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Mi querido hermano casi siempre regresaba con hematomas en la piel, pero Mateo siempre me decía que se los hacía jugando con sus amigos del colegio, al principio todo me parecía normal, pero al pasar los años y ver que Mateo ya no quería pintarse las uñas o usar el color rosa en su ropa me hacía sospechar bastante. Lamentablemente no sabía lo que iba a suceder después, lo cual me arrepiento y me arrepentiré durante toda mi vida.

Más tarde cuándo mi hermano cumplió 13 años presenciaba que casi no quería salir de casa ni asistir a clases, yo pensaba que era algo normal ya que Mateo siempre fue de estar en su habitación jugando a las muñecas. Él poco a poco me hablaba de un compañero que lo molestaba en clase llamado Lucas, me contaba que le llamaban gay de forma despectiva, yo no me tomé muy bien eso, ese tal Lucas le estaba abriendo las puertas del infierno a mi querido hermano pequeño.

El Dolor De Ser Uno MismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora