Victoria

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Shinichiro estaba nervioso, sus manos temblaban no solamente de nervios si no también de frío. Esa mañana estaba un poco nublado y con una ligera niebla, pero sin intenciones de llover.
La razón por la que estaba afuera en un parque a esa hora de la mañana era porque ahí había citado a Wakasa y éste había aceptado sin quejarse.

Las personas pasaban hablando de sus cosas, las hojas de los árboles se movían por la brisa. Ya pronto sería primavera y los cerezos florecerán.
Un chico delgado, de cabello blanco y esponjoso, tan atractivo que atraía las miradas, se acercaba con una leve sonrisa y se veía tranquilo.

Shinichiro sentía morirse y más cuando se detuvo frente a él.

- Shin-chan, ¿A qué se debe que me llamaras tan temprano? - preguntó.

- Yo... Quería darte ésto - con manos temblorosas estiró una cajita y una llave - Fe... Feliz día Blanco.

Wakasa agarró la cajita abriéndola, era un anillo y sintió su corazón latir tan fuerte, notó que el anillo era a juego con el de Shinichiro. Luego miró las llaves sin entender.

- Cuando lleguemos al taller te mostraré tu moto, la hice yo, esperó que te guste - murmuró apenado Shinichiro.

Wakasa sonrió con ternura, sentía sus mejillas calientes. Realmente moría de amor por Shinichiro. Lo abrazó con fuerza - Gracias, Shin-chan, te amo.

Asombrado y con el corazón latiendo tan rápido, Shinichiro correspondió el abrazo, sentía toda su cara caliente, el aroma de Wakasa lo hipnotiza.

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Takemichi sentía sus manos temblar, su pulso cardíaco aumento tan rápido que sentía su pecho doler. Dudaba entre tocar o no la puerta frente a él.
Era medio día, y suponía que no debería estar el abuelo de Mikey eso le haría más fácil las cosas, no es que le cayera mal, sino, que el señor parecía estarlo analizando cada que se encontraban.

Tocó con suavidad la puerta y esperó a que alguien le abriera.
No pasó más de tes minutos para que cierto chico de cabello rubio abriera la puerta con una pequeña sonrisa como si supiera que llegaría. Se veía realmente lindo con el cabello suelto y ropa más grande que su verdadera talla, pero que dejaba ver sus clavículas y parte de su hombro izquierdo.

Con el permiso del dueño, Takemichi pasó al interior de la casa sintiéndose un poco tímido.

Ambos se dirigieron a la habitación de Mikey. El rubio entró primero para sentarse sobre su cama. Invitando con una señal a Takemichi para que tomara asiento a su lado.

- Mikey-kun... - Takemichi comenzó la conversación con un poco de nervios en su tono de voz. Metió su mano en la bolsa de su chaqueta y sacó una pequeña caja roja - Quiero darte ésto.

Mikey miró asombrado y con ilusión la caja, tomándolo y abriéndola con velocidad. Se encontró con un collar con forma de luna. La luna es hermosa escuchó decirle su acompañante. Su corazón dio un latido fuerte, sus mejillas se calentaron, sus ojos se dilataron y sintió nervios en su estómago, la alegría lo sumergía, el sabor de la victoria era maravillosa.

Takemichi sentía morirse de la pena al ver la reacción de Mikey. Nunca había intentado ser romántico, pero por Mikey podría comenzar a serlo.

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Prometo ya no tardar y hacerlo mejor. 😭
☺️💕💕💕

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⏰ Última actualización: May 21, 2022 ⏰

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