CAPÍTULO 4
Adeline
Habíamos salido del puerto a las once y media de la mañana.
Eran las dos de la tarde.
Habíamos llegado a nuestro destino.
Éramos diez personas.
Y cinco de personas ya estaban borrachas.
Estoy deseando ver como va a acabar esto..
Mientras Aidane, Liam, Brianna, Thomas y yo habíamos puesto cinco hamacas en fila y nos habíamos acostado en ellas, Sue, Luna, Keane, Daniel y Lucy -otra de las chicas que nos acompañaban- bailaban, "cantaban" y no paraban quietos.
-¡Eso, buenorra!- chillo Keane, aplaudiendo a Lucy que se había puesto a hacer twerking junto a la piscina.
Demasiado cerca de la piscina..
Levanta el culo y empújala, por favor.
Mientras Keane animaba a Lucy, Daniel y Sue habían comenzado un concurso de miradas y Luna los miraba atentamente, narrando cada gesto que hacían como si fuera un importantísimo partido de fútbol.
-¿No deberíamos quitarles el alcohol para que se les pase la borrachera y no se ahogue al llegar a la playa?- pregunto Brianna, se había puesto las gafas del sol y lucía un bikini que le quedaba espectacular.
Nos quedamos unos segundos en silencio.
-Nah- dijimos todos a la vez.
Sue se unió a Lucy y comenzó a bailar junto a ella mientras Keane, Luna y Daniel los animaban
-¡Aiiidanniiii, subele a la música!- chillo Daniel, "perreando" y mirando a Aidane, que controlaba el altavoz con la música
-Si sigo subiendo la música nos quedaremos todos sordos-protesto Aidane con las manos tras su cabeza y su torso al descubierto.
Daniel, indignadisimo, se puso las manos en las caderas y lo miró como si le hubiera dicho el peor insulto del mundo
-¿Ahora hablo tailandes, papi? Dije que le subas a la música.
Aidane rodó los ojos suspirando pesadamente y subiendo la música. Viendo que ya era algo tarde, empezamos a recoger todo el alcohol disimuladamente entre los cinco que aún seguíamos sobrios.
-¿Y ahora que hacemos con ellos?- dije cruzando de brazos y mirando como los otros cinco bailaban y chillaban. Se pusieron en fila uno detrás del otro y comenzaron a bailsrse entre ellos de una forma algo extraña
-Ahora es el momento.
Aidane se acercó rápidamente y empujó a Sue, que era la que estaba más alejada de la piscina en la fila. Ella chocó con Lucy, Lucy con Daniel, Daniel con Keane y Keane con Luna, cayendo todos al agua como si fueran unos bolos.
El pelinegro sonrió y dio una palmada
-Solucionado, vamonos- dijo sonriente, abrió un armario del pasillo y comenzó a mirar no se que cosa dentro.
Los chicos comenzaron a salir de la piscina con la máxima expresión de indignación y mal humor, pero al menos estaban más tranquilos.
Todos empezaron a desvestirse y to me quedé mirándolos extrañada
-¿Quieres que te ayude a quitarte la ropa?- me preginto Aidane, con una sonrisa socarrón y solamente un bañador puesto
Como puede estar tan desgraciadamente bueno
-¿Desvestirme para que?- entorné mis ojos en su dirección. El se cruzo de brazos y me miró divertido
-No intentarás nadar vestida hasta la playa, ¿no?.
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Mientras dure el invierno
Novela JuvenilUna universidad Un grupo de amigos Mentiras, una persona infiltrada, muertes y desapariciones sin explicación y una isla demasiado extraña A parte de todo, ¿que podría salir mal?