Nuestros padres casi nunca estaban en casa, es decir, siempre están de viaje de negocios, nunca les dije nada para no hacerles preocupar o incluso que le echaran la culpa a Mateo cuando no la tenía ni nunca la tendrá. Un día el estaba durmiendo en el sofá, y yo aproveché para mirar su mochila por si tenía deberes, para reclamar que los hiciera, inesperadamente encontré un folio lleno de insultos despectivos tanto a su orientación, a su físico y a sus gustos, lo que más se repetía era “Niñita” “Nenaza” “Ojalá te mueras” y “No te acerques a mí que me contagias tu horrible enfermedad” entre esos horribles insultos y frases se encontraban los nombres de los autores que hacían eso eran, Manuel, Iván, David y por último Lucas, exacto el mismo Lucas del que me hablaba Mateo, una enorme ira recorría todo mi cuerpo y no sabía como procesarla, lo que pensaba en eses momentos era:¿Porque le hacen daño a mi hermano? ¿Que tienen en contra de el?.
Al final me tranquilicé y esperé a que Mateo se despertara para pedir explicaciones, 10 minutos después o puede que más, no llego a recordar cuanto exactamente, le pregunté sobre el papel, el con los ojos llenos de lágrimas me dijo que eso ocurría todos los días y que odiaba haber nacido diferente, yo al escuchar esas palabras no pude aguantar y rompí en llanto repitiendo una y otra vez que no era diferente, era igual que todos los niños, que no importaba si era gay o no, que lo que importaba era la humildad que tenía en el corazón.
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El Dolor De Ser Uno Mismo
Short StorySergio cuenta la dura vida que tuvo su hermano pequeño Mateo solo por tener una orientación sexual distinta.