Capítulo 5: Cristalizado

364 98 12
                                    

Esta habitación es muy...lujosa o al menos me da ese aspecto, hay un pequeño candelabro de cristal colgando del techo, las paredes tienen sábanas blancas que me recuerdan a las habitaciones de los dioses, identifico el sofá rosa, hay una mesa de cristal frente a ella, me acerco notando pequeñas figuras de cristal muy lindas, figuras que se me hacen muy familiar.

—Es hermoso—sonríe NamJoon colocando sus manos sobre mis hombros. Sonrío también viendo con dulzura el pequeño rincón que hemos acondicionado para nuestro futuro bebé.

—No puedo esperar a ver un mini Joonie en esa cuna—contengo mis lágrimas de emoción. NamJoon y yo comenzamos a buscar un bebé, iniciamos un tratamiento con mi ginecóloga, para animarnos más decidimos adelantarnos acomodando un pequeño espacio en nuestro cuarto que sería de ese bebé.

—O una mini JinRi—besa mi mejilla abrazando mis hombros.

—O ambos—giro sobre mis talones observándolo. Sonrío abrazando su cuello—Pueden ser gemelos.

— ¿Enserio crees que serán gemelos en el primer intento?

—Todo depende de esa puntería—bromeo. Ríe un tanto avergonzado besando mis labios en un dulce gesto.

—Estaban allí—susurro viendo una figurita de cristal que mostraba un diminuto cangrejo—Estas figuritas de cristal estaban allí—siento un nudo en mi garganta.

—NamJoon las compró, ¿No es así? —levanto la mirada. SeokJin (o la copia de él) ha aparecido, luce más sereno y serio que el Jin original, tiene pantalones rosas como el sofá y una camisa blanca, todos los chicos hasta ahora usan pantuflas.

—Las había olvidado por completo—tomo la que muestra un elefante bebé. Mis ojos contienen las lágrimas y Jin sonríe complacido.

—Ustedes dos merecían ser felices.

—Fue mi culpa—aparto las lágrimas silenciosas dejando las figuritas en su lugar—Soy yo la que no puede tener hijos.

Nunca podré ser madre, no soy fértil, mi cuerpo no funciona para concebir y nunca lo hará.

— ¿Él te culpó?

—No, me apoyó en el proceso de aceptarlo—tomo asiento en el sofá, Jin se acomoda a mi lado tomando una de las figuritas, ésta es una estrella—Dijo que le parecían muy bonitas para la decoración del bebé.

—Son bonitas—asiente para luego mirarme— ¿Por eso quiere divorciarse de ti?

—No. No lo creo.

— ¿Has pensado en una razón justa?

Tengo una posible razón, pero en vez de ser justa me parece injusta. NamJoon no volvió a tocar el tema del divorcio, aun así, sigue distanciándose de mí.

—No la tengo—tomo una bocanada de aire—Y me gustaría tenerla.

—Deberías preguntarle.

—No es tan sencillo—miro la habitación notando que ahora la puerta no está—Necesito avanzar.

Jin asiente dándome la razón. En la mesa de cristal hay tres vasos alargados con gemas incrustadas, toma la flor de mi oreja acariciando sus pétalos y la coloca debajo de uno de los vasos.

—Adivinarás en qué vaso está la flor, tienes tres oportunidades. Si te equivocas recibirás un castigo—sonríe— ¿Lista?

No, no lo estoy.

—Lista.

La luz falla en la habitación, se va y luego vuelve a venir. SeokJin señala los vasos esperando mi elección, escojo aquel donde la escondió, para mi sorpresa resulta no estar allí. Hago una mueca de dolor sintiendo ardor en mi muñeca, una quemadura aparece en ella de la nada.

— ¿Qué es esto?

—Te quedan dos oportunidades.

La luz de nuevo se va y vuelve a venir. Con cada falla de luz la flor cambiará de posición, trago en seco porque lo hace más complicado.

—El otro día mostraron un truco para ganar estos juegos—NamJoon y yo vemos aquella presentación del joven mago. Estoy abrazada a su brazo.

— ¿Enserio? —lo miro.

—La mayoría de los magos usan el centro repetidas veces, las personas siempre se sienten cómodas con las esquinas y luego de dos oportunidades suelen usar esas esquinas porque la persona creerá que el medio es el indicado.

Decido seguir el consejo de mi recuerdo, Jin levanta el vaso sonriendo.

—Buena elección, JinRi—me muestra la flor—Una más y podrás irte.

Coloco mucha atención, la luz se va y regresa. Esta vez fallo, me quejo un poco cuando siento dolor en mi muñeca, tengo un corte en ella, estoy sangrando. Las gotas manchan el suelo blanco y de cerámica.

—Te daré una última oportunidad porque has sido amable de cierta manera hasta el momento—la luz falla—Escoge, JinRi.

No tengo la menor idea de qué elegir, respiro profundo arriesgándome, escojo la del medio esperando otro corte, Jin levanta el vaso mostrándome la flor.

—Felicitaciones, lo hiciste bien—de un cofre pequeño de cristal saca una venda que coloca en mi muñeca evitando que siga sangrando. Una puerta blanca aparece en la pared.

— ¿Cuántas más me quedan por atravesar?

—Has superado tres habitaciones hasta el momento—responde, pero eso no fue lo que pregunté. Jin coloca una figura de cristal en mi mano, son dos zapatitos de bebé muy bonitos—No tienes la culpa de nada, es NamJoon el culpable de todo.

Frunzo el ceño.

— ¿Qué? —de repente me encuentro sola en aquella habitación. SeokJin ya no está.

 SeokJin ya no está

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Face Yourself: Who Are You? #02 • BTS (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora