buscaría hablar con el. Su cabeza comenzó a punzarle, se acostó nuevamente y cayó rendido.

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Buenas *c agacha pq le arrojan objetos* ya se que me fuí, pero perdí la libreta dónde estaban mis anotaciones, y ya casi entraré a la escuela por lo que estuve ocupada.

Se vienen cosas XD.