YMO 5 (Final)

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Justo cuando Yibo llegó a la habitación de Zhan, el olor a incienso de sándalo sopló debajo de su nariz. Sus ojos se lanzaron hacia la persona que quería ver. Ahí, en la cama, abierto y desnudo, Zhan estaba acostado con un libro en su mano.

"Mierda, eres sexy", murmuró, causando una sonrisa satisfecha en el otro alfa.

"Cuando la comida está servida, ¿vas a mirar o a comer?", se burló.

El primero gruñó. Sus feromonas, que podrían intoxicar incluso a un alfa común, se liberaron, manteniéndose firme en la excitación.

"Si eso es, fóllame", lo invitó seductoramente, abriendo mucho sus piernas para mostrar su agujero fruncido, ya estirado, listo para envolver su polla muy adentro.

"¿Ya? ¿Lo estiraste para mí?", gruñó el primero, arrastrando encima de él, presionando su bulto en el centro de Zhan.

El otro alfa ronroneó mientras sentía la dureza, lo quería. Quería que esa longitud lo abriera de par en par, lo llenara hasta el borde, chocara contra su polla una y otra vez, y lo ordenara en seco.

"Lo quiero, p-por favor~", rogó, alcanzando el cuello del primero para rodearlo con sus brazos.

Yibo sonrió, ni siquiera quitándose la ropa, pero desabrochando sus pantalones, liberando su rigidez. Al observar, la boca de Zhan se hizo agua, su polla chocando contra su abdomen.

"¡Sí, arruíname!", gritó.

El primero se rio profundamente, "Estamos impacientes, ¿no?", se burló, inclinándose hacia abajo para lamer la parte inferior del labio del otro. Zhan hambriento, lo persiguió después, a lo cual el primero burlonamente se alejó. "¿Me quieres aquí?", tarareó, llegando hasta el agujero de Zhan.

El otro alfa asintió, frenéticamente, como respuesta. "Por favor~", rogó una vez más, con ojos empañados, la boca babeando, y el cuerpo temblando de deseo.

"Está tan flexible", añadió el primero, insertando dos dedos, luego gradualmente agregó otro. "Mira, se está abriendo", rio, mirando hacia abajo su trabajo manual.

Los ojos de Zhan rodaron hacia la parte posterior de su cabeza, con la espalda arqueada por la sensación de sus tres dedos. "¡Mmm... más! Lo quiero más grande~", lloró con la boca abierta.

"Está bien~", arrulló Yibo, inclinándose hacia abajo para poner su lengua en la boca abierta de Zhan. Lamiendo cada rincón de su boca, succionando su lengua, y mordiendo ligeramente sus labios. En el proceso, su longitud estaba posicionada en su entrada. Y sin esperar por su señal, se enterró profundamente, gruñendo en medio de su descuidado y húmedo beso.

"¡Sí! Oh, maldita mierda, eso es --mmmm~", Zhan gimió. Su alma estaba satisfecha con el calor que estaba enterrado en él. Es el enorme equipaje que quería que estuviera dentro de él todo el tiempo. Mierda, podría volverse adicto.

"¿Sí? ¿Justo así? ¿Qué tanto me deseabas aquí?", gruño Yibo, tomando su ritmo. Nunca fue gentil; aun así, Zhan amaba cuán tosco podía ser el primero. Le encanta el dolor desgarrador debajo de él. A pesar de las lágrimas cayendo de sus ojos, sus labios curvados hacia arriba, mientras el placer lo tenía totalmente mareado. El placer es la única cosa en la que podía pensar justo ahora.

"¡Me encanta! Más, dame más... hnggg~", lloriqueó, su lengua sobresaliendo, delirando de placer.

Yibo seguía golpeándolo en el mismo lugar, donde estaba ubicada su próstata.

"¡Yibo, bebe! ¡Sí, mierda, déjame preñado! Hnggg~", gritó. Su espalda arqueada mientras él temblaba, seguido de su primer orgasmo.

"Oh, liberaste demasiado", sonrió Yibo, pasando sus dedos por el semen que Zhan acababa de arrojar sobre su estómago, luego lo lamió. "Ahora, mantente apretado. Yo aún no me he venido, todavía necesitas hacer que me corra más de tres veces antes de que esté satisfecho, ¿lo entendiste?", preguntó.

El alfa estaba muy atrapado en su intensa corrida que no fue capaz de responder, a lo cual el primero siseó, "¡Respóndeme!", gruñó, golpeando un puñado en sus piernas, dejando una huella de mano.

"¡Sí! ¡Sí! M-más~", respondió, agarrando las sábanas mientras otra ola de estocadas de Yibo venía balanceándose.

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"Hmm, debe estar cansado", murmuró Yibo mientras observaba a Zhan dormir a su costado. Sonrió al ver todas las marcas de mordidas y chupetones que quedaron en la piel del último. Era su obra de arte, de la cual nunca quitaría sus ojos.

Sonrió satisfecho, tomando su celular mientras capturaba múltiples fotos del otro alfa. "Finalmente, eres mío", murmuró. "Me preguntó, ¿dónde podría encajar esta foto en mi cuarto?", agregó.

Después, sus ojos viajaron dentro del cuarto, atrapando su atención en el bolso verde esmeralda Gucci Sylvie, situado en la parte superior de la mesita de noche. Su cabeza se inclinó, "Mm...", tarareó, pero luego regresó su atención al hombre a su lado. Miró hacia su abdomen, luego lo recordó, corriéndose una y otra vez entre sus estómagos, creando un charco de su semen.

Yibo arrastró los líquidos que aún no se habían secado todavía y agarró el contenedor del bolsillo de su abrigo, poniéndolo dentro. "Colección 298", murmuró, sellando el contenedor ajustado.

Al hacerlo, miró de regreso hacia el lindo alfa acostado a su lado, sonriéndole con cariño, cepillando el cabello extraviado en su rostro. "Finalmente, eres mío", se rio solo. "Mierda, matar a ese omega valió la pena, ¡finalmente eres mío!"

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"No te preocupes, te amo tanto, tanto que estoy dispuesto a mancharme las manos de sangre".





You're my Obsession || (Dark Yizhan AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora