Mi cabeza estaba latiendo. Sentía mi cuerpo pesado, adolorido como si un camión hubiera pasado por encima de mí.
¿Qué mierda de sueño tuve la noche anterior?
Abrí los ojos y me arrepentí, la luz fuerte molestó mis ojos. Volví a cerrarlo maldiciendo mentalmente a María, sin duda debe haber sido ella la que vino aquí y dejó la luz encendida. Quiero saber cuándo va a parar con esta estúpida manía.
Me levante de la cama con los ojos medios cerrados, fui al baño y me arranque la ropa. ¿Qué hora debe ser? El agua caliente choco contra mi cuerpo, gemí de satisfacción. Era todo lo que necesitaba.
Abrí mi ojo izquierdo y busqué el jabón. ¿Desde cuándo esta mierda es azul? Ayer era naranja. ¡María! Con certeza debe de dejar de invadir mi espacio. Me froté el jabón en las manos formando espuma, volví a poner el jabón en la jabonera y pasé las manos con espuma por mi cuerpo, primero en la cadera, estómago y fui hasta... ¡Esperen! Abrí mis ojos y miré hacia abajo.
- Mi Dios... ¡Mis pechos! Mis pechos están grandes y algo caídos. ¿Desde cuándo tengo los pechos así?
No lo podía creer. ¡Mierda! ¿Qué es esta mierda? ¿Todavía estoy soñando?
Estaba asustada y fascinada al mismo tiempo. Si esto es un sueño no quiero despertar ahora, es genial tener pechos tan agradables de tocar. Yo les estaba masajeando con las manos. Hombre, eso es bueno. Me apreté los pezones entre el pulgar y el índice... ¡Cielos! Es tan bueno.
Estaba a punto de gemir cuando oí que abrían la puerta, mis ojos se abrieron y solté mis pechos, me vi en el reflejo, pero pronto me arrepentí.
- ¿Qué haces aquí? - le pregunté a Amelia que abrió y cerró la boca un par de veces, su mirada no dejó mi cuerpo desnudo y solo entonces me di cuenta de ello. Mis mejillas encendidas y yo tratamos de cubrirme de la mejor manera posible - ¡Amelia! ¡Fuera de aquí!
Quería gritarle y regañarla, pero estaba demasiado avergonzada para hacerlo. ¿Será que me vio masajeando mis pechos? Oh, Dios mío, nunca seré capaz de mirarla a la cara de nuevo. Aunque no es del todo malo.
- Yo... yo... Está bien - derrotada y con los hombros se volvió y salió del baño con la cabeza baja, pero volvió solo a poner ropa en la parte superior de la cesta de la ropa sucia.
Aspiré y sacudí la cabeza, esta chica se está volviendo loca. Me pregunto quién fue la idiota que la dejó en mi casa.
Volví a mi habitación, pero esta vez no quería tocar esas bolsas, lo haría más tarde. Sólo tomé mi ducha y cuando salí, me acerque a la cesta de ropa sucia, con miedo tomé la ropa que la psicópata dejo aquí para mí. Que loco.
Me puse la ropa interior. ¡Un momento! ¿Ella toco el cajón de mi ropa interior? ¡No lo creo! Voy a matar a esa chica.
Me puse la camisa de los Bulls de Chicago, pantalones cortos de algodón azul oscuro y envolví mi cabello con una toalla. Abrí la puerta del baño llena de odio, pero me congele en mi lugar. ¡Maldita sea! Era la misma habitación de ayer, no fue un sueño. Quiero decir, ¿me desmaye? Amelia me secuestro ¿verdad? ¡Oh, mierda!
Tengo que irme, voy a enfrentar a la psicópata y le demandare que me lleve lejos de aquí. Mi madre va a hablar como demonios en mi oído por haber perdido el examen de matemáticas.
Salí de la habitación, la casa estaba en silencio. Me pregunto: ¿Quién vive aquí? Mire las paredes y vi algunas fotos, ¿Quiénes eran esas personas?
- Esa se parece a Marina, ¿será ella? ¿Por qué tiene una foto de una joven Marina?
Me quede mirando y vi a Ian ¿O puede ser su doble más viejo y con barba? ¿Qué es este jodido lugar?
ESTÁS LEYENDO
Stupid Wife
Fanfiction¿Te has imaginado casada con alguien que nunca soportaste en la vida? Luisita también lo había imaginado, sino todo lo contrario. Se suponía que iba a ser solo una mañana normal, Luisita despertaría, tomaría el café con su familia, e iría a la escue...