Capítulo 33

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Historia Original de UpBitto26






































Pasó todo un mes si saber absolutamente nada de Gulf, ciertamente, el chico jamás va a dejar de preocuparle, después de todo, creció con él.

Sus padres le insistían en que le dijera le verdad a los Kanawut, pero él no estaba dispuesto a hacerlo y dejar que comenzaras a insultar al menor, su mejor amigo siempre había tenido que soportarlos y hacerles caso en todos, incluso, le obligaron a estudiar una carrera que él no quería, no le gustaba ni un poco, sin embargo, lo hizo.

Era muy bueno en lo que hacía, nadie podía negárselo, pero aún así, no disfrutaba de su trabajo.

Y ahí estaba, con sus padres, estos insistiendole que les dijera a los Kanawut lo que realmente pasó y él negándose rotundamente a hacerlo. —De todas formas ya se los dije yo –Musitó su madre, como quien no quiere la cosa, Mew le dirigió una mirada dura, la mujer no se inmutó.

—¿Tienes idea de lo que has echo? Lo hice para proteger a Gulf, mamá, no tenías ningún derecho a decirles nada –Habló molesto.

—Pero es que no soportaba que ellos hablaran mal de ti a nuestras espaldas Mew, y...

—¿Y quieres que hablen mal de su hijo? Bien, felicidades mamá, lo has conseguido –Dicho esto salió de su oficina y se dirigió con prisas a la
mansión de los Kanawut, necesitaba asegurarse que Gulf este bien.

—¿Y quieres que hablen mal de su hijo? Bien, felicidades mamá, lo has conseguido –Dicho esto salió de su oficina y se dirigió con prisas a la
mansión de los Kanawut, necesitaba asegurarse que Gulf este bien

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El techo le pareció lo más interesante del mundo en el último mes, grabándose cada detalle de este. Su hermano todo el tiempo estaba al pendiente de él, asegurándose de que comiera. Una par de suaves golpes seguidos de la voz grave de su hermano lo hizo levantarse de la cama.

—¿Qué sucede? –Preguntó al notar la angustia reflejada en los ojos del mayor y una de sus mejillas ligeramente roja.

—Papá y Mamá ya saben lo que realmente paso entre Mew y tu –Pronunció, el menor se quedó helado, quería encerrarse en su habitación y no tener que hablar con sus progenitores.

—¿Por que tienes la mejilla roja?

—Papá me dió una bofetada por que le dije que ya sabía, ven, quieren hablar contigo.

—No quiero.

—Lo se, tampoco quiero que vayas, pero si no lo haces será peor, vamos, estaré contigo –Gulf pasó saliva y asintió, se dirigieron a la sala de estar y el menor tomaba grandes bocanadas de aire tratando de prepararse mentalmente para lo inevitable, sus padres siempre fueron muy estrictos y que se enteraran del tipo de vida que llevaba seguro les había caído como un puñetazo en la nariz.

—Phatra, dejanos a solas con tu hermano por favor –Pidió la mujer.

—No me iré –El de ojos gatunos siempre notó que eran demasiados duros con su hermano menor, no entendía por que pero nunca le gusto que fueran aún más estrictos con él, muchas veces llegaron a darle castigos demasiados fuertes para cualquiera. Su padre lo miró enojado, pero eso no lo hizo inmutar, su carácter era igual de fuerte que el de su progenitor y no iba a permitir que lo intimidará.

—Phatra, dejanos solos –Repitió con voz más dura su padre.

—Ya lo dije, no me iré –Sentenció, los mayores decidieron dejar que se
quedará.

—Y bien Gulf, ¿Tienes algo que contarnos? –El menor bajo la mirada, y negó. —¿Seguro?

—Ya lo saben mamá, ¿Para que repetirlo? –Miró a sus padres y estos asintieron.

—Tienes razón, mejor vayamos directo a la parte en donde nos dices por que hacías eso.

—Bueno, tenía mucho tiempo libre, la verdad –Contestó, los mayores le miraron mal y el mordió su labio inferior, estaba nervioso, pero que más daba, igual, ya sabían todo y sabía que no podía hacer nada que evitara el
tremendo castigo, que estaba seguro, le darían.

A pesar de tener ya 23 años, sus padres siempre tuvieron un poder inexplicable en él, tal vez se deba a que toda su vida se encargaron de educarlo de esa manera. Pero de algo si estaba seguro, se iría de esa casa, ni si quiera sabe por que regresó en primer lugar, estaba muy
cómodo en la casa que compartía con Mew... Ha, ahí esta la razón.

