CAPITULO #2

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¿Peligro en el aire?



PVO Darek



La había dejado en mi habitación; estaba aun débil.


Me gusto el atrevimiento de haberla besado y que probara mi sangre. Sentí que le había gustado, aunque estuve algo nervioso ¿Erá algo loco o no?



Escuche que tocaron la puerta. Quien sería está hora ? Me acerque a la puerta y la abrí, me encontré a Melissa una amiga de la universidad.



-¿Qué haces tan tarde por aquí?



-No sabia que hacer y quise darte una visita



Note que me miraba inquieta. Y note que era porque aun no le habría la puerta coml tantas veces antes había hecho. Pero ahora era distinto, tenia a una chica en mi habitación y no era una chica cualquiera.



-¿Estas ocupado o es que no puedo pasar?



Abrí la puerta y le di paso. Melissa era una chica hermosa, contextura delgada, su cabello era castaño y resaltaba sus ojos café, era una chica amable, locuaz con quien conocí y muy discreta con desconocidos. Llevaba años en conocerla y eso había sido una de las mejores cosas que me había pasado, la sentía como una hermana menor aunque éramos de la misma edad.



-¿Ya hizistes las tareas de la profesora Inés?



Estaba intranquilo pensando en que si ella bajaba, Melissa la veia, que mentira diría.



-Si, bueno aun me faltan algunas cosas.



-ah bueno yo te ayudo, los apuntes deben estar en tu habitación.



Se dirigía a la habitación y le bloquee el camino. Me miró y ojeo a mi alrededor.



-Si tienes a alguien aquí contigo solo diló. Lo entenderé y me iré.



Me pareció mas prudente eso. No la vería y con el aspecto que tenia no me cuestionaría de nada.



-No digas nada. Quiero ir al baño y me voy



Susurro y subió las escaleras. Estaba mas relajado, si, su amiga ya tenia idea que habia alguien y suponía que era normal, podía estar con alguna chica no tenia nada malo.


Camine y caí en cuenta de algo. Melissa conocía mi apartamento. No habia sido la primera vez que venía y no había a ido a cualquier baño, sino al que estaba al lado de mi habitación. ¡RAYOS!



Subí inmediatamente y sorprendí a Melissa ojeando mi habitación. La había visto.



-Está abajo



-Quién es ella y porqué esta así?



Lo menos que quería, dar explicación de algo que no tenia idea de como hacerlo. Como decir "Ey sabes que me la encontré en medio de noche, y lo mejor es que resulta que es vampira y hasta le di mi sangre". Muy lógico y sorprendente no? Pero si yo aun no creía que todo esto era real, como ella lo iba a tomar, creo que lo primero que llamaría era a la policía y yo no quería eso. Pensé rápidamente en que excusa decir.



-Es una amiga que se paso de tragos y lastimosamente se metió en una pelea



-ahh claro, una amiga - susurro con sarcasmo. - Buena espero que hagas bien de médico, me voy.



Me rodeo y bajo las escaleras. Su actitud había sido muy rara, si no era normal que trajera chicas a la casa y ella lo sabia. Suspiré y entre a la habitación.


La observe, era hermosa, pero era Vampiro



-Se te perdió algo



Me tomo por sorpresa pensé que dormía



-Los vampiros no duermen, bueno no mucho - susurro



-Cierto, no se muchas cosas de tu clase-dije



Ambos quedamos en silencio, no sabia que mas decir, me incomodaba su presencia, claro aun mi vida estaba en peligro.



-Le gustas a esa chica.



-Quién? ¿Qué cosa?



-Con la que hablaste hace un instante - Mencioné y supe que hablaba de Mellisa



-Como crees, es una amiga, la quiero como a una hermana.



-Pero ella te quiere como algo mas, los humanos o hombres pueden llegar a ser tan ingenuos o se hacen, quizás hasta se puso celosa con mi presencia. Y que sean amigos no significa que puede haber algo mas que una amistad como amor.



Pensé en lo que decía y que podía tener razón. Aunque nunca había visto a Melissa con otros ojos, era una amiga y ya.



-Creo que tu si debes dormir, los humanos si descansan



-Cierto, busco unas sabanas y listo - mencioné, me acerque a las gavetas, recogí una sabana, me despedí y antes de llegar a la puerta escuche que susurro.



"Me llamo Amaris. Buenas Noches. "



PVO Amaris



Ya habían pasado las horas , supuse que Darek ya se había dormido. Me senté en la cama, me sentía mejor. Con las fuerzas que tenia me senté en la cama, mis pies colgaban, la planta del pie toco el piso y me dolía un poco la espalda, puse el otro y traté de agarrar estabilidad, de poco a poco camine y baje las escaleras.


Camine y me fije en Darek que estaba recostado en el sillón, se veía tan tranquilo teniendo a un vampiro en su casa.




Estaba hambrienta, quería mas sangre pero aun podía comer algunas cosas que ingerían los humanos, aunque no sabían tan bien, no me agradaba, y la razón es que por las malas por supervivencia y por ser cautelosa tuve que aprender.



Abrí la nevera, la verdad esperaba verla vacía y todo un desastre, pero no, estaba llena. Para que fuera un chico, note que era responsable y ordenado. Agarre una manzana y le di un mordizco;una parte de mi quería sangre, no podía agarrar su sangre, me había ayudado y le debía seguir viviendo.



Volví a la habitación. No sin antes quejarme un poco del dolor al subir cada escalón. Aún sentía como si estacas pinchaban mi cuerpo. Tenía que aguantar y salir de aquí,de eso desprendía mi vida y la de el.

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