Cadena De Jóvenes Líos

Capitulo 5: Rara cita

Yulia Bernave

Me extrañó mucho su propuesta pero le respondí.

Yulia_B_1912: Ahora?

DesmondG_cap123: Sí, baja, no tengo toda la noche. En realidad sí.

Yulia_B_1912: Espero que valga la pena. Ya voy. No puedo creer que estes en mi patio. Eres un enfermo.

Me aseguro de que todos estén en sus cuartos y cierro la puerta de mi habitación con seguro, por suerte no me había cambiado la ropa, una camisa negra y un short verde, algo simple. Bajo por las escaleras de mi ventana y doy la vuelta al frente de mi casa, ahí estas, imbécil.

No lo saludo para que nadie oiga que salí sin permiso. Una cuadra después el empieza la conversación.

- Te iba a decir lo sexy que te ves pero eso no es de caballeros.- Me mira por el rabillo del ojo y me lanza una sonrisa torcida. Yo mantengo mi perfil quieto y serio.

- ¿A dónde me llevas?.- Pregunto y él me toma de la mano.- ¿Qué haces?.

- Relájate,- Entrelaza nuestras manos.- Solo vamos a mi casa, está sola.- Sonríe pervertidamente y yo solo tuerzo los ojos y suspiro.

Llegamos a su casa, ya la conocía de antes; fiestas, reuniones o tareas; estaba muy limpia y ordenada.- Toma asiento,- dice mientras cierra la puerta y señala el sofá de la sala.- Yo iré por bebidas. Su sala era cálida a diferencia de el frío de la noche.

Estaba nerviosa, no sabía que iba a pasar, desde hace tiempo quiero estar con él, pero el hecho de que es un idiota lo arruina. Desmond vuelve con dos copas y una botella de vino. Si que está enfermo. No lo sé.

- Dije relájate, cariño.- Entrecierro los ojos cuando me dice "cariño". Se sienta al lado mío y se acerca. Yo me quedo quieta y él sirve el vino tinto.

Sin nada que decir, observo el vino rodar dentro de la copa. Desmond se arrecuesta en el espaldar del sofá y con una copa en la mano remueve la misma.

- ¿Para qué me trajiste?.- Me recuesto de la misma manera que él pero dejo mi copa en la mesita de cristal.- No tendremos sexo.- Le anticipo, por si eso había pasado por su mente, lo mas probable es que sí.

- Solo quería que charlemos.- Responde y toma un trago, él continúa.- Yo te tomo enserio.- Eso me hace reír descaradamente y la expresión de decepción es muy notable en su rostro y dejo de reírme.

¿Estará hablando enserio?.

- No me digas.- Finjo asombro e ironizo de más.- ¿Qué te hace pensar eso?.- Agarro mi copa y doy un buen trago y sonrío como psicópata esperando su respuesta. Lo noto dudar y continúo con mi descaro al 100%.- Dime, ¿Qué te hace creer que soy especial?. Me tomas enserio, claro, a mí ¿Y a cuántas más?.- Me río porque me parece ridículo que me quiera alagar cuando se insulta el mismo de una manera indirecta.

Desmond se aclara la garganta y de posiciona de frente a mi. Toma mi mano y yo hago un gesto dramático de Que romántico, que se note mi sarcasmo.- Llevo detrás de tí desde hace dos años y te conozco desde hace seis.- Eso es cierto, lo conozco desde primer año de secundaria, el hecho de ser capitanes de ambos equipos de fútbol nos obliga a socializar. Pero el se ilusiona porque quiere y es masoquista. Él continúa.- Más allá de que quiera tener sexo contigo.- Me sonrojo, pero no me sorprende, no hay una sola vez que lo vea y no diga algo de follar.- Me agradas, y te quiero.- Trago saliva al ver la seriedad en su cara. Sonríe pero esa sonrisa no derrocha perversión, deseo o atracción. Es una sonrisa que nunca había visto en él, es dulce, auténtica y en cierto modo hermosa. Trato de aclararme la garganta pero mi saliva se ha ido.

