𝖢𝖠𝖯Í𝖳𝖴𝖫𝖮 𝖨𝖨

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Seúl era una ciudad bastante grande y moderna, llena de un montón de lugares y muchas personas. Para alguien de un pueblo pequeño, podría parecerle un poco abrumador la forma de vida que tenían los individuos aquí, pero a MinHo nada lo detendría de entrar a Aglaya Academy, aquella en la que siempre se imaginó asistiendo para lograr su objetivo de ser bailarín profesional.

Como regalo de graduación de la secundaria, su madre lo complació con acompañarlo a Seúl para buscar cupos en varias academias, ya que, aunque le dijera que no lo acompañaría, sabía que igual iría por su cuenta.

Temprano esa mañana MinHo ya estaba completamente listo para salir, muy emocionado, practicaba algunos movimientos con la música que había colocado de fondo, mientras terminaba de desayunar con su madre regañando lo.

— ¡MinHo! Te vas a ahogar si sigues bailando y comiendo, hijo -decía volteando a verlo con una mirada severa para que su hijo terminara su comida.— Sé que estás emocionado, pero termina de comer y luego puedes seguir practicando -se giro nuevamente para terminar de lavar los utensilios que utilizó para cocinar.-

MinHo resignado se detuvo y haciendo un pequeño puchero, volvió a sentarse en la mesa de la cocina a terminar de comer su sándwich.

— ¿Cuánto tiempo crees que tardemos? Porque quiero practicar mi coreografía de admisión más tarde, tengo que ir preparado para todo -dijo después de comer el último trozo de pan y tomar un poco del jugo que tenía enfrente— ¿Es muy largo el trayecto a Seúl? Nunca he ido para allá -se imaginó cómo sería tener que ir a estudiar cada día en la mañana a la ciudad, estaba emocionado, pero sabía que tanto viaje lo cansaría mucho.

— Bueno, tu papá nos llevará. Así que será rápida la ida, pero luego tendremos que regresar en metro -dijo su mamá mientras secaba sus manos y se detenía frente a su hijo— Trae tus cosas, ya no debe tardar mucho.

MinHo asintió y se levantó de la mesa yendo directo a su habitación por su mochila, no llevaba la gran cosa, solo sus papeles para inscribirse y un cambio de ropa y zapatos por si le pedían bailar en el momento.

Al volver a la sala su madre ya lo esperaba junto a la puerta para irse a su destino.

Un gran suspiro de frustración salió de parte de MinHo, el cual fue silenciado por el ruido de los autos en la calle junto a la que caminaba

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Un gran suspiro de frustración salió de parte de MinHo, el cual fue silenciado por el ruido de los autos en la calle junto a la que caminaba. Habían entrado ha aproximadamente cuatro estudios y academias de baile, la mayoría diciendo que debía agendar una cita para poder ser evaluado, otras se salían de su presupuesto y en la última que visitó estaban fuera del período de audición y tendría que esperar cuatro meses más para optar entrar.
Su última opción, su último rayo de esperanza, era Aglaya Academy; aunque a este punto ya había perdido toda su fe.

Su mamá lo reconfortaba intentando distraerlo un poco del tema, lo veía mucho más decaído con tal que entraban y salían de los lugares; pero MinHo estaba tan metido en sus pensamientos que no le prestaba mucha atención. Por inercia, sus pies se detuvieron frente al gran edificio, decorado con su nombre en letras grandes y llamativas; entonces sus nervios regresaron.

Cuando Despiertes, Búscame - 《 𝐌𝐢𝐧𝐒𝐮𝐧𝐠 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora