紅蓮華 I ━ ❛ No, ellos no me enseñaron a ser fuerte, el mundo me obligo a serlo. Si quieres sobrevivir, esa es tu única alternativa ❜.
━━━𝐆𝐔𝐑𝐄𝐍𝐆𝐄 | Siglos atrás sé perpetuo la batalla más
grande entre los demonios y los humanos, teniendo como
de...
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❛ ¿Insinúas que Takemichi es un demonio? ❜
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━━━Los vientos helados del atardecer, golpeaban con ferocidad las calles —poco transitadas—, de Shibuya. El pilar enfocó sus ojos en el cielo. Nubes oscuras teñían el surco, dándole una imagen nostálgica. Tal y como informaron en el tiempo, se acercaba una noche tempestuosa.
«Será difícil buscar pistas», pensó la mayor.
De su cinturón saco algo parecido a un chip. Le dio tres sacudidas, y en cosa de segundos, se convirtió en un extraño dispositivo. Tenía incrustado en el centro un cristal que emitía una luz de color morada, como una linterna. Con esta, apunto a cada rincón de la calle.
Takemichi se acercó a Shinoa, intrigado—. ¿Qué es lo que está haciendo?
—Busca rastros elementales —respondió—. Los demonios, al morir o utilizar su técnica de sangre, dejan una marca de poder. Igual las obtienen al ser convertidos, aunque leve.
Asintió, aun con dudas. Miro, como la madre de su protectora, seguía moviendo el extraño artefacto para todos lados. De repente se oyó una alarma, justo al instante en que la luz se posó en una, de las únicas tiendas que había abierta en el sitio. En el letrero encima de la puerta ponía: «DISNEY STORE».
—Bien, buenas noticias. Mi dispositivo logró identificar un rastro de marca elemental que tenía guardado en el registro —hablo—. Uno de los demonios que los ataco está vinculado al asesinato de cuatro familias, del barrio de Arakawa.
—¿El caso del tío Shinya? Estará feliz de por fin resolverlo, se mantuvo despierto dos días completos en la sala de rastreo.
—Si —asintió—. Como solo nos dieron hasta las cinco para conseguir información, iré yo sola a revista el área.
—¿Alguna tarea?
—Nada difícil, solamente lleva a Hanagaki a salvo a su residencia, y vigilalo durante esta noche. Muzan ya debe saber que escaparon, no sé si le importará como para enviar a un escuadrón a exterminarlos, pero no me voy a arriesgar.
—¿No me darán una penalización por pasar la noche afuera sin autorización?
—De eso me encargaré yo, tú nada más hazlo.
—Entendido...
El involucrado dio un paso al frente, dudoso—. Etto, d-disculpen —dio un salto para atrás cuando los ojos de ambas se enfocaron en su persona. Era evidente que eran madre e hija, aquella mirada filosa era exactamente igual. Sacó con esfuerzo, la poca valentía que tenía—. ¿A q-que...? —trago en seco—. ¿A qué s-se refiere con l-lo de... vigilarme?
