Habían pasado las horas, y cada uno había ido a su casa a buscar ropa y otras cosas para ir a quedarnos en casa de Yamada.
Después de haber llorado un poco antes de irnos de la escuela, y después de haber abofeteado a Yamada, me siento algo mejor, aunque sigo pensando en lo sucedido.
Así que... Débil, ¿eh...?
Pensé mientras salía de mi casa con una mochila, la cual cargaba en mi espalda. Allí había guardado ropa para cambiarme, mi cepillo de dientes, mi teléfono con su cargador, mi billetera —en caso de ser necesaria–, ropa interior extra y mi pijama.
Normalmente sería eso lo que llevaría a cualquier lado, y sabiendo cómo es la casa de Yamada —había ido en el pasado–, no tendría problemas en acomodarme.
O eso diría, pero desde la secundaria no he vuelto a ir a su casa debido a que los exámenes finales de la secundaria nos mantuvieron ocupados en aquel entonces, y Yamada tenía un método de estudio muy distinto al mío, lo cual ocasionó una colisión, y acordamos estudiar por separado.
Aunque eso fuera en el pasado, no sabía si había cambiado, pero eso no era lo que me preocupaba.
Al salir de mi casa con mi mochila en la espalda, usando un pantalón largo de color gris, una camisa blanca, y el abrigo blanco que me dio Atsushi —ya que siempre es cálido usarlo–, una bufanda de cuadros azules con blanco, y con unas zapatillas de goma, y unos calcetines, sentí el frío de la calle.
"¡Qué frío...! Menos mal este abrigo es muy cálido..."
Dije, mientras me envolvía en mis propios brazos.
"Es verdad, hace mucho frío estos días."
Escuché a una voz bastante familiar hablar a mis espaldas.
Al darme la vuelta, logré ver que se trataba de Atsushi, quien llevaba ropas de calle; llevaba una camisa blanca de mangas largas, unos jeans, unas zapatillas de cuero, una bufanda roja y una mochila negra que parecía también ser de cuero.
"¡Ah, Atsushi! ¿Y los demás?"
"Yo vine solo. Tenía que acompañarte."
"... ¿Por qué me proteges tanto?"
"Porque puedo, quiero, y porque me preocupa que hagas una locura."
"... ¿Cómo qué?"
"Veamos... Patear a alguien, irte con un extraño, que te secues-..."
Al no querer seguir escuchando sus tonterías, le dije:
"¡Ya entendí, ya entendí! Espera, ¡¿esas no son cosas bastante malas?!"
"Lo son, por eso me tomo la molestia de evitar que eso suceda."
"... Actúas como un guardaespaldas."
"Quizás lo soy."
"Deja de bromear, idiota."
"Aún así, dejando eso de lado..."
"¿Uh?"
"Se ve que te gusta usar mi abrigo."
"..."
En ese momento, sentí que el tiempo se detuvo al escuchar aquellas palabras.
¿Qué diab...?
"¡¿Por qué me sentiría cómodo?!"
"No lo sé, ¿quizás porque dijiste que era cálido?"
"¡¿Cuándo...?! Espera, ¡¿me oíste decir eso?!"
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GenderSwitchs Vol. 3 (Español)
Teen FictionEl otoño está llegando, y con ello, el festival deportivo se acerca. Sin embargo, Ryutsuki se da cuenta que uno de sus amigos está actuando extraño. ¿Qué podrá ser?