eres mi estrella favorita en el cielo

CAPITULO 12

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 12

La enfermera nos dijo que el doctor saldría en unos minutos, los padres de Rebbeca caminaban por los pasillos de un lado a otro, Mark por su parte había convencido a Elisa de ir a casa a dormir un poco, mi padre y Romina seguían a mi lado diciéndome que todo iba a estar bien que ella iba a salir de esto, ella es fuerte, ella es la luz que llego a iluminar mi vida, la estrellita que guía mis días, Rebbeca llego a alegrar mi vida, a ser la persona por la cual quiero ser mejor, con la cual me quiero casar, tener hijos, nietos, solo quiero ser feliz a su lado.

—familiares de Rebbeca Sandoval —dice un doctor caminando hasta nosotros.

—somos sus padres —dice alejando y Sonia asiente.

—buenos días —sí, ya es de mañana —soy el doctor Joaquín Bailey, yo fui quien recibió a su hija cuando llego al hospital y también fui quien la opero.

—¿ella esta bien? —pregunta Sonia con angustia ya que el tono de voz del doctor no nos deja muchas esperanzas.

—su hija sufrió lesiones graves, la bala perforo uno de sus pulmones rozando el corazón, hicimos todo lo posible para salvar el pulmón, pero no fue posible, por otra parte, si fue posible reparar el daño que la bala le causo al corazón, pero ella perdió demasiada sangre tanto antes de llegar al hospital como en cirugía —el doctor hace una pausa.

el llanto de Sonia se intensifica acompañado el de Alejandro, yo por mi parte no puedo parar de llorar, me siento culpable de haberla llevado a un lugar tan alejado de la ciudad y además de noche, solo quería pedirle que fuera mi novia en un lugar especial para ambos, pero no puede pedirle ser mi novia y además todo terminó en tragedia.

—Rebbeca esta en un coma inducido, ya que al perder demasiada sangre su cuerpo esta débil e incapaz de sobrevivir sin el coma, si ella presenta cambios y mejora dentro de las próximas 72 horas trataremos de sacarla del coma, pero si ese no es el caso —suspira.

mi corazón se detiene un momento, poniéndome en el peor de los casos, en todas las películas de doctores cuando el doctor da cierto tiempo para que el paciente despierte casi siempre son de 48 a 72 horas, pero si el paciente no despierta hay que desconectarlo y me temo que nos diga que tendremos que hacer eso si es que la pelirroja no mejora

—tendrán que desconectarla —termina de decir.

Caigo al piso de rodillas, lo único que se repite en mi mente una y otra vez es

Tendrán que desconectarla

Tendrán que desconectarla

Tendrán que desconectarla

Tendrán que desconectarla

Una y otra vez, solo tiene 72 horas para mejorar o la perderé para siempre, no quiero perderla.

¡no es justo!

la vida no es justa

¿Por qué les pasan las peores cosas a las personas más buenas?

¿Por qué dios les da las peores batallas a sus mejores guerreros? Ellos en algún momento también se cansarán y dejaran de luchar, solo espero que Rebbeca no se canse y luche por quedarse en este mundo, un mundo cruel y egoísta, pero es el mundo en el cual la conocí alegro mi vida.

—¿podemos verla? —pregunto entre sollozos.

—si, pero tiene que ser de a uno, ya que la tenemos en terapia intensiva.

—Asher ve tu primero —dice Alejandro abrazando a Sonia la cual está llorando desconsolada —ella no está en condiciones de ver a nuestra pequeña y yo tengo que estar con ella.