La mascara

El reencuentro

Harry pov

Después de haberse pasado el día anterior comprando en Flourish y Blotts, ahora me encontraba leyendo  Principios de la magia y el núcleo mágico, había conseguido un baúl con un hechizo de expansión indetectable en el que prácticamente había metido la mitad de la librería.

Ahora lo tenía todo desparramados y en columnas  por toda la habitación, lo cual no había sido su mejor idea porque juraría que no veía la puerta. Pero no le resultaba  un gran problema puesto que nadie nunca entraba en su habitación, en cuanto ese pensamiento pasó por su cabeza parcia que el destino había decidido ponerse en su contra porque en ese momento alguien tocó  a la puerta.

"Harry, puedo pasar? Hay aquí alguien que quiere.." Se vio inmediatamente interrumpida por un estruendo y la voz de Harry.

"Espera!" Dijo Harry intentando guardar los libros en el baúl, pero en ese momento una de las columnas de libros decidió que era buen momento para caerse, haciendo aún más ruido. 
"Harry estás bien?" Dijo la señora Roudwell mientras entraba preocupada por el ruido, encontrándose con una habitación llena de libros y Harry haciendo malabares entre ellos.

"Puedo explicarlo" dijo Harry sabiendo que no podía explicarlo.

Artucus pov

El mismo día que había salido de la casa de los muggle se dirigió inmediatamente al orfanato mientras su cabeza se llenaba de posibles escenarios en los que un niño mágico podía haber sufrido a manos de los muggles.

Jamás se lo perdonaría si le hubiera pasado algo, debió haber estado más involucrado con su familia, si lo hubiera estado nada de esto habría pasado. Un niño pequeño e inocente era ignorante de todo aquello que era su derecho de nacimiento, no solo eso, sino también el hecho de crecer en un ambiente rodeado e muggles seguro que evitó que desarrollara su potencial así como su núcleo mágico. Con esos pensamientos entro en el orfanato, siendo recibido por la matrona de éste.

"Hola buenos días, ha llegado a mi conocimiento que mi nieto se encuentra en este orfanato. Me gustaría hacer los trámites y sacarlo de aquí cuanto antes".

La señora Taylor, una de las encargadas que lo había visto entrar le dijo "Necesitaremos alguna prueba que indique su relación... " un hechizo confundus fue todo lo que Artucus necesitó, no iba a pasarse toda la mañana dándole explicaciones a nadie "...qué estaba diciendo?"

"Me iba a llevar dónde mi nieto para realizar la adopción formal" Artucus había tenido sus dosis de muggles para los próximos 10 años.

"Ahh por supuesto, cual había dicho que era su nombre" dijo la señora Taylor un poco confundida

"Potter, Harry Potter"  la señora, que estaba subiendo las escaleras hacia los dormitorios, paró en seco.

"Está seguro de que ese es su nombre, Harry no es un niño al que querría adoptar, es... extraño" dijo la señora Teylor recordando la profundidad de la mirada de ese niño, como si te estuviera absorbiendo el alma " Esta alejado de la mano de Dios" añadió finalmente.

"Pues menos mal que lo está" refunfuña Artucus en voz baja, lo que le faltaba era que el niño fuera católico aún por encima.

"Ah señora Roudwell, este señor es pariente de Harry, ha venido a llevárselo, puedes hacerte cargo?" Ni siquiera esperó a que le respondiera cuando ya estaba bajando las escaleras de vuelta.

" Cómo es que un familiar de Harry..." Artucus se apresuró a lanzar otro hechizo confundus "bueno, en todo caso me alegro mucho de que esté con su familia, es lo menos que se merece. Harry es un niño tan bueno, nunca nos ha dado problemas, que alegría se va a llevar"