Capítulo 2

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Capítulo 2: Déjame en paz Jackson.

Mierda.

Mierda.

Mierda.

Agitada, sudada, toda echa un desastre me paré en la puerta de la clase que tocaba, todos me miraron con mala cara incluyendo al profesor de matemáticas.

–Perdón por la llegada tarde ¿puedo pasar?– agitada y sofocada,el nadamás me miro y dijo:

–Podría decir, Señorita Madison ¿el motivo de su llegada tarde?

–Me ha cogido tarde señor Marcus.

–De eso ya me di cuenta, señorita Madison...alguna otra excusa?

–No señor Marcus –bajé la cabeza, más bien me metí en el papel de niña regañada por mamá.

–Entonces señorita, espere afuera, cuando concluya la clase resolvemos el problema de su llegada tarde – y con esto se dió la vuelta y siguió con su clase.

Bien, me echaron de la clase, bueno, más bien ni llegué a entrar, pero igual eso no marca la diferencia que seguro llamarán a mi padre.

Aproveché el tiempo que estaba afuera y di un paseo turístico por el instituto, me encontré a varios compañeros de otras clases. Hasta que sonó el timbre que daba la información de la siguiente clase. Me apresuré a llegar a donde estaba el profesor Marcus, me esperaba afuera.

Por suerte, no dijo que iba a llamar a mi padre por lo que me fui relajando más, pero si la próxima vez me cogía tarde para entrar a su clase si iba a llamarlo, en fin, un alivio completo.

************

Terminé la última clase de la mañana y fui directo a la cafetería, por lo cual al entrar vi a Mónica en un grupo de chicos, como siempre.

Me acerqué y nadie notó mi presencia, como siempre,hasta que Mónica se dio cuenta que estaba allí.

–Oh chicos claro que iré no se....ah ¡Mi mejor amiga! , perdonad chicos ahora vengo.

Mónica se fue conmigo para una mesa y noté que no le quitaba los ojos a un chico.

–¡Hey!– le puse la mano en la cara para que me prestara atención– recuerda que tienes novio y te dió el mejor sexo de tu vida.

–¿Qué insinúas? – me frunció el ceño.

–Deja de mirar a ese chico y buscate una servilleta que vas a babear la mesa – le tiré una servilleta.

–Déjame – me echó una risa, que me dió gracia – al menos tengo novio y me hace el mejor sexo del mundo.

Ugh.

Golpe bajo.

–Hey, no me saques eso en cara que me siento horrible– le tiré otra servilleta, la cual esquivó.

–Ahora vengo, iré a buscar un refresco a la máquina– se puso de pie y se dirigió hacia la maquina.

Y me quedé sola en la mesa, jugando con el lápiz que tenía en la mano. Levanto la vista y veo a alguien sentado en el lugar donde estaba sentada Mónica que por cierto no era ella.

–Hola primita linda –saludó Jackson son cara de alegría mientras yo tenía tremenda cara de mierda.

–¿Qué quieres Jackson? – acompañe ese comentario con los ojos revirados.

–Vaya Ashly querida, que manera más hermosa de saludar a tu primo favorito en un día tan hermoso–dijo mirando el trasero de una chica que iba pasando.

Ashley [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora