Capítulo 1

3.3K 243 67
                                    

Susurros

<Magia>, [habilidades] y (cosas importantes)

Pensamientos de Bell

Bell Cranel, un aventurero de Orario abandonó su hogar para poder vivir una vida tranquila en un lugar remoto donde nadie le molestaría nunca.

Pero en medio del camino, se verá obligado a atravesar el bosque de los elfos y gracias a su suerte o mala suerte según cómo se miré, tendrá que quedarse a vivir ahí por unas pequeñas complicaciones.

-Bell: Bien, ya estoy casi ahí, solo tengo que cruzar este bosque.

Bell no tenía ni idea de lo que iba a pasar después, de hecho, ni siquiera sabía que este bosque era un bosque élfico.

Bell empezó a caminar rumbo al bosque, pero el grito de alguien lo detuvo.

Era una chica, su voz era aguda lo que decía que probablemente era una niña, parecía necesitar ayuda.

Bell dejó todas sus cosas (equipaje, mochila y armadura) en el suelo y echó a correr en dirección al grito.

Corrió como si su vida dependiese de ello y llegó a la escena del crimen, aunque para su sorpresa, no era lo que pensaba.

Había acertado, era una niña, una elfa pequeña que estaba siendo atacada por ... una pequeña araña.

No era ni un monstruo, era solo una pequeña araña.

Bell se golpeó con la mano abierta en la cara, cuestionando por qué pensaba que era alguien en apuros, era un bosque, lo más peligroso que había aquí serían lobos.

Los monstruos en la superficie son más bien raros, y los bosques son lugares sagrados gracias a los elfos.

Bell se dio cuenta de algo, se encontraba en un bosque élfico, él sabía que los elfos eran muy cuidadosos y no les gustaba tener intrusos pisando sus tierras.

Este comportamiento se afianzó después de que Orario fuese completamente destruido por un humano.

Los elfos ahora tenían aún más repudio por los humanos que cualquier otra raza, parecía que hasta preferían a los enanos antes que a los humanos.

-Bell: Creo que lo mejor será que me vaya y rodee el bos-...

Una espada se posó en su cuello y le hizo parar la frase abruptamente.

-Bell: ...-que

Un elfo, tenía el pelo blanco, era parecido al de Bell, pero no eran iguales, por así decirlo, tenía el pelo un poco menos puro que el blanco pelo de nuestro protagonista.

Tenía los ojos amarillos, pero era un color amarillo sucio, como si fuese oro oxidado.

El elfo apartó la espada de su cuello.

Tenía una piel blanca y unas orejas muy largas, denotando que era un alto elfo, Bell se dio cuenta de todo esto en solo el poco tiempo que tuvo antes de ser atacado por el elfo.

Bell esquivó un golpe de la daga que el elfo sostenía en la otra mano, aún así, fue demasiado lento y terminó con un corte en su mano izquierda, la cual usó para cubrirse.

-Bell: ¿A qué viene eso?

-???: ¡Aah!

Bell giró la vista, la niña ahora le había visto y se había sorprendido de ver a un humano en persona.

La niña asustada salió corriendo del lugar con miedo de que Bell le intentase hacer daño.

En ese momento de distracción, Bell bajó la guardia, el elfo aprovechó y realizó su ataque, pero Bell lo detuvo en un solo instante.

Yo no soy de este ReinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora