CAPITULO 4.

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Hace un momento me encontraba cayendo al vacío y de repente me encuentro en los brazos de un hombre, no entiendo que esta pasando, mis pensamientos inundan mi cabeza y solo puedo pensar en que sucedera ahora.

-Capitan es la princesa!, la vimos en el mercado de ese reino- Exclamo bepo

-Es es el oso que habla! - grite sin pensar.

El hombre que me sostenia me puso de pie y se presentó ante mi.

-Somos los piratas de corazon y yo soy su capitan- antes de que dijera algo mas, me atreví a interrumpir.

-TRAFALGAR... Te he visto en los carteles de se busca que llegan al reino, todos esos son llevados al castillo y proceden a quemarse, en una ocasion mi padre sostenia algunos carteles y se atrevio a decir que eran el futuro de la pirateria, ahi estaba el tuyo.

A el parecia no importarle mis palabras...

-Penguin llevala a mi habitación, buscale ropa, partamos inmediatamente- se dio la vuelta y se fue. En mucho tiempo no me había sentido tan aliviada y a la vez tan incomoda.

Penguin me llevo por los pasillos hasta llegar a una habitación pequeña pero con una hermosa vista al fondo marino, dentro habia un pequeño librero, un escritorio y una pequeña lámpara en el.

-No te preocupes, asi es el capitan, ya lo conoceras mejor, el vendrá mas tarde, pero si necesitas algo no dudes en buscarnos- sonrio y se fue.

Procedi a desvestirme y cambiar mis ropas, naturalmente solo tenian uniformes, pero me habian dejado una sudadera negra con amarillo y un curioso bordado. Pasaron dos horas desde ese encuentro inesperado, me encontraba sentada en la cama, cuando derrepente empezaron a abrir la puerta.

Trafalgar entro sin mas, traia en sus manos una taza de té y sin decir nada solo se acerco a mi, puso su catana recargada en la pared, acercó la silla de su escritorio y se sento frente a mi mientras sus manos se posaban en mi frente, yo no sabia que hacer, me gano el nerviosismo y me puse temblorosa.

-tranquila, solo reviso que no tengas heridas, ya que también soy medico.

-yo no...- me quede muda, titubeando como niña.

-Supe del incidente en tu pais, hay un gran alboroto en estos momentos supongo que querias escapar y solo encontraste esa solución-

derrepente la habitacion se lleno de silencio y el simplemente se levantó y se dirigio a la puerta.

- Puedes quedarte el tiempo que desees, te encuentras en buen estado, nada de que preocuparse, toma esa tasa de té y cuando estés lista puedes salir- dijo con indiferencia, parecia ser un hombre frio y calculador.

Me senti tan aliviada, intimidada y confundida, solo asenti con la cabeza y al verlo salir, las lagrimas brotaron de mis ojos como un rio, estaba agobiada y aliviada a la vez.

Recorde ese dia en que mi padre y yo hablábamos de sus aventuras y me atreví a decir que deseaba subir a un barco pirata, pero nunca imagine que seria tan pronto. Caí rendida del cansancio y me quede dormida, por la noche desperte y vi que Law dormía sentado en la silla de suescritorio y con curiosidad me acerque al librero de su habitación, procedi a querer tomar uno de los estantes de arriba, pero no lo alcanzaba, en mis intentos de bajarlo una mano se poso sobre mi y lo tomo, mientras quien estaba tras mio decia.


-Buena eleccion, es una novela muy enriquecedora, habla sobre la complejidad del ser emocional-

De un pequeño brinco me fui hacis atrás y sin cuidado cai en sus brazos, otra vez...

-Perdoname, solo queria distraerme un poco, no tenia intencion de estar husmeando-

-Mientras estes con nosotros, puedes disponer de lo que desees.

Estuvimos hablando por horas, queria saber sobre sus aventuras y yo le conte las de mi padre, parecia atento cuando le dije que navego junto a Roger y hable, fue una charla amena, hasta que cai rendida de sueño.
A la mañana siguiente sali y fui directo a buscar algo de comer, me encontre con algunos miembros de la tripulación, que se disponían a comer.

-Ey! Miren es nuestra nueva nakama!, venga princesa, acompañenos- todos reian y parecían una gran familia.

-pueden llamarme t/n no es necesario que sigan diciendome princesa, es un título innecesario-

sonreí y me sente a compartir con ellos, mientras escuchaba y veia como hablaban de sus aventuras, sentado en una esquina Law, comiendo mientras nos miraba, en realidad parecia un hamster, con un cachete regordete.

Lo mire y le sonrei agradecida por la oportunidad de estar ahí, durante dos años forme parte de esta tripulación, eramos una gran familia, recorrimos islas, compartimos nuestras vidas...

Por Ti (Trafalfar/ Zoro X TU) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora