LEAVE BEFORE YOU LOVE ME〃Ricardo Alcaraz ✓

Capítulo Cuatro. |Final Alternativo|

Abrí la puerta, ambos nos miramos y te abracé, eso te sorprendió. No dije nada hasta que te invité a pasar.

ㅡNecesito hablar contigo.
ㅡIgual yo ㅡdije mientras cerraba la puerta.

No tenía idea de lo que me dirías sólo estaba felíz por verte. Esta vez lo aceptaba. Pensaba en todo lo que te diría, pero un nudo se formaba en mi garganta.

ㅡCreo que no te entiendo ㅡtalló sus ojos. ㅡMe dejas, me tratas indiferente, ¿y ahora me quieres ver?

No supe que contestar.

ㅡMe gustas y te quiero, pero no sé qué es lo que tú quieres conmigo.
ㅡQuiero arreglar todo ㅡtomé su mano.

Hablamos por horas tratando de llegar a algún lado. Te dije que lo que sentía por primera vez, pero tu expresión era la misma, estabas cansado de todo. Y no te culpo, yo estaría cansada en tu lugar.

Estuve esperando en algún momento de la conversación que me dijeras que te quedarías, que lo intentaremos ahora aceptando mis sentimientos, para mí desdicha no fue así.

Tus ojos reflejaban una tristeza profunda, lo sentía. El cansancio de lidiar con alguien indeciso te estaba consumiendo. Todo el peso de la culpa caía sobre mis hombros, no podía soportar verte de esa manera, yo era quién te estaba volviendo así, triste y apagado, ya no veía más de ese Ricardo que me quería ver felíz. Sólo eras el reflejo de mi trato hacia ti.

ㅡNo sé qué es lo qué te pasa, ¿realmente me quieres?
ㅡClaro que te quiero...
ㅡPues, no lo demuestras, nunca lo haces. Ya soporté suficiente.
ㅡPor favor, déjame cambiar todo, quiero que sepas que realmente me importas.
ㅡDe verdad quiero creerte.

Sólo tocadas tu cabeza digiriendo mis palabras, no estabas convencido, quería hacer que lo estuvieras. No me dí cuenta y las horas habían pasado entre esa discusión sin rumbo aparente.
Ví como pequeñas lágrimas salían de tus ojos, estaba apunto de llorar, me partías el alma, Ricardo.

¡No quiero que te vayas!

El sol se había ido, pero tu seguías ahí, con las lágrimas secas en tus mejillas y un semblante reflexivo tratando de creerme está vez. Sólo hablaba y hablaba para que no te fueras, hasta que segundos después te acercarse a mi y me diste un beso.

Caí sorprendida ante este, creí que estabas harto de mi, pero al parecer aún había un pequeño espacio en tu corazón que llevaba mi nombre.

Estaba tan confundida, pensé que te irías a los pocos minutos, pero aún estabas en mi casa, sentado en mi sillón polvoriento.

Me tomaste de la mano y juntaste nuestras cabezas, te veías tan agotado. Yo aún estaba procesando todo. No podía comprender el por qué me habías besado. Creo que aún me amabas y yo también lo hacía y te amaba con tanta fuerza que no quería ver una sola lágrimas más caer de tus ojos. No me permitiría lastimarte otra vez.

No pude contenerme y te abracé, experimenté tantos sentimientos en ese abrazo, sentimientos que en mucho tiempo de relación no había sentido o no los reconocí. No quería soltarte, correspondiste mi abrazo al instante, ambos lo necesitamos.

ㅡPerdoname, por favor. Por todo.

Tenía tanto miedo y angustia por lo que pasaría después de soltarte. Necesitaba abrazarte toda mi vida.

ㅡTe amo, Ricardo y siempre lo he hecho, aunque nunca te lo dije.

No dijiste nada y me miraste sonriente, noté esa chispa del Ricardo de antes, ese que me amaba incondicionalmente.
Creo esa fue la primera vez que te dije te amo sintiéndolo con todas mis fuerzas. Te amaba y lo sabía.

Te recostaste en el sofá y puse mi cabeza en tu hombro, entrelazaste mi mano con la tuya y cerraste tu ojos. Tu rostro apagado se había ido por completo, ya no sentía esa aura gris chocando contigo, estabas felíz.

ㅡAmor ㅡvolteé hacia ti, ㅡprométeme que ya no te irás.
ㅡJamás lo haré, Ricardo.

Me abrazaste tan fuerte que pude sentir todo tu amor en mi. Por fin, todo el problema se había ido. Besaste mi mano y dijiste algo que hizo que estallara mi corazón.

ㅡTe amo.