Capítulo 18.

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—¡Manejen las cajas con cuidado, lo que hay allá dentro vale más que los transportes que conducirán!

—Mmm — la presencia de Rowan me molesta una vez más —. Fascinante tu forma de dar órdenes, Jimena. Me encanta cuando te pones así de mandona.

—Y a mí me encanta cuando mantienes la boca cerrada.

—Será nuestro primer gran negocio de millones y millones de dólares por delante, esto hay que celebrarlo. Por eso reservé un lugar para cenar exquisitamente.

—Me da igual lo que hagas. Toca esperar que este negocio salga bien.

—Será así. Ya quiero ver la cara de Charles cuando sepa que la gran mujer que perdió, es la cabecilla de uno de los nuevos cárteles más poderosos de Latinoamérica entera. "Jimena Martínez", tu nombre será leyenda.

CHARLES

—Traigo noticias — Lisa pone un iPad en el escritorio, cerca de mi brazo—. Es una conversación reciente entre Jimena y los perros que le rodean a Rowan — presiona una tecla, activando dicho audio que me hace escuchar su voz —. Ella es la que maneja un nuevo cártel, Rowan le ha enseñado tantas cosas que le han servido para ser su propio jefa. Ésta mañana recibí información confidencial; nuevas mercancías están siendo transportadas por los cielos, mares y por carreteras.

—Entonces está de parte de Rowan, y yo creyendo que nunca me traicionaria.

—¿Puedes callarte, Charles? No soportaré tus idioteces. Jimena es una buena mujer, me consta que si está al lado de Rowan es por el plan. El hecho de que sea hija de la perra de Julieta, no quiere decir que sea igual que ella o tal como tu peor enemigo. Parece que la que conoce mejor a Julieta, soy yo y no tú. ¿Hasta cuándo seguirás con la estupidez de distanciarla por ser hija de tu ex?

—Las preguntas se esparcieron de mi cabeza. Es algo que sigo sin creer. Ella, hija de mi ex. Qué cosas se ven en la vida. Pero lo sigo amando, sé que Jimena no tiene la culpa de nada. ¿Qué haré? Ese día estaba fuera de mí, le grité y la eché. Lo único que ha de estar deseando es verme muerto.

—Yo lo haría — alzo la mirada —. Pero si tanto la amas, búscala.

—Somos tan comunes, y en ese cuenta tener nuestros secretos. No sé dónde está, su vida estaría en peligro si mando y buscarla y más si el desgraciado de Rowan llega a saberlo. Esperaré tres días más para recibir una llamada o visita de su parte, si no logro mi objetivo, mandaré a todos mis hombres tras la mujer que amo.

—¿Se atreverá a venir luego de que la trataras como una bestia?

—Eso es principalmente lo que me preocupa. No sé, toca esperar algo bueno por fin en mi vida.


JIMENA

—La merca llegó a salvo — una sonrisa satisfecha se ve plasmada en mi boca. Corto la llamada, volviendo el celular a mi bolso.

—Nuestros planes salieron bien, Rowan — le alcanzo una copa —. En unos minutos se empezará con la distribución de la droga en España. Bien dicen: "nunca subestimes la inteligencia de una mujer".

—Como que debemos celebrarlo, no?

—Ahora no, me urge cerrar un negocio— tiro mi cartera en el interior del auto—. Nos vemos.

Sin más explicaciones conduzco por la carretera. Bajo las gafas de sol de mi cabeza, y ahí es cuando veo la camioneta de Lisa estacionarse detrás de mi automóvil.

—¿Jimena eres tú?

—¿Qué haces por éstas rutas, Lisa? Puede ser peligroso, los hombres de Rowan podrían vernos...

—Después de la discusión que tuviste con Charles, me preocupe por tí. No estoy de acuerdo con todas las estupideces que te hizo, pero está preocupado por tí. Dijo que si no lo llamabas o ibas a verlo, mandaría a todos sus cien mil hombres para buscarte.

—Pobre imbécil. De Charles no quiero saber nada. Él está fuera de mi vida, no necesito nada de él. Y que siga pensando lo que se le dé la gana, que piense que por ser hija de una prostituta ingrata, yo también lo soy.

—Prometeme que te cuidaras. Conozco a Rowan, tal vez más que el propio Charles. Cuídate Jimena, no sabes el infierno que te esperará si sabe que estuviste junto a Charles.

—¿Por qué lo dices? ¿Qué tienes tú que ver con Rowan?

En un silencio, la voz que se escucha es la del mismo desgraciado del que hablamos.

—Y yo creyendo que en realidad irías a un negocio — pongo a Lisa detrás de mi cuerpo. Los hombres de Rowan y él mismo aparecen armados, rodeandonos y dándonos una sensación de acorralacion —. Está muy mal mentir. Lo hubiese tomado de forma distinta si me decías simplemente que te encontrarias con... — su sonrisa parece más de sorpresa, mucha sorpresa. Señala a Lisa con su dedo índice —, mi querida, pequeña y traicionera hermana. ¿Cómo estás Lisa?

Dulce Infierno [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora