SASUNARU "LUZ DE DISCOTECA"

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Desde siempre estuvo enamorado de él, desde esa vez en el jardín de niños se quedo prendado de él, incluso en el instituto, a pesar de que él se hizo novio de su mejor amiga Sakura, tenía la esperanza de que en algún día lo volteara a ver, aunque para ser sinceros en esos días parecía que él lo odiaba, hoy en día las cosas son diferentes, Naruto se esforzó mucho para sacar adelante sus estudios y para ser el mejor en su trabajo.
Los dos trabajan en la misma oficina junto con Sakura, y a pesar de que su relación termino en el instituto, siempre sintió que a pesar del tiempo nunca dejo de amar a Sasuke, por esa razón nunca se atrevió a dirigirse a él, Naruto quería pensar que era eso, pero desde la muerte de sus padres Sasuke tomo un semblante sombrío, se veía siempre tan triste, tan solitario, nunca se le veía más que en trabajo... Hasta ese día, la oficina celebraba su aniversario, y para ello una discoteca fue rentada para los empleados y Dios sabe como Sakura logro que Sasuke quisiera ir, Naruto llego con Shikamaru y Kiba amigos suyos desde hace tiempo, estaba deslumbrante, tanto que nadie puedo evitar notarlo, ese rubio con jeans ajustados y una camisa negra robo todas las miradas, incluso la de Sasuke, Sakura los saludo y los chicos se dirigieron a la mesa, Naruto se dio cuenta de la presencia del pelinegro hasta que estaba demasiado tarde para decirle a los chicos que se fueran a otra mesa, casi nadie dijo nada en un buen rato solo se dedicaron a beber hasta que llegaron Ino, Hinata, Temari, Tenten, Neji, Lee y Gaara entonces fue cuando el ambiente se calentó un poco y entre risas y tragos Hinata al fin se decidió a sacar a bailar a Naruto, el no era muy bueno para beber alcohol e impulsado por este fue con ella sin pensarlo, le hervía la sangre de verlo bailar con ella tan feliz, pero ¿por qué? Estaba seguro de que lo odiaba y siempre procuro dejarlo en claro, tal vez era por esa felicidad y luz que siempre irradiaba, si definitivamente era eso por tener lo que él no tenía y podía aspirar a tener, él quería esa luz, pero porque molestarse seria que todo ese odio que profeso seria falso, que tal si realmente se trataba de otro sentimiento, nunca podría saberlo si no se acercaba a él, así que se decidió, tomo un trago e invito a bailar a Sakura ya en la pista de baile se lograría acercar al rubio, las luces de la discoteca alumbraban parcialmente era difícil ver con claridad, en el centro de la pista de baile el ambiente estaba calentándose demasiado, Naruto estaba agarrando mucha confianza al bailar con Hinata, Sasuke intentaba en cada movimiento al bailar acercarse mas al rubio, hasta que finalmente lo consiguió. Estaba bailando con tanta seguridad hasta que sintió unas manos que rodeaban su cintura desde atrás al voltear se quedo pasmado al ver que era Sasuke
-¿No estarás asustado o sí? Miedosito-le susurro en el oído el rubio solo siguió bailando mientras Sasuke se pegaba cada vez más a su cuerpo
Por una orilla de la pista Sakura estaba desconcertada porque en un instante Sasuke salió de su vista, por otro lado Hinata también salió de la pista al no encontrar a Naruto, se encontraron y no sabían como  en pestañeo habían desaparecido, ambas chicas decidieron ir a la mesa, desde ahí logran observar justo al centro de la pista a un rubio y un azabache empapados en sudor  con sus cuerpos al limite y bailando como si nadie mas estuviera a su al redor. Naruto pegaba dada vez mas sus caderas a las de el azabache, y este no podía dejar de tocar su abdomen y pecho, al darse una vuelva quedaron cara a cara y el rubio no pudo evitar besarlo, y Sasuke obviamente que le siguió el beso e impulsados por las luces y la música los besos se hicieron cada vez mas calientes hasta que tuvieron que separarse por la falta de aire
-No puedo aguantar las ganas de tenerte- susurro el azabache en su oído
-Podemos ir a mi casa si quieres- dijo el rubio con una sonrisa picara, estaban en desventaja y Sasuke lo sabía,  el casi no había tomado nada y Naruto estaba muy borracho, acintio con la cabeza pero solo seria para dejarlo ahí y que no le pasara nada, el rubio lo tomo de la mano y corrió fuera de la pista, subieron al auto de del pelinegro y condujo a casa del rubio que se quedo dormido en el asiento del copiloto, al llegarlo bajo cargado del auto y entro la casa, después de dejarlo en su cama se disponía a irse
-Quédate conmigo- murmuro el rubio tomándolo de la mano- te quiero a mi lado
-Estas muy borracho
-Cada dia he estado sobrio y cada dia te he querido a mi lado- se alzo y lo beso, Sasuke no podía resistirse a el asi que lo tumbo en la cama y quedando arriba de el lo siguió besando, sin darse cuenta la ropa estorbo y al cabo de los minutos estaban desnudos, Sasuke beso y lamio cada parte la anatomía del rubio, ya no aguantaba más y entre suspiros y jadeos le suplico que lo hiciera suyo y el azabache lo hizo, llevo a Naruto a su limite unas cuantas veces esa noche hasta que ambos llegaron a su clímax y se quedaron dormidos.
El sol no tardo en entrar por la ventana y provoco que los amantes despertaran, el rubio estaba en los brazos de su pelinegro -buenos días- dijo con una sonrisa
-Buenos días- respondió el azabache un poco avergonzado y un silencio incomodo se formo en la habitación
-Nunca me imagine que esto pudiera llegar a pasar- dijo el rubio- siempre pensé que yo no te agradaba
-No, no me agradabas- el rubio lo miro consternado y con algo de vergüenza- pero era solo porque no quería aceptar que te envidiaba, de hecho siempre lo hice, tu pasaste por lo mismo que yo y tu nunca perdiste esa luz en tu ser y quería eso, envidiaba tu luz y que a pesar que yo te miraba con odio y me portaba mal contigo tu siempre me miraste con esa luz y brillo en los ojos
-Yo siempre estuve enamorado de ti- dijo el rubio- enterrando la cara en el pecho del pelinegro
-Creo que eso fue lo que no entendí, envidiaba tu luz, sin darme cuenta que tu eras luz que tanto quería
-Muy romántico para la forma en que se dio esto- soltó una risita y Sasuke apretó mas el abrazo y dándole un beso en la frente concluyo
-Si eres mi luz, mi luz de discoteca

El sol no tardo en entrar por la ventana y provoco que los amantes despertaran, el rubio estaba en los brazos de su pelinegro -buenos días- dijo con una sonrisa -Buenos días- respondió el azabache un poco avergonzado y un silencio incomodo se form...

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