Vaivén.

3 0 0
                                    

La alegría desbordaba mi vida, hasta que se me ocurrió mirar tu día, vi que ya no sonreias, que tu no eras quien creía, te vi diminuto, miserable insignificante y dolía.

Me hablaste por horas, querías verme, no sabía que decirte pues ya no mereces tenerme, yo si deseo tenerte pero como un amigo de años y tu no aceptas perderme.

La tristeza en tu voz, la mirada perdida, temí por tu alma y por tu alegría, no puedo meterme pues hay otra que te guía, Que te dice que hacer, que pensar y que creer pero ni siquiera sabe que tu eliges quien ser.

Por primera vez me cuestioné si debía volver, si dónde estoy es mi lugar o dónde yo quiero creer que lo es, por primera vez te soñé desde la última vez.

Ocho años, ya van ocho años de este vaivén, ninguno suelta, ninguno se va pero tampoco nos decimos: vén.

Una vez más suelto versos sin sentido, una vez más tus latidos a mi rumbo dejan perdido. Y sin discutir sigo con éste papel de olvido fingido, aunque mi corazón lata afligido.

Versos de mi 10% Donde viven las historias. Descúbrelo ahora