Su madre se acercó a él, no se movió ni un sólo milímetro, sabía lo que la mujer haría y estaba dispuesto a aceptarlo, creía que lo merecía después de todo, el timbre sonó pero ninguno le prestó atención, ya algún sirviente se encargaría de abrir la puerta. Su mejilla izquierda comenzó arder después de la fuerte bofetada que la mayor le dió, hizo fuerza con sus dientes haciendo chocar los de arriba con los de abajo.

—¿Lo dices así de fácil? Eres un descarado sin vergüenza, ¿Cómo pudiste decepcionarnos así? ¿Acaso te hemos fallado?...

—Yo diría que si –Contestó una voz grave ajena a la familia Kanawut, Mew. Se acercó a la familia y pudo ver la piel blanca del menor con un fuerte color rojo, frunció el ceño sabiendo que le habían abofeteado. —Vamos Gulf.

—P'

—¿Qué haces aquí, Mew? Te pido que no te metas en esto, no es algo que te concierna –Habló Theep, el rubio miró a cada uno de los integrantes de la familia para después sonreír con burla.

—Yo creó que si, Gulf sigue siendo mi esposo, así que sólo vine por él, dejó de ser un Kanawut hace seis meses –Tomó la mano derecha del menor con la izquierda propia y lo jaló hacia él. —Es Gulf Suppasit, a ustedes es a
quienes no les concierne hablar de algo que pasó entre nosotros, y en todo caso, deberían culparse a ustedes mismos.

Los mayores miraron confundidos y ofendidos a Suppasit, este volvió a sonreír causándole escalofríos al menor de los presentes, esa sonrisa sólo la daba cuando estaba enojado.

—¿A que te refieres Mew? –Manfah se cruzó de brazos, miró al rubio arqueando su ceja derecha y mordiendo su lengua para no decir nada más. El llamado suspiró, no tenía muchas ganas de explicar el por que decía eso, pero tenía que hacerlo.

—Siempre han sido muy duros con Gulf, exigiéndole más de lo que les daba, cuando lo que daba era completamente suficiente y sobraba, incluso sacando las mejores notas nunca le dijeron que hacia un buen trabajo, le obligaron a estudiar una carrera que no quería, y nunca le han dicho que están orgullosos de él –Cerró sus ojos, respiró hondo para después mirar a
los hermanos Kanawut. Ninguno pensó que el rubio se dio cuenta de todo eso. —Gulf sólo necesitaba que ustedes le dijeran que estaban orgullosos de él, que lo querían, pero creo que nunca lo han echo.

Los padres del menor lo miraron atónitos, la mujer abría y cerraba la boca queriendo decir algo pero sin saber exactamente que, ¿En serio fueron así de duros con su hijo menor? Nunca se había percatado de ello, pero debieron ser muy estrictos con Gulf para que incluso un tercero a su familia lo notara, miró a Phatra, este asintió al darse cuenta de la fuerte mirada de su madre sobre de él.

—¿Vienes Phatra? –Mew se dirigió al mayor, este asintió y salieron de la casa dejando a los señores Kanawut pensando.

Se dirigieron a la casa que era suya estando casados con Phatra siguiéndoles detrás. Gulf se sentía extremadamente aliviado por haber salido casi casi ileso de su antiguo hogar. Suspiró y observó el camino que dejaban atrás conforme avanzaban, al llegar, Mew bajó primero para después abrirle la puerta al menor, permitiendo que este bajara.

Se adentraron en la casa y fueron directo hacia la sala de estar, el rubio hizo una mueca, no tenía buenos recuerdos allí. —P' –Llamó el menor, Suppasit respiró hondamente sin ser muy notorio hasta posar su mirada en Gulf.

—¿Mmh? –Ese simple balbuceo salió de su boca.

—Gracias –Mew sonrió a labios cerrados para después estirar su brazo y revólver el cabello azabache del menor.

—No fue nada –Miró la hora en su reloj y abrió sus ojos, ya iba tarde.

—Tengo que irme, tengo una junta importante, cuidate Gulf, nos vemos Phatra –Dicho esto salió de la casa dejando a los hermanos solos.

Gulf notó una sonrisa surcando en los labios de su hermano y no pudo evitar confundirse.

—¿Por que sonríes?

—Mew tenía puestos los anillos-

—¿Y eso es bueno o malo?

—Bueno, quiere decir que aún tienes oportunidad –Y con eso él también sonrió, eso era bueno, muy, muy bueno.

CASADOS POR ACUERDO ADAPTACIÓN TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora