𝗹𝗼𝘃𝗲 𝗮𝘁 𝗳𝗶𝗿𝘀𝘁 𝘀𝗶𝗴𝗵𝘁

why did you come?

Semanas después...

Hoy era el primer día de escuela, ya era el último año de Sunoo, así que estaba feliz de que no volvería a ese sofocante lugar. Entro algo triste, ya que ahí había empezado todo con Sunghoon. Pero no importa, Sunoo no dejaría que eso arruine su primer día.

Se reencontró con sus amigas de nuevo. Con Ni-ki no, ya que siempre acostumbra a faltar el primer día. Dice que es aburrido.

Cambiando de tema, dónde está Sunghoon? No lo encontraba por ningúna parte. Él sabía que si lo volvía a ver se podría a llorar o saldría corriendo, pero realmente quería verlo, aún que solo fuera su sonrisa...

Busco por todo el lugar, pero nada, no había ningún rastro de él. Decidió rendirse, esperaría hasta el primer receso para búscalo de nuevo.

...

Paso el primer receso, luego el segundo, después el tercero, y por último el cuarto, y en ninguno de ellos lo encontró. Se sintió tan mal, solo quería escucharlo o verlo aún que sea solo una vez, pero al parecer no se iba a poder.

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ーLo siento, no hay suficientes pruebas como para poder comenzar una investigación.

Hoy nuevamente Sunoo intento ir a la policía luego de las clases, y mostrar algunas pruebas que tenía para que Wooyoung de una vez por todas estuviera detrás de las rejas. Pero no, como siempre recibía la mismas respuestas.

Suspiró - okey, gracias - dijo y salió de la comisaría.

Estaba estresado y quería llorar, quería que Sunghoon estuviera con él en este momento. Quería abrazarlo y escucharlo decir lo mucho que ama, solo necesitaba eso, no pedía mucho.

Fue a su casa llorando, no soportaba esto, no soportaba estar casi todos los días recibiendo mensajes o "regalos" hasta su puerta. Odiaba tener que mentirle a su padre diciéndole que eran regalos de Sunghoon, y mucho más ahora que terminaron. Odiaba no poder estar con Sunghoon por esta situación. Odiaba todo.

...

Llegó a casa con los ojos empapados, no quería que su progenitor lo viera de ese modo. Así que trato de subir a su cuarto sin que su padre lo viera. Para su suerte, lo logro.

Cerro su puerta con cuidado, tiró su mochila a cualquier lado y se recostó en la cama.

Estaba tan triste, recordar todo lo que paso son Sunghoon, los momentos en dónde pasaban la tarde jugando, viendo películas, abrazándose y haciéndose cariño mutuamente. Quería verlo, abrazarlo y decirle lo mucho que lo extraño, tal vez solo pasaron unas semanas, pero sentía que habían pasado años. Necesitaba escuchar su cálida voz, ver su linda sonrisa, y por último besarlo. Lo que más deseaba era besarlo, cada vez que lo hacía se sentía en el cielo. Recordar todo eso era tan lindo, saber que lo muy feliz que lo hacía era increíble, nunca pensó que amaría a una persona tanto cómo a Sunghoon. Con solo escuchar su nombre su pequeño corazón se aceleraba de la emoción y sonreía más que nunca. La primera vez lo que lo vió pensó que era muy buena persona, tenía la necesidad de interactuar con él. Y eso hizo, le hablo y lo convirtió en la persona más especial para él.

Un ruido lo distrajo de sus pensamientos. El sonido provenía de su ventana, así que se paro sin ningún ánimo a ver. Abrió las cortinas y vio a un chico de pelo negro y alto. Obviamente lo reconoció, no podría olvidar a Ni-ki.