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15 minutos habían pasados y Adrien cubría su rostro con sus manos mientras que Marinette y Chloe estaban a lado de la otra, con sus hombros chocando.

-Eres una fracasada, enana y sin sentido de la moda.- dijo una agotada Chloe.

-Tu eres una niña malcriada, no apoyo la violencia infantil pero cuando eras niña, te faltó algo de mano dura, rubia teñida.- dijo Marinette, estirando su mano en dirección de Adrien.

¿Ya estaba por estirar la patita y alucinaba con Adrien?

-¿Podrían dejar de pelear por un minuto?- preguntó el hombre rubio, mirando a sus amigas.

Las dos chicas se miraron y luego lo miraron confundidas.

-Pero no estamos discutiendo, hace un rato nos hicimos un cumplido.- explicó Marinette mientras Chloe asentía con la cabeza.

El rubio, las miró incrédulo.

¿Se supone qué ésos eran cumplidos entre ellas?

Ya no entendía nada.

-¡No puede hacer tanto caloooor!- gritó Marinette, quitándose su blazer para hacerse viento con el.

-¡Ascó, apesta a fracaso!- se quejó la rubia, tapándose la nariz pero en el fondo agradecida por sentir algo de viento.

Nunca creyó que Dupain-Cheng sirviera de algo además de las burlas.

-Supongo que hace mucho calor por ser un ascensor pequeño, al parecer la ventilación dejó de funcionar y por estar nosotros tres, cada vez tenemos menos aire o algo así.- dijo Adrien, acostandose levemente, ya sin ganas de sonreír.

Estaba tan cansado en ése momento que juraba que podía revelarse contra su padre y decirle que... que... que coman juntos las tres comidas del día.

Aveces hasta él se asustaba de lo rebelde que podía ser.

-¡¿Entonces nos estamos quedando sin oxígeno?!- gritaron las dos enemigas, asustadas.

El ojiverde las miró, no creyendo que éso sea posible, pero si haría mucho calor por el encierro y por estar muy juntos.

-No, no me ref...

-¡Vamos a morir!- gritó la azabache, asustada.

Emma, Hugo, Louis y don hámster, lo sentía mucho pero quizás mami, no pasé de ése día.

-¡No! No vamos a mo...

Y antes de que Adrien pueda ser la voz de la razón, Chloe se puso a respirar de manera agitada, asustando a ambos.

-¡¿Qué pasa?! ¡¿Qué pasa?!- preguntó Marinette, asustada.

Chloe, la miró con malicia y desesperación.

-Antes de que el oxígeno se acabé, me lo quedaré todo para mi sola.- respondió antes de volver a respirar de manera agitada.

¡Ella sobrevivirá sin importar lo que suceda!

-¡Adrien, debemos ponerla a dormir!- gritó Marinette, mirando con desesperación a su amigo.

El chico que se veía ya agotado de la humanidad misma, dio un leve suspiro.

Era obediente, daba lo mejor de él en todo y hasta era un superhéroe, ¿por qué le tenían que pasar ésas cosas a él?

El mundo siempre golpea con más fuerza a sus mejores hombres y no tiene piedad.

Marinette al ver que Adrien no le respondía, se dio cuenta de lo que sucedía... se estaba quedando sin oxígeno y ya casi no era consiente.

-¡No lo siento, pero es por el bien de Adrien!- gritó la azabache, lanzandole un golpe con los ojos cerrados a Chloe.

Siempre quiso hacer éso y al fín lo hacía.

La rubia reaccionó a tiempo y evadio el golpe, dándole Marinette a una de las paredes del elevador.

-¡Ahhh! ¡Mi mano diseñadora!

Y la azabache cayó de rodillas mientras se apretaba su dolida mano y Chloe respiraba de manera exagerada para ganar oxígeno.

17 minutos y Adrien está comenzando a perder la cordura gracias a sus preciadas amigas, amigas que lo estaban haciendo más claustrofóbico de lo que ya es.

Continuará...
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¡Hola!

Adrien ya está volviéndose hasta emo gracias al cansancio, pero no tiene de que preocuparse, seguramente su padre se va a preocupar por él y lo va a ir a buscar, digo, sin Adrien en ése momento esta perdiendo dinero, ¿no?

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...

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⏰ Última actualización: Feb 22, 2022 ⏰

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30 minutos en un ascensor con dos rubiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora