- Capítulo N°11: Visitas.

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Otra vez fin de semana, pero a diferencia del anterior, en este Taehyung sí tenía deberes pendientes.

Así que se encerró en un amplio cuarto que se suponía era el de huéspedes, pero que el híbrido había adecuado y convertido en su mini-estudio.

Taehyung pasaba mucho tiempo ahí.

En ese estudio tenía su piano (una reliquia) y un computador de mesa con algunas pantallas conectadas a su alrededor.

Todo muy "cool" y "bad boy" hasta que uno se fijaba en una pequeña casita para gatos llena de mantas y almohaditas pequeñas, una bola de lana de color negro medio desenrollada y un pequeño ratón de juguete.

En algo tenía que entretenerse.

Y como "lo prohibido es lo más apetecido", Taehyung le dijo a Jungkook que podía entrar cuando quisiera a ese cuarto para que, precisamente, no fuera a entrar y de hecho, hasta el momento Jungkook no había entrado ahí. Maravillosa jugada.

Bendito fuera el que había inventado la psicología inversa, o como se llamara.

Taehyung: 1

Jungkook: 3549815

Antes de encerrarse ahí, en el desayuno Jungkook le había preguntado si podía invitar amigos y Taehyung accedió. Al fin y al cabo, la casa era de ambos.

Pero ahora que estaba allí, se arrepentía un poquito, porque desde el estudio podía percibir el aroma y la grave voz de Yoongi en el pasillo.

"Jungkook no aprende ni a patadas" pensó Taehyung recordando los sucesos de la cafetería.

Luego de casi dos horas, Taehyung escuchó el ruido que producía algo grande al caer al piso y un grito de Jungkook.

Taehyung corrió al cuarto de Jungkook como alma que lleva el diablo y cuando abrió la puerta, sólo vio a Jungkook sentado en el borde de la cama y un tigrillo sentado en el piso.

Taehyung se quedó viendo cómo el tigrillo se subía a la cama y apoyaba la cabeza en las piernas del rubio y este, para colmo de males, lo acariciaba.

El pelinegro sintió una pequeña presión en el pecho y una rara necesidad de atención por parte del omega, así que se fue bajo la confundida mirada del menor antes de armar un escándalo porque según Taehyung, solamente él era digno de ser mimado por el rubio, cosa que carecía de sentido por completo.

El alfa volvió al estudio, pero ya no pudo concentrarse.

Entonces se transformó en gato y se dispuso a dormir, pero tampoco pudo conciliar el sueño.

"Malditos ruidosos"

Se levantó nuevamente y se puso a jugar con la bola de lana, pero después de saltar sobre ella, se deslizó, la bola rebotó y le pegó en la cabeza.

El gato agarró la bola de lana con su boquita y fue al cuarto de Jungkook, quien seguía mimando al gatote ese.

Se subió con un elegante salto a la cama de Jungkook y observó al rubio fijamente.

Cuando Jungkook lo miró, maulló y señaló a Yoongi con la patita.

— ¿Qué? — Taehyung maulló — No voy a despertar a Yoongi — Taehyung volvió a maullar pero en protesta — No — Volvió a negarle Jungkook.

Taehyung entonces rodeó a Jungkook hasta donde estaba Yoongi y le saltó encima. El tigrillo se movió y tumbó a Taehyung, que cayó de cabeza al piso.

¡Se busca! Compañero de piso [VKook] [Adaptación] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora