Ahora no sólo comparten habitación, también el cuidado de un niño de dos años.
Kihyun y Minhyuk, totalmente desconocidos y diferentes, uno hetero y mujeriego, uno homosexual y con un sentido fuerte de la responsabilidad, nunca pensaron que terminarí...
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Wonnie puso ojos de cachorro pero ambos jóvenes lo ignoraron.
Entonces sólo atinó a hacer un puchero y mirar su sopa con asco.
—No guta- les dijo cruzado de brazos.
—Pero si es muy delicioso –Kihyun le sonrió tomando un poco en una cuchara y dándosela estilo avioncito, Wonnie no abrió la boca.
—antes cómetelo tú.
—¿Yo? –Kihyun preguntó y el pequeño asintió, miró la sopa y un tic apareció en su frente– por supuesto, está deliciosa –alzó su pulgar bajo la atenta mirada de los dos pelinegros, el bebé lo miraba con expectativa y Minhyuk con una sonrisa ladina.
Se llevó la cuchara a la boca y fingió una sonrisa, se dio la vuelta y escupió haciendo gestos de asco.
—Creo que le serviré camarones –le dijo el menor.
Kihyun asintió tomando agua para quitarse el sabor del puré de brócoli y zanahoria y después tirando el resto de la papilla al lavabo.
—Al menos las papillas de frutas sí las come –le dijo Minhyuk– eso es un punto para él.
Kihyun asintió limpiándole la boca y acomodándole el babero.
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—¿En serio no te molesta la luz? –le preguntó Kihyun, Minhyuk negó dándole la mamila al niño que ya estaba acostado y medio dormido.
—¿Te falta mucho?, ¿no quieres que te ayude?
—No, sólo me falta un resumen.
—Puedo dictarte.
Kihyun volvió a negar– duerme, ahorita los acompaño.
Minhyuk asintió pero no durmió, no hasta que Kihyun apagó el foco y se metió a la cama.
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