→DIECINUEVE←

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→El travieso diablillo.

Tal vez dejar a los chicos fue la mejor decisión de HoSeok pero... ¿Entonces por qué se sentía tan mal? Todas las noches quería llorar, los días parecían ser más largos de lo que eran realmente, el pobre chico se la pasaba trabajando, iba a la biblioteca de 10 am hasta las 6:00 pm, luego trabajaba una hora y media diaria como tutor de los hijos de la señora SangYe, después de eso trabajaba como bartender en el bar de Jiyong, aunque esté se había negado al principio pero HoSeok le insistió mucho, el tiempo libre limpiaba tanto el bar como la casa de Jiyong, sólo quería mantener su mente ocupada en otra cosa y pensar en algo más que no sean los chicos.
Justo eran las 7:46 pm, estaba saliendo de la casa de la señora Lee, estaba algo cansado aún así iría al bar, saco su celular y comenzó a marcarle a Jiyong.

— Vamos, Jiyong, contesta... —Hoseok bufó cuando lo mandaron a buzón de voz.— mierda, y luego se queja de que no le llamó...

Guardo su celular y tomo su camino hasta el bar, le gustaba caminar hasta sus trabajos era alguna manera de sentirse tranquilo y lo ayudaba a hacer algo de ejercicio diario, claro que a veces hacía algo de trampa y mejor volaba, también eso lo hacía sentir libre pero no podía hacerlo siempre ya que corría con el riesgo de que alguien lo viera.
Su camino lo llevaban a algunos callejones oscuros que eran algo terroríficos, siempre intentaba saltarlos pero no siempre podía hacerlos, está vez no entraría a uno pero tenía que pasar cerca de este.

— Bueno, no pasará nada, de igual manera puedes encargarte de cualquier asaltante tu solo...

HoSeok tomó el valor y siguió su camino, justo al estar cerca del callejón alguien lo jalo dentro de este y me cubrió la boca, HoSeok forcejeaba e intentaba gritar, era extraño, esa persona tenía más fuerza que él.

— Oye... Tranquilízate, soy yo —la voz se le hacía conocida.— soy Viktor...

HoSeok vió entonces su rostro y lo reconoció, Viktor quitó su mano de su boca.— ¿Viktor? ¿Realmente eres tú?

El chico asintió.— Soy yo, HoSeok

HoSeok le dió un golpe el brazo a lo que el chico se quejó.— ¿Eres tonto o algo así? ¿Por qué rayos haces esto?

— Sólo quería darte una sorpresa...

— Estás sorpresas no me gustan y lo sabes muy bien

— Al menso alégrate de verme

— Me alegro de verte pero no estuvo bien lo que hiciste

Viktor, un compañero de HoSeok, aquél angel era muy bien conocido por sus ataques sorpresa, no por algo era un ángel guardián al igual que Seunghyun, este chico siempre estuvo tras HoSeok como un niño pequeño pidiendo atención de sus padres, HoSeok jamás olvidará las veces que Junmyeon lo perseguía con un bastón después de encontrarlo intentando hacerle bromas a Jaebum o coqueteando con él.

— ¿Y qué haces aquí?

— Pues... Recibimos noticias de que algún diablillo está haciendo cacería de pecadores

— ¿Tratos? ¿Llevarlos al lado oscuro?

— No, HoSeok, los está matando

HoSeok se pudo tensó.— ¿Matando? ¿Cómo así?

— Sí, los atrae con su pecado, suponemos que es un demonio de la lujuria, va a bares y se lleva a los humanos tontos pervertidos y los mata

— Eso es... Horrible, ¿Cuantas víctimas lleva?

— Por lo menos unos siete muertos y otros cuatro los dejo locos, los primeros fueron tres tipos, dos fueron asesinados y uno termino en una institución mental, el chico quedó con traumas, el último del que sabemos lo dejo amarrado a un poste...

Esperanza TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora