Pasado
Ella ama los libros y yo amo verla leyendo porque le brillan los ojos cada vez que lo hace, supe que le gustaban los libros desde el primer día que la vi desde ese entonces la aprecio cuando la veo en los pasillos pero nunca me he armado de valor para poder hablar con ella, soy una mierda de persona que no merece a esa chica, mi padre siempre me lo ha dicho y yo me encargo de repetir sus palabras para tener en claro de no sirvo nada y no soy merecedor de ninguna chica. Sin embargo, no puedo sacar de mi mente a Chloe, si, se llama Chloe tiene un lindo nombre y siempre que la veo le quiero decir que me gusta su nombre.
—Connor —me llama Peyton.
—¿Qué pasa? —pregunto saliendo de mis pensamientos.
—Hoy hay una fiesta, ¿Irás?
—No puedo —me limito a decir.
—Últimamente te estás volviendo muy aburrido —dice.
—Estoy muy ocupado.
—¿Con qué? ¿Acaso nuestro amigo tiene novia?
Inmediatamente pienso en la pelinegra de ojos marrones. Una sonrisa estúpida aparece en mi rostro y mis amigos comienzan a burlarse de mí.
—Entonces... —dice Kenner— ¿Quién es la chica?
—Solo es un juego, nada serio —miento.
Los conozco perfectamente y se cómo son con las mujeres y lo que menos quiero es que traten mal a Chloe, ella no merece que estos idiotas quieran hacerle daño.
—Para ti las mujeres solo son un juego.
Creo una fina linea al escuchar su comentario. Nunca he tenido novia, ellos piensan que solo es porque soy un maldito mujeriego que no ama a nadie pero hay un motivo por el cual prefiero estar lejos de las mujeres, y si, he besado a chicas pero solo eso porque no quiero jugar con los sentimientos de nadie y les hago saber que no quiero nada serio.
—Si —digo sin saber que más decir.
—¿Algún día tendrás novia? —pregunta Peyton con un tono burlón.
—No sé...
Si algún día tuviese novia quisiera que fuese Chloe, ella vale la jodida pena, solo por ella intentaría ser el mejor novio aún cuando no este seguro de como serlo, lo intentaría.
Mis pensamientos vuelven atacarme de nuevo impidiendo que pueda escuchar lo que dicen mis amigos. Veo a la nada y así me quedo, pensando demasiado rápido sobre todo lo que ha pasado, sobre todo lo que me atormenta. Sin embargo, todo se desvanece cuando ella parece en la cafetería, camina con prisa hacia su mejor amigo. Parece asustada como todos los días cuando se trata de caminar sola por los pasillos, su cabello está despeinado y mis manos pican por acomodarlo, está usando esa ropa ancha que tanto le gusta o tal vez solo la usa para ocultar su cuerpo, de igual manera luce demasiado hermosa.
Apoyo mi mejilla en mi mano y la admiro. Su pequeña nariz se arruga cuando su amigo John le dice algo y ella mueve la boca para decir algo que le ocasiona desagrado porque crea una mueca. Se sienta muy cerca de él y no me pongo celoso sino me da tristeza e envidia porque yo quisiera ser él, quisiera que me hablará, que estuviese cerca y poder sentir sus brazos rodeando mi cintura. Chloe lo observa con fascinación y me preguntó qué estará pensando en esos momentos y me duele pensar que se sienta atraída hacia John, después de todo él es un chico por el cual varias chicas se sienten atraídas.
Ella acuesta su cabeza en su hombro y me giro hacia otro lado para no tener que ver esa escena, creo una fina linea y finjo que no me pasa nada porque después de todo no tengo porque sentirme mal, ella ni siquiera sabe de mi existencia y eso es lo que me jode más. Desearía estar cerca de ella y poder hablarle pero prefiero estar lejos de Chloe, es lo mejor yo solo ocasionó daño y no la merezco.
—Iremos a fumar un cigarrillo —dice Peyton quien se levanta seguido de sus dos amigos más leales.
Ellos se marchan y me concentro en escuchar sobre la fiesta que habrá hoy, están poniéndose de acuerdo para llevar las bebidas y otras sustancias más dañinas. Agachó la cabeza y de reojo miro hacia su dirección, casi termino cayendo cuando me doy cuenta que está mirando hacia donde yo me encuentro. Mi pecho sube y baja con rapidez y siento aquello en mi estómago que nunca había sentido, son... ¿Nervios?
Miro a mis amigos y finjo que estoy atento a la conversación, espero que me mire y al menos tenga un interés pero quién se podría fijar en mi.—Tienes que ir a la fiesta —me insiste un amigo mío.
Será muy estúpido lo que diré pero no recuerdo cual es su nombre. Mi mente no logra procesar nada sobre él, estoy tan concentrado en ella que tal vez me esté mirando que no puedo recordar el nombre de mi amigo.
—Lo pensaré —digo con desinterés.
Vuelvo a mirar para ver qué se han levantando y están saliendo de la cafetería. Rápidamente me levanto sin pensarlo mucho, invento cualquier escusa y salgo detrás de ellos. Se que está yendo a la biblioteca así que me quedo recargado en la pared esperando a que vayan a la biblioteca. Mis dedos repiquetean sobre la pared con poca paciencia, espero unos cuantos minutos y camino apresurado hacia el sitio.
—¿Y si me habla? —me pregunto a mí mismo.
Mis manos temblorosas sudan y las seco en mi sudadera negra. Me coloco la capucha y me armó de valor para entrar, el olor a libros viejos se adentra a mis fosas nasales y respiro hondo oliendo como si se tratara de toda esa mierda que inhaló. La veo buscando un libro y me apresuró a ir a un asiento, cojo el primer libro que veo y comienzo a pasar las páginas hasta que me detengo y finjo estar entretenido leyendo.
Mi cuerpo se estremece cuando siento la mirada de alguien. Parezco un mocoso emocionado porque ella me este viendo, pero es la primera vez que solo me observa ¡Chloe Foster me está viendo a mi! Joder quiero sonreír de la alegría pero finjo estar leyendo, quiero girarme y mirarla a esos ojos marrones que tanto me gustan pero el miedo me lo impide, se perfectamente que si me giro ella se irá porque seamos sinceros ninguna chica se fijará mi, yo solo le di curiosidad y solo eso.
Me fijo de reojo y ahora está con John, la manera en que la mira me hace dudar porque es la misma forma en la que yo la miro a ella. Ellos se marchan y vuelvo a respirar con normalidad, es entonces cuando me permito sonreír abiertamente sin importarme nada, por primera vez me siento tan jodidamente bien sin la necesidad de estar alcoholizado o drogado.
Me gustó que ella me viera y ahora que he tenido el privilegio de que sus ojos se posaran en mi he pensado que podría hablar con ella, sin embargo, tengo miedo que no tenga nada de que hablar así que voy hacer algo que jamás me imaginé que haría, voy a leer un libro. Por Chloe haría cualquier cosa incluso leerme sus libros solo para tener un tema de conversación.
...
Nota:
En este libro se pondrá una parte desde la perspectiva de Connor cuando estuvo con Chloe y se pondrá un capítulo del presente, les informó para que no se confundan.
Quiero aclarar que estás partes del pasado serán algunas muy cortas y por supuesto habrán algunas cosas que Chloe nunca dijo. ,
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La droga de la felicidad #3
Fiksi RemajaY es que Connor no sabe amar, nunca aprendió el significado de amor porque cuando alguien está dañado mentalmente no puede amar, ya que ni siquiera puede amarse a sí mismo.