9.

274 37 3
                                    

― Es un perro muy

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

― Es un perro muy... simpático.

Jimin observó al cachorro con desconfianza cuando JungKook dejó de hablar. Yeontan estaba sobre la cama de TaeHyung, mirando a los dos chicos con expresión juguetona, mientras Tae se ponía el disfraz con el que iría a la fiesta.

JungKook miró de Jimin hacia Tae, y sonrió con pesar.

― ¿Qué clase de disfraces estamos usando? ― preguntó, sin esperar respuesta.

― ¡Waaaaaaaaaah! ― balbuceó Jimin, levantando sus manos como si fueran garras, abriendo su boca y mostrando unos falsos colmillos―. ¡Soy el conde Drácula, tenme miedo!

JungKook trató de no reírse porque, honestamente, Jimin no daba miedo alguno a pesar de su aspecto amenazador de vampiro. TaeHyung, por otro lado...

― ¿Qué estás usando? ― le preguntó JungKook.

Tae le contempló con inocencia, aunque una sonrisa juguetona bailaba en sus labios.

Un disfraz ― bromeó.

JungKook soltó un resoplido.

¿Por qué un gato, Tae? ― insistió JungKook.

― ¿Sabías que los gatos pueden saltar hasta 5 veces su altura de una sola vez.? ― farfulló Jimin de forma distraída, acercándose lentamente hacia Yeontan.

¡Los gatos son lindos! ― dijo Tae feliz.

JungKook no quiso insistir más en el tema y se miró a sí mismo, arrugando el ceño al observar el traje rosado que llevaba y su pelo recién teñido del mismo color. Su mamá casi tuvo un infarto, mientras que Soyeon se atragantó con una bebida cuando bromeó que iría disfrazado como Dulce Príncipe. Su madre, una vez se recuperó, le murmuró algo de que si iría así todos hablarían de ellos. Aquellas palabras lo incentivaron para elegir ese disfraz.

Mirar el estilo que cada uno llevaba era para la risa, pero poco le importaba.

Jimin se sobresaltó cuando Yeontan se puso de pie repentinamente y le ladró.

― ¡Waaaaaah! ― trató de asustar Jimin.

Yeontan rodó sobre la cama.

¡Estoy listo! ― dijo Tae, levantando las manos.

JungKook tomó la mano de Jimin, mientras Tae levantaba a Yeontan para llevarlo al primer piso, donde la familia de TaeHyung los esperaba.

Heechul comenzó a reírse al verlos con aquellos disfraces, Jongwoon levantando la cámara que llevaba y Taeyeon sacudía su cabeza con una sonrisa divertida.

― ¡Se ven increíbles! ― alabó Jongwoon.

JungKook quería decir algo irónico, pero sabía que si decía que se veían horribles Jimin podía tomarlo literal y echarse para atrás. A pesar de haber dicho que quería ir, los últimos días había estado mucho más nervioso y alterado que nunca, rompiéndose la cabeza por el regalo perfecto para Hoseok. Por otro lado, la madre de Jimin estuvo feliz de que su hijo hubiera sido invitado a una fiesta de cumpleaños, aunque eso no evitó el miedo también de que algo malo pudiera pasar.

Muñequito de Porcelana ✧ YoonTaeGiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora