Baby thoughts | SaiDa

🍼 Diez

Sana frotó sus ojos cansada, apartando las sábanas para levantarse de su cómoda cama, no había logrado dormir, pero de todas formas se sentía cansada. Buscando sus pantuflas a tientas en la oscuridad de la habitación, cuando las encontró acudió al llanto de su pequeña

Mina estaba muy pequeña para entender que sucedía con sus papás y se encontraba muy confundida con la situación, esa noche el olor a feromonas molestas de la pareja aún no se habían esfumado, lo cual mantenía a la bebé inquieta e incómoda por qué la sensación extraña le daba algo de miedo, y se soltaba a llorar.

La omega camino hasta la habitación de su cachorrita, ignorando la presencia de su esposa que se encontraba moviéndose inquieta en el sofá, sin poder conciliar el sueño, paso de el lugar yendo directo hacia donde se encontraba la cuna de la bebé, esta se encontraba llorando y moviendo sus manitas, en busca de atención.

– Shh, ya estoy aquí –la tomo en sus brazos, menciendola de inmediato, procurando que dejara de llorar.

"Mami soñé feo"

La pequeña sollozaba a la ve, que intentaba balbucear cosas inentendibles para su madre, la omega simplemente sexo sus lágrimas y dió un beso en su coronilla, acomodando mejor en su pecho, la pequeña se acurrucó allí donde el aroma de su papi abundaba, haciendo imperceptible el otro que estaba molestandole, guío si manita hacia su boca, intentando contener las feas sensaciones que había experimentado.

Sana salió nuevamente, había comprobado que Mina no quería dormir solita por alguna razón, así que se la llevó junto a ella. Dahyun está vez estaba sentada, observando a su esposa e hija, no dudo en ir tras ellas, pensando en que las cosas no podían seguir así con Sana, no le gustaba.

La menor entro a la habitación, pero cuando estuvo apunto de cerrar la puerta sintió como algo la obstruia, allí estaba la alfa, simplemente ignoro su presencia de nueva cuenta y camino hacia su cama, para acostarse junto a su bebé.

La alfa también se recostó en la cama, a un lado de su esposa, pero está de inmediato se dió la vuelta, dejando la pequeña Mina en el espacio que sobraba de la cama, Dahyun bufó.

– No deberías dejar a Mina en la orilla de la cama –expresó la mayor, pero Sana hizo todo su esfuerzo en hacer parecer que no lo escuchaba.

– Sana, no seas terca, deja a la bebé en medio de la cama, ella solo está asustada debido a las feromonas de hace rato, un ambiente familiar será lo mejor para ella.

"Ay que aburrimiento, ¿y si jugamos a qué me das leche de tu pechito?"

Con ayuda de sus pequeñas manos, Mina intentaba quitar la tela que obstruia su paso al camino de la felicidad, pero le era casi imposible pues admitía que aún no era una profesional en eso de desabrochar botones. Ella era ajena de lo que sucedía al rededor. Su mami suspiro en ese instante, y tomándola con cuidado la levanto para cambiarla de lugar.

"Chale, ya lo estaba logrando, la traición, la decepción hermano"

La omega realizó la acción y de inmediato estaba dispuesta a voltear se de no ser por una mano sosteniendo su hombro, cuidando de no lastimar a la bebé en medio de las dos.

– No quiero estar peleada contigo –dijo la alfa, mostrando que estaba arrepentida de su actitud anterior, dejando de lado el orgullo– lamento si te hice sentir mal, estaba estresada por lo de el trabajo, no debí desquitarme contigo.

Sana suspiro, bajando la mirada hacia su pequeña, que emitía soniditos desesperados mientras tiraba de la tela de su camisa de pijama.

"Mamá Dahyun, ¿Recuerdas cuando te dije que te amaba? No fui yo, fue el autocorrector"

Y bueno, Mina seguía resentida por ser cambiada de lugar cuando según ella estaba cerca de el objetivo.

– Sentí cómo si todo aquello que decías lo pensabas de verdad... Fue tan, no sé, era como si hablara una persona diferente de la Dahyun que conozco.

Dahyun asintió apenada, pasando sus grandes manos por las mejillas de su esposa, Sana no merecía el trato que le había dado.

– Fue idiota y ridículo lo sé, ¿Podrías perdonar a esta alfa tonta? –preguntó esperanzado de resolver el problema– Eres muy valiosa para mí Sana, no dejes que nadie te haga pensar lo contrario, así sea yo misma.

"!Alguien abra estooo¡"

Mina daba con sus pilotos en el pecho de su madre, pero estos no tenía fuerza alguna, así que pasaban desapercibidos para la omega inmersa en la mirada de su alfa.

– Pero me vuelves a hablar así y no le ves más Kim Dahyun –advirtió la menor sediendo ante las disculpas de su alfa, a fin de cuentas ambas se amaban con la misma pasión, este día la presión de la alfa, pero eso no significaba que iba a aceptar un trato de esos, pero por esta vez todo podía quedar en el pasado.

– Está bien Minatozaki Sana

– Y...

Fueron interrumpidas por un balbuceo, lleno de exigencia, casi un grito enojado de su retoño.

"TENGO HAMBRE POR TODO LO SAGRADO MAMI SANA, QUITA ESA TELA DE EL MEDIO Y ALIMENTAME DE UNA BUENA VEZ"

– Creo que alguien quiere atención –señaló Dahyun sonriendo

– Si, lleva rato tirando de mi camisa, debe tener hambre.

"¿entonces estabas ignorandome? Lo pensé de todos menos de ti mami"

– ¿Preparo el biberón?

"Hey, ¿Cuál es esa obsesión con el biberón? Primero me das chupetes y ahora esto, ¿Segura que eres mi madre?"

– No, no te levantes –Sana detuvo a la mayor, a la par que hacía a un lado la camisa de el pijama que utilizaba esa noche, Mina por fin sería feliz.

– Bueno –la mayo se acomodo a sí misma, y también a Mina, para que pudiera estar más cerca de el pecho de Sana y así poder alimentarse– ¿entonces todo bien?

– Ajá –comentó la omega, que sostenía el cuerpo de Mina para mantenerla en aquella posición.

"Todo perfecto bro"