Πρόλογος

358 54 5
                                    

Chifuyu estaba agotado de ser perseguido por su alma gemela por lo que tomó la desición de enfrentarlo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Chifuyu estaba agotado de ser perseguido por su alma gemela por lo que tomó la desición de enfrentarlo.

Una tarde saliendo de la escuela comenzó a caminar en dirección a su hogar, no había tardado demasiado en escuchar el caos que tenía de mediodía su pareja destinada por lo que siguió su caminó mientras formaba un plan en su cabeza, en la calle siguiente dobló hacia su izquierda para meterse en un callejón con salida a la calle principal; era el caminó más cortó.

(...)

— ¿No tiene miedo a que le pase algo por meterse ahí? — Preguntó confundido Kazutora al ver cómo el menor se metía al callejón sin problemas.

Baji se dedicó únicamente a levantar los hombros restándole importancia, de igual manera estaban ellos para protegerlos, haciéndolo parecer una "casualidad" su encuentro. No tardaron demasiado en doblar por el mismo callejón,llevándose una sorpresa al ver cómo el de cabello rubio teñido estaba recostado en una de las paredes de brazos cruzados.

— ¿Uhm? — Chifuyu dirigió su mirada hacía los dos mayores, por un momento se sintió pérdido al notar cómo las mediodía estaba envolviéndolo; se sentía bien pero a la vez era una sensación extraña.

— ¡Oh! Mira Kei,nuestro muñeco es inteligente — Mencionó Kazutora con un tono burlón.

— ¿Nuestro? — Ladeó la cabeza confundido el menor, por un instante paso por su cabeza la idea de que ambos eran su pareja pero de inmediato borro eso, era imposible.

— Si, nuestro — Aclaró el de cabello negro, también con un tono burlón que llegó a hacer molestar al menor.

Chifuyu asintió con la cabeza sin terminar de entender a qué se referían pero aún así se separó de la pared para acercarse a los mayores.

— ¿Pueden dejar de perseguirme? No sé cuál de los dos es mí alma gemela,pero, comenzó a ser molestó sentir su mediodía en cada instante que salgo de mi casa — Frunció ligeramente el entrecejo al decir aquello, solo esperaba que los mayores entendieran que era incómodo.

Baji y Kazutora se miraron al mismo tiempo, parecía que estaban hablando por telepatía por qué al mismo tiempo regresaron su mirada hacía el menor para decir si respuesta.

Souya estaba parado en una esquina mirando hacía sus lados,esperaba a que su alma gemela apareciera para ir a cenar como le había prometido pero ya había pasado la hora acordada y todavía no estaba apareciendo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Souya estaba parado en una esquina mirando hacía sus lados,esperaba a que su alma gemela apareciera para ir a cenar como le había prometido pero ya había pasado la hora acordada y todavía no estaba apareciendo.

— ¿Y si le sucedió algo? — Murmuró preocupado, volviendo a sacar su teléfono del bolsillo de su chaqueta para verificar la hora, dió un suspiró notando que no tenía ningún mensaje de Rindou. Lo volvió a guardar, decidiendo qué se iba a quedar una media hora más y si no aprecia el mayor, iba a regresar a su hogar.

— Hola bonito ¿Estás solo? — El cuerpo del menor tembló al oír una voz algo ida detrás suyo, se dió la vuelta notando como el señor estaba tropezando.

Inmediatamente se puso a la defensiva,negó con la cabeza suavemente — No, estoy esperando a mí novio que está por llegar — Mintió lo mejor que pudo para poder deshacerse del señor.

— Tu novio es un idiota por dejarte solo a estas horas, algo podría pasarte…eres demasiado lindo — Mencionó el borracho, levantando una de sus manos para acariciarle la mejilla al menor.

Souya dio un paso hacía atrás sintiéndose nervioso, miró de reojo a sus costados en un intentó de encontrar a alguien que lo ayudará. Al ver que estaban completamente solo en esa esquina, decidió irse lo más rápido posible.

El señor al notar las intenciones del menor lo sujetó de la muñeca con brusquedad para evitar que se fuera — No,no,no…niño malo — Dijo entre risas para acercarlo, con su mano libre agarró el mentón del menor para acercar sus rostros.

Souya para estos momentos estaba conteniendo sus lágrimas,cerró los ojos maldiciendo a Rindou por no llegar a tiempo pero de repente dejo de sentir las manos del hombre sobre su cuerpo. Con algo de temor abrió los ojos despacio notando como un chico de cabello bicolor estaba golpeandolo.

— ¿Q-que? — Fue lo único que de le ocurrió decir, para luego, mirar a su costado al sentir que lo abrazaban — ¿R-rin? —

El haitani menor murmuro con suave si acompañado de una disculpa por llegar tarde.

Ran después de un tiempo dejo de golpear al borracho, dejándolo tirado en el suelo sin importar que estuviera sangrando — Que asco me dan los hombres así — Dijo con un evidente tono de molestia.

Souya escondió su rostro en el torso del rubio con lentes,sin tener ninguna intención de soltarlo.

— ¿Sou?¿Estás bien cariño? — Preguntó algo preocupado, no sabía si antes de llegar, aquél hombre le había hecho algo más.

Al ver que el menor asintió con la cabeza dió un suspiró más tranquilo para agacharse, lo agarró de los muslos para poder cargarlo sin ningún problema comenzó a caminar hacía el vehículo con su hermana destraba suyo.

𝕸𝖊𝖑𝖎𝖋𝖑𝖚𝖔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora