𝕸𝖊𝖑𝖎𝖋𝖑𝖚𝖔

Πρόλογος

- Qué perra mí amiga - Sonrió divertido, terminando de acomodarse la pollera para luego mirarse hacía el espejo.

- ¡Cállate! Además no puedes juzgarme, cuándo escuchaste de que pandilla era me obligarte a correr para que nos cambiemos de vestimenta - Se quejó el de lente, mirando cómo el de cabellos anaranjados buscaba una chaqueta de cuero negra para estar finalmente preparado.

- Cariño, quiero patear al comandante de esa pandilla desde hace un tiempo - Sonrió orgullo para luego mirar de arriba hacia abajo al contrario - Ése shorts me dan la impresión de que quieres que un perro esté tras tu cola - dijo con un tono burlón.

- ¡ Mira quién lo dice ! Ni siquiera te colocaste un shorts bajó la falda sucia zorra - Sé levantó de la cama,para, luego retirarse de la recámara de su mejor amigo sabiendo que el venía tras suyo.

Cuándo bajaron a la primera planta saludó a Souya que se encontraba junto a Chifuyu y Hakkai jugando a unos videojuegos.

- Sou-chan regresamos en unas horas - Le informó a su querido gemelo para saludar a los dos restantes antes de retirarse de su casa, buscó su motocicleta para prenderla esperando a que el de lente se subiera para ir hacía la dirección qué el perro del recién mencionado le había mandado.

Ignoró los consejos de su mejor amigo, quería tener una maravillosa entrada por lo que ingresó al abandonado lugar con la motocicleta, pasando por un espacio que hacía las divisiones para queda enfrenté del Comandante e Vice Comandante.

Lo quedó mirando con una enorme pero forzada sonrisa a la vez que apagaba el motor.

- ¿Debería de disculparme por aparecer de repente? - Preguntó con un notable sarcasmo, recibiendo un golpe trás la nuca de parte de el de lentes el cuál desvió la mirada hasta el lugar dónde se encontraba su objetivo.

Kisaki bajó del accidentó de la motocicleta para acercarse hacía su alma gemela, colocándose enfrenté de ella con los brazos cruzados.

- ¿En serio pensabas que no me iba a enterar que te besaste con una tal Hinata? - Preguntó, levantando una ceja para luego dar un pasó hacía atrás colocando la palma de su mano sobre el marcado abdomen del ajeno para evitar que se acercará.

- ¡ Oí, Mickey ! - Gritó a la vez el de cabellos anaranjados pará subir por las escaleras cómo si lo tuviese permitido, ignorando las quejas de las demás personas que se quedaron quieras en su lugar al recibir las claras miradas de amenazada por los hermanos Sano e Takemichi.

- ¿ Sucede algo bonito ? - Preguntó divertido el sano al ver la escena que su hermano estaba montando con su futura pareja, ver a Takemichi arrodillarse para recibir un perdón no era común.

-¿Puedes explicarme por qué golpeaste a mí follamigo? - Se arremangó las mangas de su chaqueta con la intensión de golpearlo pero al queda enfrenté del contrario sintió la necesidad de abrazarlo; no lo entendió hasta que prestó más atención hacía la melodía que dependía su cuerpo.

El rubio al darse cuenta de la situación se acercó para rodear con posesividad las caderas del menor.

- Eres mí perra, no voy a permitir que otras personas de toquen - Murmuró en su oído para luego mirar a los demás con frialdad - ¡ Nahoya Kawata es de mí propiedad, el que se atreva a dañarlo o hablar sobré el va a recibir toda mí furia ! - Gritó aún con los brazos rodeando al chico que no reaccionaba - Ah, ¡ Kisaki Tetta también entrá en esa advertencia, nadie toca a la zorra de mí hermano ! - Al terminar de gritar eso le mencionó a todos que se podrían retirar después de todo, ahora tenía que ocuparse de su alma gemela.