El señor demonio y su héroe [BL]

Capítulo 18

"Los ganadores de este año han decidido entre ellos con qué escuelas quieren contratar. ¡Salem Moonglade, Winter Fortress! ¡Syryn Nigh'hart, King Hill! ¡Phillip Swan, Saint's moon!

Cuando todo estuvo dicho y hecho, Syryn y Salem se enfrentaron. "Nos vemos a las 10 y cuarto. Tengo trabajo que hacer antes de eso". Salem informó a Syryn. Ninguno de los ganadores parecía particularmente emocionado por ganar.

En el otro lado de la arena, Rowan no tenía nada de eso. Como si no fuera ya lo suficientemente angustioso perder a Syryn Nigh'hart a manos de King Hill, en el futuro previsible tendría que beber las aguas residuales tóxicas que Salem hizo pasar por Poción.

"Rowan, tu imagen pública colapsará si no borras ese ceño fruncido de tu rostro". Vincent le dio un codazo al costado de su amigo cuando vio la mirada oscura de Rowan.

"¿Por qué cree que King Hill es un mejor contrato?" Rowan no preguntó a nadie en particular.

"No importa, no puedes obligarlo a- ¡OI Rowan! ¡¿A dónde vas?!"

"Felicitaciones, joven Syryn, estamos emocionados de comenzar una asociación contigo". El magistrado principal de King Hill, Lord Peltner, estrechó vigorosamente la mano de Syryn.

"Gracias." Syryn sonrió cortésmente: "Deseo estudiar en King Hill. ¿Se puede renegociar el contrato para deducir los honorarios de mi hermano menor y el mío?".

Los ojos de Lord Peltner se abrieron de par en par y le sonrió a Syryn. "¡Qué maravilloso! King Hill se sentiría honrado de recibir a un estudiante consumado como tú. Sin embargo, joven Syryn, me temo que nuestra institución no tendrá mucho que agregar a tu ya alto dominio de las pociones".

"No importa, Lord Peltner. Me gustaría ampliar mis horizontes y creo que King Hill es donde puedo hacer precisamente eso". Syryn respondió con una sonrisa amable.

"Muy bien entonces, te tendremos a ti y a tu hermano becados. No te preocupes por el contrato". Lord Peltner informó jovialmente a Syryn. Era un hombre agradable y corpulento de mediana edad, muy diferente de lo que uno podría imaginar de una persona que dirige una de las escuelas de magia más destacadas.

"Muy bien, entonces, firma aquí, aquí y aquí". Syryn leyó el contrato simple y lo firmó en los lugares apropiados. Cuando agregó el último punto a su firma, la puerta de su habitación privada se abrió rápidamente.

"¡Joven Rowan! ¿Qué te trae por aquí?" El saludo de Lord Peltner fue entusiasta y ruidoso. Syryn dejó a un lado la pluma que tenía en la mano y se dio la vuelta, sin creer del todo que Rowan había venido. Vio que la mirada del joven rubio se posaba en el contrato firmado.

Rowan se congeló en la puerta y luego le sonrió al magistrado principal después de dejar escapar un suspiro de resignación.

"Lord Peltner, vine a felicitarlo por adquirir los servicios de un alquimista tan talentoso como Syryn". Él mintió suavemente. Rowan había venido corriendo a cazar furtivamente a Syryn, ¡pero ya era demasiado tarde!

Syryn inocentemente los vio intercambiar cumplidos. Sabía exactamente por qué Rowan había venido aquí y eso lo puso nostálgico. El Rowan de su pasado casi había caído en un coma profundo después de rechazar las pociones que le ofrecieron a pesar de que se había quedado sin opciones sabrosas. Rowan era como un niño que se niega a comer sus verduras.

Después de completar sus trámites, Syryn salió y se encontró con Alka, Magnus y Lucien, quienes lo esperaban bajo un árbol del que crecían flores de color púrpura. Alka había estado sonriendo por algo que Magnus había dicho mientras Lucien estaba perdido en sus pensamientos mirando los pétalos púrpuras que caían del árbol.