Capítulo 4

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Remus y Sirius se encontraban entre los pocos cientos a los que se les había permitido aparecerse directamente al lugar de la Copa de Quidditch, así que el día antes del partido, Harry se vio obligado a soportar el horror que supone la aparición.

Cuando sus padrinos y hermanos adoptivos aterrizaron en la cima de una colina cubierta de hierba, Harry se derrumbó, con arcadas. "Odio la Aparición", se atragantó.

Una voz se rió, y Harry levantó la vista para ver a dos hombres. Uno de ellos era alto y de piel oscura, y el otro era-.

"Severus", refunfuñó Harry juguetonamente mientras se ponía en pie, agarrándose el estómago, "¿te ríes de mi dolor?".

"Por supuesto que no", dijo Severus, con una expresión inexpresiva. "Chucho. Remus".

"Sni..."

"Hola, Severus", dijo Remus amablemente, poniendo una mano sobre la boca de Sirius. "¿Por casualidad tienes un calmante para el estómago?"

"Cuando se trata de Harry y la Aparición, siempre vengo preparado", respondió Severus con una leve sonrisa, sacando un frasco de su bolsillo.

Harry tomó el frasco de su profesor de Pociones y se lo tragó, jadeando. "Gracias", dijo aliviado, devolviéndole el recipiente. Severus lo guardó.

"Harry, te presento a Kingsley Shacklebolt". dijo Remus, señalando con la cabeza al moreno. "Ayudó a arrestar a Dumbledore".

Harry sonrió. "Muchas gracias, señor Shacklebolt", dijo afectuosamente, ignorando a los gemelos que se reían detrás de él. "Es un placer conocerle".

Shacklebolt se rió. "Todos me llaman Kingsley, Lord Harry". Hizo una profunda reverencia.

Harry frunció el ceño. "Lord..."

Los ojos del hombre centellearon. "Usted es el Señor y Heredero de Hogwarts, ¿no es así?"

Remus se quedó boquiabierto y Sirius graznó sorprendido. Harry puso los ojos en blanco, dándose cuenta de que había olvidado "convenientemente" informar a sus cuidadores de su condición.

"¿Cómo te has enterado?" Preguntó Harry con calma.

"Sabía que James descendía de Gryffindor, y que Lily descendía de Ravenclaw y Hufflepuff; ya que derrotaste a Voldemort dos veces-" ignoró el respingo de Severus "-no fue difícil adivinar que también te convertiste en Señor y Heredero de Slytherin".

"¿Cachorro?" Remus chilló. "Tú..."

"Merlín, Remus", resopló Sirius. "Podríamos haberlo adivinado. También sabíamos todo eso. Bueno, mi señor", añadió dramáticamente a Harry, "¿le mostramos sus habitaciones temporales?" Se inclinó por lo bajo, provocando la risa de los gemelos.

Harry recordó de repente por qué había omitido decírselo a sus padrinos.

⚜⚜⚜

Una media hora más tarde, Harry estaba de pie frente a una pequeña tienda de campaña para dos personas. Miró incrédulo a Remus y Sirius. "Er..."

"Cachorro", sonrió Sirius, "¿te has olvidado de la magia? Vamos, echa un vistazo".

Harry se sonrojó y se metió rápidamente en la tienda, ignorando las risitas de los gemelos y las carcajadas de Tom.

Dentro de la tienda... no era una tienda. Parecía ser el vestíbulo de una mansión. Harry puso los ojos en blanco. "Blacks apestosos y egoístas", refunfuñó.

"Perdón, ¿qué fue eso?" Preguntó Sirius inocentemente, apareciendo detrás de él. Remus, todavía con cara de asombro de que su cachorro fuera básicamente el dueño de Hogwarts, los gemelos y Tom le siguieron.

"Nada", dijo Harry con dulzura. "Sólo me preguntaba cómo te las arreglas para pasar por las puertas, teniendo en cuenta que tu cabeza está hinchada hasta el tamaño de la luna".

Fred y George soltaron una carcajada, y Tom sonrió. Sirius jadeó dramáticamente.

"¡Nunca me habían insultado tanto!" exclamó Sirius. "¡Cómo te atreves! Debería retarte a una guerra de bromas!"

Harry esbozó una sonrisa muy maliciosa. "¿Estás seguro de que quieres ir contra los gemelos y contra mí, querido tío? Una vez le hicieron una broma a Dumbledore y se salieron con la suya".

"¿Estás loco?" espetó Remus, mirando fijamente a Fred y George.

"Sí", corearon, sin negarlo siquiera.

"Eso me recuerda", reflexionó Harry, "quiero ver a Neville, Luna y Draco aquí dentro de una hora. Tenemos cosas que discutir".

"Claro-"

"-Harrykins."

"Bien, nada de guerras de bromas", hizo un mohín Sirius. "¡Dejadme que os enseñe el lugar!", declaró con entusiasmo.

"Te llevarás a los gemelos y a Tom", ordenó Harry. "Quiero hablar con el tío Moony".

Sirius saludó. "Vamos. Demonios, juguetito de Harry". Salió corriendo, seguido por los cacareados gemelos y un furioso Tom.

"¿Sí, cachorro?" Preguntó Remus en voz baja, bajando la mirada.

Harry suspiró y se frotó la frente. "Me disculpo por no habérselo dicho a ti y a Sirius. Yo-"

"Entiendo por qué no se lo dijiste a Sirius, Harry", dijo Remus en voz baja. "Sirius no es exactamente... bueno... Yo sólo, pensé-"

Harry, al darse cuenta de lo que Remus había pensado, tiró de su padrino en un abrazo. "Confío en ti, Remus", dijo Harry en voz baja. "Yo también confío en Sirius, pero...".

"Se burla más de tu título que darle respeto", dijo Remus, con la voz más cálida. Frotó la cabeza de Harry, relajándose. Con una voz mucho más suave, susurró: "No me importaría que fueras el rey de la humanidad de los magos, Harry, siempre te querré y respetaré".

Ignorando sus ojos ardientes, Es sólo polvo, sólo polvo, Harry susurró: "Gracias... papá."



***
¡LE DIJO PAPÁ! AAAAAAAAAH

Me emocioné xd

Sirius es como el trillizo perdido de Fred y George, un caos total

Harry Potter's Dark Mentor || #2 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora