El Dolor No Es Para Siempre..|[Cristiana]

CAP. 2

- Madre te tengo que contar algo-. Me senté en la mesa del comedor mirando que ella estaba enjuagando unos vegetales , ya que estaba cocinando.

-Dime hija, ¿Qué pasa?- habló sin dejar de hacer lo que estaba haciendo.
- Me he peleado con Nely- comenté agarrando mi cabello con fuerza.

Volteó.
Con voz tranquila y suave - Esto aveces pasa Stella- quitó mis manos de mi cabello - Enojarse es una emoción normal del ser humano. Pero sin Excederse - Acarició mi rostro - Ya no eres pequeña Stella - Recalcó volviendo a cocinar.

Mi madre puede ser distante en algunas ocasiones, pero la entiendo.

Hemos tenido que pasar por diferentes escenarios que no me gustaría repetir.

...

En alguna parte de la ciudad.

-Hey Cristin- Sonaba la voz de un joven susurrando en una inmensa oscuridad.
-¿Qué pasa Cofi?-
-¿Ya se fueron?- Preguntó el joven con un notorio temor, y una voz agitada.

-Deja checo-
El joven se asomó por un hueco que había en la pared, de la cuál los dos jóvenes se recargaban de espaldas, sentados. Como escondiéndose de alguien.

Por el hueco se podía observar dos policías, con lámparas revisando solo la entrada de la casa.

En si no era una casa, si no el solo cajón (Explicación: solo estaba construido las paredes, faltaban láminas, faltaba el piso, el cual este era de solo tierra, y no tenía puertas ni ventanas).

-no-
-¿Puedo inyectarme no?- Susurró
-no, espera ahorita que se vayan-
-¿Qué hay de malo con inyectarme ahora?- preguntó sarcásticamente.
-¡Por dios Cofi! , ¡Tu más que nadie lo sabe!-
-era broma- río por lo bajo.

Silencio...

-Aveces...- pausó- Aveces trato de recordar tu risa lo más que puedo- comentó vagamente.

Narra Cofi.

En verdad pensé que nos atraparían. Ufff de lo que nos hemos librado, bueno no del todo, aún quedan dos policías más.

-¿Y ahora? ¿Por qué muy sentimental Cristin-? Una pequeña risa se me escapa.

-Mira se que aveces no lo tomas en serio, pero la muerte es algo de lo cual no puedes huir- Por un pequeño rayo de luz que atravesaba ese pequeño agujero, pude ver que él tenía la cabeza inclinada hacia arriba, cerrando los ojos.

-¡Qué va!- Exclamé por lo bajo, aún susurrando- ¿Quién dijo que yo huyo?- nos miramos- Bueno solo de la poli - nos reímos.

Suspiró -Nunca entenderás cofi- volvió a cerrar los ojos. -Esta vida es prestada- me miró -Alguien algún día, además de mi, empatisará contigo, y verás las cosas de diferente manera- sonrió.

En verdad no sé si alguien pueda entenderme.
Las cosas que e pasado, para mi han sido difíciles.
Mi vida a sido un desastre antes de que saliera y renunciara a esa forma de vivir que me asfixiaba.
Cristin a sido el único que me ha comprendido y sabe por lo que he pasado.

Flash back...

- ¡Ya llegué!, ¿Por qué no has hecho la cena?-

- ¿Como quieres que haga de comer si no me dejas dinero? -

- Yo consigo el dinero ¿Y tú no puedes hacer la comida?, ¡Por Dios! ¡Llego cansada, con hambre y tú! !¿me vienes con que no has hecho la comida?! Busca algo, ve a pedir dinero en la calle o no sé, estás algo grandecito ¡No me digas qué es lo que tengo que hacer niño inepto!-  Mientras sigue gritando me agarra del brazo, tirando la bolsa de mano que traía.

-¡Eres tan inútil como tu padre!- me gritó para después golpearme con todas sus fuerzas con un palo de escoba.

...
-Madre...- llegué hacia donde estaba ella, sentada tomando cerveza.

No respondía.

-Madre, dame dinero para hacer la cena- traté de mantener mi voz lo más firme posible, pero se me cortaba. - ¡Madre tengo hambre! ¡No he comido en tres días! ¡He estado tomando agua para calmar un poco el hambre! Por favor te lo suplico dame de comer...- me arrodillé a los pies de mi madre, suplicándole comida, pero no hacía nada más que mirar a la televisión- madre por favor...- comenzé a llorar.

-¿¡Te puedes callar?!- gritó dándome una patada en el estómago, que hizo que, mezclado con el llanto quisiera vomitar. -Ella se levantó, tírandome a un lado del sillón

- ¡Madre!- Ya tirado en el suelo, al lado del sillón, levanté mi mano para, tan siquiera, ¡Solo tan siquiera! Poder aferrarme a unos de sus pies. ¡Quería pedirle perdón! ¡En verdad!, Pero mis ojos sintieron cansancio y se fueron cerrando poco a poco.

Fin del flash back...

Voltié a mirar a cristin, este ya estaba dormido , sentado recargado en la pared.

Supongo que pasaremos la noche aquí.
Miré por el pequeño hueco donde pasaba un rayo de luz

- ¡Ufff menos mal, ya se fueron esos policías!-
Recargué mi cabeza en aquella pared.

Y me inyecté aquella sustancia, la cuál me hacía olvidar todo lo que estaba pasando.
Me gustaba porque mi vida no era nada me hacía sentir por un momento que no existía.

Normalmente por lo que me han dicho esta droga se utiliza para las violaciones. A las chicas se las ponen en la bebida para que  hací, ya hecho el efecto, puedan abusar de ellas y al siguente día no puedan recordar con detalles el suceso.

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