Destino

Capitulo 9º

<<Natasha>>

Abro los ojos y noto que Wanda no está, me reincorporo alterada, ¿ha sido un sueño?, yo creo que no. Me levanto de la cama y veo su ropa en el suelo, vale no ha sido un sueño y eso me alegra más.

Suspiro hondo, camino hacia el armario y saco una camisa que me quede grande. Cuándo me visto camino hacia el salón y veo a Wanda cocinando. Me apoyo en la columna que hay en la cocina y la veo detenidamente, lleva el pelo recogido y lleva una camisa mía grande de botones.

-Buenos días.- sonrío por verla sobresaltar por el susto.

-¡Joder! .- me río.- que susto me diste.- sonríe sonrojada.

-Perdona, es que se te veía muy concentrada cocinando .- deja la sartén a un lado y apaga el fuego .- ¿qué cocinas?.

-Tortitas .- se acerca a mí y le agarro la cintura .-¿te gustan?.

-Me gustan mucho .- le doy un beso rápido.

-Siéntate te serviré un plato.- la suelto y me siento en uno de los taburetes.

La veo servirme un plato, es tan guapa, tan perfecta. Se sienta a mi lado y sonríe.

-Lo de ayer fue increíble .- me ruborizo, es la primera vez que me pasa.- tranquila nat .- me da la mano y se ríe.

-Perdona .- sonrío y me como una de las tortitas.

-No hay de qué .- come de su plato.- ¿Hoy tienes reunión?.

-No, gracias a dios .- me acaricia la mano.- si quieres después del trabajo te busco y damos una vuelta.- como lo que me queda de las tortitas.

-Me encantará.- se levanta, coge los platos y los deja en el fregadero.

Me levanto y me tiro al sofá, hasta que a los segundos siento el peso de Wanda sobre mí. Nos miramos la una a la otra y le acaricio la cara, pero yo le doy el tema de conversación.

-Quiero darte una cosa.- me mira extrañada y se sienta en el sofá.- espera .-me levanto rápidamente y camino hasta mi habitación, abro un cajón y saco la caja donde se encontraba el anillo de Wanda.

Camino con pasos ligeros y me siento al lado de ella.

-Esto es tuyo.- abro la caja, ve el anillo y sonríe.

-Gracias por guardarlo.- se sienta encima de mí y me besa apasionadamente.

Agarro su cintura juntándose más a mí, mientras que nuestras lenguas juegan divertidamente. Desabrocho lentamente la camisa de Wanda mientras ella besaba mi cuello haciendo que mi cuerpo se contraiga. La separo de mi y beso su cuello bajando hasta sus pechos mientras la escuchaba jadear.

Pero la diversión se corta cuando suena el timbre.

-¿Quién te llama a estas horas? .- me mira con intriga.

-Ni idea.- la miro de la misma forma.- voy a mirar.- la dejo en el sofá.

Camino rápidamente y abro la puerta.

-Hola hija.- saluda mi madre.

Rápidamente cierro la puerta y corro hacia Wanda.

-Corre y vete a mi habitación.- se levanta asustada.

-¿Quién es? .- camina hacia mí lentamente.

-Mi madre.- ponte ropa mía del armario.

-¿Qué hace aquí?.- se ríe.

-Yo que se Wanda.- sonrío.- anda ve.

-Vale... -camina rápidamente a la habitación.

Me coloco bien la ropa y abro la puerta, al verla sonrío y deslizo un mechón de mi pelo detrás de mi oreja.