𝟏𝟗𝟓𝟎/𝐒𝐨𝐨𝐤𝐚𝐢

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El cielo era gris y olía a tierra mojada, tal vez era porque había llovido.

Llevo a sus labios a la tasa de café, mientras veía hacia la ventana. Todo era aburrido y ya no tenía ideas para sus libros, quería irse de ese apartamento y correr. Sentía que todo el mundo lo veía, sentía que todo el mundo hablaba de su pequeño secreto.

Porque si, HueningKai tenía un secreto, uno muy grande. Que si alguien lograba descubrirlo probablemente lo matarían o lo torturarían, y si tenía suerte podía ir a la cárcel.

—Hola Kamal. ¿Cómo estás?— No se había dado cuenta cuando su madre había entrado, estaba tan absorto en sus pensamientos, que no escucho nada.

—Hola madre, bien. ¿Qué tal tu día?—Respondió con una sonrisa tensa.

—Bien. HueningKai— Al oír eso se tensó más.

—¿S-Si?— Dejó su tasa de café en la mesita y miró a su madre, que estaba de brazos cruzados frente a él.

—Tu padre y yo hemos estado pesando en por qué no has tenido novia— Dijo en un tono acusador. —Digo, ya tienes 23 años, ¿No es raro?—Término diciendo, sentándose a un lado de Kai.

—Mamá, ya te dije que no tengo novia porque no me gusta nadie, nadie ah podido enamorarme. ¿O piensas qué es por otra cosa?— Pregunto sin reflejo alguno de nerviosismo, aunque por dentro era todo lo contrario.

—No, solo era por curiosidad cielo, pero ya sabes que si no traes a una chica a esta casa, tu papá va a pensar cosas que no— Se dirigió a la puerta dispuesta a irse.

—Ya se, pero por favor, tengan paciencia— Cerro la puerta, dejando a un HueningKai triste y diciéndose a sí mismo

                        ¿Por qué a mi?

Soobin iba saliendo del trabajo, estaba nublado así que decidió ser precavido y sacar su paraguas, por si las dudas.

Caminaba lento y seguro entre los charcos, solo esperaba ir a cualquier lado menos a su casa, pero como dios lo odiaba no tenía de otra más ir a su casa.

Donde se encontraba su familia, la poderosa familia Choi. La misma familia que lo quería casar con Yeji para su favor, aunque él ya había dicho miles de veces que no, y que no le interesaba lo más mínimo la chica, a ellos no les importaba.

—Hola, chico lindo— Dijo una mujer a Soobin.

Este solo volteo y la miro de arriba abajo. Desde hace mucho tiempo a Soobin nunca le gusto una chica, ni si quiera le parecían atractivas.

—Hola— Dijo seco y siguió su camino, pero la mujer parecía querer algo más.

—Wow, ¿Así eres con todos? Eres muy atractivo y lo desperdicias con tu carácter— Dijo la mujer, mientras encendía un cigarrillo.

—Lo siento, tengo esposa, pero gracias por decir que soy atractivo— Y con eso la mujer se fue indignada.

Algo de repente cruzo la mente de Soobin, algo que solo él sabía.

Paso por su mente aquel chico lindo de hace muchos años, años qué pasó buscando a ese chico de su misma escuela. El chico de cabellos cafés y bonitos ojos, la persona que había echo latir el corazón de Soobin por muy poco tiempo, pero para él era el tiempo más largo y más lindo que pudo experimentar.

Solo con recordarlo se hizo una sonrisa en sus labios y siguió caminando.

K ondaaaaaAaaaa, espero que estén bieeeen y que su día halla estado bonito uwu, linda noche :3