Despues de 20 minutos y mas de 50 sustos, logramos llegar al bosque, que en realidad, si era un bosque, pero mejor.
En el centro de este se veian luces ir y venir, el olor a comida y dulces llegaba hasta la entrada y el sonido a gritos lo hacia único, había una feria en su interior. Nos adentramos por un sendero poco iluminado que nos llevaba hasta la entrada, aparcamos y nos adentramos en aquel magico mundo.-¿te gustan los juegos mecanicos?
-No...-
-¿Enserio?- en sus ojos habia preocupación. -No puede ser, debi haberte preguntado antes de venir- ya iba hacia el estacionamiento, cuando la tome por el brazo.
-No me gustan, me encantan- sus ojos se iluminaron.Corrio hacia los carritos chocones, el martillo, despues nos subimos al satelite, de ahi nos pasamos a las canastas y a la montaña rusa...
Decidimos descanzar en el área de comida, donde pedí el hotdog-macho y ella pidió dos rebanadas de pizza con espinacas. Comimos hasta quedar satisfechos, aunque en realidad sus dos rebanadas no eran nada contra mi hotdog. Que eran tres salchichas rellenas con frijoles charros, bañados en aderezo y con granos de elote, aguacate jitomate, rebanadas de jalapeno, cebolla y queso derretido sobre un pan gigante y papas para acompañar.-Pense que vomitarias despues de la primera mordida- dijo mientras dabamos un paseo por uno de los caminos que alumbraba el bosque en su interior.
-Yo tambien, enserio... jamás había visto algo como eso, no sabia si yo tenía que comermelo antes de que el me comiera-Le tome de la mano y seguimos caminando bajo la tenue luz de aquellos focos.
Y cuando ya no vimos venir gente, nos sentamos en una gran piedra al lado del camino, y pude contemplarla bajo la luz dr las luciérnagas.
-Eres muy bella-
No dijo palabras, y es que no era necesario...
Recargo su cabeza en mi hombro y escuchamos los sonidos que la naturaleza nos dirigia.-Un último juego- pidio arrastrandome hacia la feria.
-Por favor, nada que me haga girar- suplique.Y despues de hacer fila por casi una hora, subimos en aquellas diminutas canastas. La noria se alzaba imponente a pesar de tener una velocidad baja, era un juego maravilloso. Contemplamos el panorama hasta llegar hasta el punto mas alto, donde mi mente solo pensaba en algo.
Toque su rostro, suave y firme al mismo tiempo, ella volteó pero no miro mis ojos... los dos deseabamos lo mismo.
Presione mis labios sobre los suyos y por un instante una descarga recorrio mi cuerpo entero.Salimos de la noria, rumbo hacia mi motocicleta, cuando la vi, pude notar unas botas negras sobre ella.

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MI PRIMERA VEZ
JugendliteraturEsta historia narra la historia de Beck, un chico cualquiera quien acaba de llegar a una nueva ciudad. Lo que le agrada menos que tener que comenzar su ultimo año de preparatoria en una nueva escuela. El como muchos chicos de su edad solo quiere ten...