Al verlo acercarse más a mi rostro, suelto su mano, me alejo en el mismo sofá y aparto la mirada.- ¿Qué hora es?.- No traje mi teléfono, fuck. No me atrevo a cruzar miradas con él, y por más que no lo vea siento la tristeza en su mirada oscura. Me pongo nerviosa y tomo lo que queda de la copa. Me levanto y siento a Desmond tomarme del brazo y me giro para encontrarme con su mirada.

- Siento ser tan directo, ya sabes como soy contigo.- Se levanta y mueve su mano de mi brazo a mi cintura.- ¿Acaso te puse nerviosa? Preciosa.- Ahí está el Desmond de siempre. Pasa su mano libre por mi cabello y el mechón que uso como fleco lo coloca detrás de mi oreja y me sonríe como si yo fuera un gatito.

- Desmond, yo...- Me interrumpe.

- Ssshh,- Me silencia y acerca su rostro a mi oído. Siento el calor de su respiración entre cortada y eso acelera la mía.- Ya hemos esperado mucho ¿No crees?.- Eso me hace estremecer y él lo nota.- Yulia, ¿Puedo besarte?.- Lo siento cada vez más cerca de mí y lo aparto por instinto.

Su cara de desilusión es obvia pero la cambia por una risa por lo bajo. Aclaro mi garganta.- Ya me voy,- Digo porque ya no quiero estar aquí, no quiero hacerle creer algo que no es.- ¿Me acompañas o no?.

Desmond levanta la mirada sin encanto alguno.- Claro, hermosa.- Me da una sonrisa fingida. Tal vez le dolió pero tengo que ser firme.

Él camino a mi casa estuvo inundado de silencio incómodo. En el viento rodaban algunos sonidos de los autos y algunas personas en sus casas. Sentía la desilusión en el aire, lo conozco bastante y sé que él no se calla por nada, de alguna manera su silencio me grita-: ¿Por qué no me das una oportunidad?.

Y la respuesta es: No quiero salir herida, y mucho menos por un rompe-corazones aficionado

Llegamos a mi destino y nos detenemos en el frente de mi casa. Todas las luces están apagadas, señal de que todos allí están dormidos. Desmond saca un cigarrillo del bolsillo de su pantalón.- Ya te traje, preciosa.- Saca un encendedor de el otro bolsillo y pone el cigarrillo entre sus esponjosos labios de cereza. Con su mano derecha cubre el cigarrillo del viento y con la izquierda lo enciende.

Yo dejo de observarlo.- Bueno, gracias, Desmond.- Él hace un movimiento rápido y me besa la frente.

- No te sientas mal,- Toma mi mentón con su mano libre y me hace mirarlo.- No esperaba que fueras tan fácil.- Me sonríe arrogante.- Ve, mándame un mensaje cuando estés en tu habitación, si te descubren, no te dejaré sola.- Me guiña el ojo y yo le respondo con una sonrisa en señal de Gracias.

Me voy por la parte trasera de la casa y subo las escaleras a la ventana de mi habitación. Cumplo con avisarle a el castaño de ojos oscuros y me acuesto tal como llegué.

Pienso en lo que está pasando.

Desmond...

Él es bueno en diferentes aspectos. En cuanto a las chicas es un asco, pero con sus amigos y familia si es leal, protector, considerado y agradable. En mi caso solo es leal y protector, quitando lo pervertido y acosador.

Cuando digo que es un acosador, no trato de normalizarlo o hacerlo ver divertido o sexy. Está mal, varias veces lo he pijado seguiendome o mas de una vez ha entrado en mi habitación sin permiso o previo aviso. Y el hecho de que siempre actúe como depravado conmigo le resta puntos.

Espero que al decir que me conquistará de una manera decente se refiera a que no será una animal cuando lo logre, si es que lo logra. Mientras tanto mi mente va a la chica que revisa su delineado cada quince minutos.

Michell...

##############

Nota de la autora: 

JA! doble actualizacion en un mismo día, sisoybuena.

De nuevo, les doy gracias a los que leen esta humilde historia y prometo que pronto tendra una mejor portada...Palabra de Muggle...ok

Besos, vales infinito <3

Espero tu voto :)

BethLimoncitoUwU