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PV CASSIUS:

Las cosas con Aileen iban mejor que nunca, nuestra pequeña era nuestro centro, un pilar que nos mantenía unidos a los seis y la mujer que mas nos amaba, después de aquel viaje a las Maldivas la presentamos a nuestros padres los cuales la amaban incluso mas que a nosotros, nuestra madre esta encantada con ella y no podíamos culparla, nosotros también lo estábamos.

- Están listos – el grito de Adrik hace que termine de acomodar mi saco y salga para reunirme con mis hermanos

Hoy era la presentación de la colección en la empresa que dirigía y estaba muy feliz por ello, mas porque finalmente hoy le daríamos una sorpresa a nuestra princesa.

- Lo tienes – dice Dillion cuando me mira

- Lo tengo – digo sonriéndole

- Hoy es noche de triunfar, así que vámonos – grita Eloah bajando, haciéndonos reír mientras lo seguimos hacía la salida

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- No ha llegado mi mujer – pregunto a mi secretaria que se encuentra a mi lado en cuanto entramos

- No señor, la señorita Clarke aun no ha llegado, pero una señorita ha estado preguntando por usted – dice y mi ceño se frunce ¿Una mujer?

- Que mujer – digo mientras miro como mis hermanos hablan con algunos de nuestros socios

- Dijo llamarse Barbara Beckett – dice y entonces siento como todo a mi alrededor se detiene y la rabia me consume

- Encuéntrala y llévala a una de las salas, que nadie de mis hermanos la vea y avísame – digo alejándome de ella

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- Cassius Callen – dice en cuento entro a la habitación

- Que quieres – digo sin rodeos mientras la miro sentada en uno de los sillones

- Que quiero – dice sonriendo mientras se levanta para acercarse a mi pero cuando esta por tocarme la tomo del brazo impidiéndoselo

- No juegues conmigo, no soy mis hermanos para caer en tus estupideces, así que dime que mierda quieres y después lárgate – digo soltando su mano haciéndola retroceder unos pasos

- Quiero estar con ellos de nuevo – dice molesta – Y también te quiero a ti – dice haciéndome soltar una carcajada

- No te hagas ilusiones y es mejor que desaparezcas de aquí y de nuestras vidas si no quieres que te meta a la cárcel por ladrona o no recuerdas lo que paso hace tres años – digo sonriendo

- No te atreverías – dice con miedo

- No me retes – digo sonriéndole

- Te arrepentirás de esto – grita mientras yo salgo de la habitación encontrándome con los de seguridad – La quiero fuera de aquí y alejada de mi mujer y mis hermanos, si pasa algo al único que avisan es a mi entendido – digo mirándolos

- Si señor – dicen y entran

- Cassius – la voz de mi pequeña hace que la mire confundido ¿Quién mierda le dijo que estaba aquí?

- Aileen que haces aquí – digo volteando hacia la puerta por donde sale Barbara custodiada por mis hombres

- Que sucedió – pregunta mientras mira tras de mi

- No fue nada – digo tomándola de la mano para salir de ahí

- Seguro que no hay ningún problema te ves tenso – dice cuando llegamos de nuevo a la reunión de gente

- Todo este bien amor – digo mirándola a los ojos para dejar un beso en su frente – Te vez preciosa – digo mientras recorro su pequeño pero perfecto cuerpo con ese vestido Azul marino dejando a la vista una de sus piernas y un escote pronunciado – Aunque es mejor que consigamos otro menos revelador – digo con un gruñido haciéndola reír

- Calma tus celos amor, recuerda que los únicos que pueden tocarme son ustedes – dice besando mis labios importándole una mierda que nos vean y es algo que me encanta de ella, el que sea confiada y no caiga en los prejuicios 

RAMÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora