eres mi estrella favorita en el cielo

CAPITULO 5

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 5

Me despierto por unos gritos que se oyen en la planta baja, asi que corro rápidamente a la planta baja para ver que está pasando.

Y ahí la veo, está gritándole con mi padre, gritándole a romina, hasta que su mirada se posa en mí.

—mi amor, dile a tu padre y madrastra que me dejen pasar —dice la pelinegra, que alguna vez fue mi novia.

—Andrea, ¿Qué haces aquí? —pregunto, al verla alteradísima tratando de entrar a la casa.

—vine a verte, amor —dice ella, tratando de tocarme.

—Andrea, vete, si quieres te doy el dato de un buen abogado para que le ganes el juicio a la ex esposa del viejo, pero por favor vete.

—no quiero el dinero del viejo, yo te quiero a ti, lo del viejo fue solo una excusa para verte.

—vete y no vuelvas —digo, para cerrarle la puerta en la cara.

Suspiro pesadamente, mi padre y Romina me miraban atentamente, como si quisieran explicación, pero no hay nada que explicar, ni yo sé el cómo Andrea supo que yo estaba en la casa de mi padre y no en mi casa.

—¿puedes por favor explicarme que hacia ella aquí? —dice mi padre, bastante enojado.

—fue a mi casa a decirme que quería que fuera su abogado en el juicio contra la ex esposa del viejo, a lo que me negué y la heche de mi casa —suspiro —pero ahora apareció aquí, diciendo que quiere volver conmigo.

—siempre supe que era una loca —suelta Romina.

—Cariño —dice papá, en tono de regaño

—no te preocupes papá, es la verdad —digo, riendo.

—mejor tomemos desayuno ¿sí? —dice Romina, caminando hacia la cocina.

Mi padre y yo caminamos a la cocina siguiendo a Romina.

—hice hot cakes, con fruta y hay café —dice romina —pero para el pequeño Asher hay leche con chocolate.

—Romiiii, ya no soy un bebe para beber leche con chocolate —digo, tomado una taza de café —bebo café desde que entre a la universidad, me mantiene despierto.

—siempre serás un bebe aun que tengas 50 años —dice ella.

Tomamos desayuno entre conversaciones sin sentido y risas, después del desayuno me fui a mi casa porque tenía que bañarme y cambiarme de ropa para ir a buscar a Rebbeca a la universidad, para almorzar juntos.

Cuando estuve listo, tome las llaves de mi auto, mis documentos, un chaleco por si estamos hasta tarde fuera y fui directo a mí a todo terreno, si, hoy no iría en mi auto ya que está en reparación porque ayer puede que lo allá chocado al entrar al garaje de mi padre, asi que hoy antes de venir a mi casa lo lleve al taller.

De camino a la universidad de Rebbeca me puse a pensar en si ella y yo funcionaríamos, es decir, ella es tan dulce, alegre y yo solo soy un chico con el trauma a que lo abandonen otra vez, me abandono mi madre al morir, Andrea al irse con el viejo, mi padre al trabajar demasiado, los únicos que no me han abandonado son Mark, Elisa y Romina.

Romina es como un padre y una madre para mí, Mark y Elisa son los mejores me han apoyado cuando estaba en lo más profundo, cuando casi caigo en las drogas y el alcohol o cuando casi muero en un accidente de auto.

—hey —dice una voz a mi lado, golpeando la ventana.

—mierda, me asustaste —digo, bajando la ventana, ella ríe.