Capitulo 6: Recuerdos del pasado

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CAPITULO 6

La perdida de un ser que amas duele, duele en el alma

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La perdida de un ser que amas duele, duele en el alma. Pero también está el hecho de que por mi culpa ella ya no está a mi lado

Laura significó un antes y un después en mi vida. Ella fue la calma antes de la tormenta que ninguno de los dos creyó que llegaría, lo que sucedió no fue su culpa, ella me salvó. Ella me liberó

24 de septiembre del 2005

Mi madre es una mujer tan estricta que si se enterara de mis salidas al parque me castigaría de por vida. Los niños aquí no suelen hablarme así que pasó desapercibido, solo hay algo que me molesta un poco

Ya hace unos días una niña no para de mirarme debe tener unos 8 o 9 años, ella solo se queda mirándome o al menos eso hacia hasta que hoy se me acercó y me habló

—¿Jugamos?

—No— ella no me daba mucha confianza

—Que amargado, pareces un adulto. A los adultos no les gusta jugar— hizo un puchero

—Y tu pareces una bebé. A los bebés les encanta jugar— intentar ser ofendido pero no dió resultado

Ella me miró por unos segundos, pensé que lloraría y se iría pero no lo hizo

—¿Seguro que no quieres jugar?— me preguntó cómo si fuera la última vez que lo preguntaría

—¿Por que tanta insistencia?

—Parece como si quisieras jugar pero no puedes— dijo ella mirándome fijamente a los ojos

—¿Y tú qué sabes?

—Mi papá no me deja jugar cuando está enojado así que se cómo se ven las personas que quieren jugar pero no pueden— lo pienso un momento, no me vendría mal un poco de diversión

—Bien, juguemos

03 de Febrero del 2013

Laura y yo nos volvimos inseparables, es una niña realmente genial y divertida
Quisiera no tener que separarme de ella nunca. Solo hay algo que me tiene preocupado últimamente

—¿No me vas a decir por qué tienes ese tapabocas?— ella se desliza por el tobogán y no me mira

—No, mejor vamos a los rodaderos gigantes

Los últimos días Laura ha estado actuando raro, su mirada no se ilumina como cuando la conocí y no se quita el tapabocas por nada. Dos semanas antes tenía un ojo hinchado y morado, creo que alguien en su casa la golpea como mi madre lo hace cuando se enoja

—Laura. ¿Nunca has pensado lo genial que sería irnos y alejarnos de las personas que nos lastiman?

Ella no respondió nada, solo hubo silencio, por lo que seguí hablando

—¿Te gustaría escaparte conmigo algún día?

La pregunta la tomo por sorpresa por que apenas lo mencioné se giro para verme a la cara

—Él nunca me dejaría ir. Mataría a mi madre, tengo que cuidarla

—Te cuídare a ti y a tu madre

—No puedes, eres pequeño y él es grande

—¿Quién? ¿Él que te lastimo?

—Mi papá

Su padre es el causante de sus heridas, es el que no la deja ser feliz

—Es tarde, mejor me voy— dijo Laura anunciando que era hora de irse. Y yo seguía aquí. Normalmente yo me voy primero, eso significa que voy tarde

Me levanté rápidamente de la silla en dónde estaba y salí corriendo olvidando la chaqueta que tenía puesta (gran error)

Llegue al piso donde estaba mi casa y ví la puerta abierta. Ella, mi madre ya estaba en la casa

—Ho..hola mamá

Mi madre estaba tirada en el piso de rodillas llorando, las cosas de la casa estaban tiradas por todas partes, y los muebles estaban tirados en la sala. Su mirada se alzó rápidamente al escuchar mi voz y su rostro paso de la tristeza a la rabia

—¿Dónde estabas?— preguntó enojada

—Sa...salí a tomar un poco de aire. N...no me sentía muy bien

—Mentira. Te querías ir, como tu padre se fue— grito molesta

—Mamá, yo nunca me iría de tu lado

—¡Cállate!— me dió una bofetada

Me tomo por el cabello tirandome al suelo, se fue a la cocina y al volver traía un cable y un cuchillo. Me golpeó hasta el cansancio con el cable, entonces la ví acercar el cuchillo a mi cara

—Si no eres mío, no serás de nadie

—¡No!— se escuchó un grito a las afueras del departamento. Laura estaba en la puerta con mi chaqueta en sus manos. Yo estaba perdiendo el conocimiento, aún así, alcance a ver a mi madre ir tras Laura con el cuchillo en su mano

—Por favor, no le hagas daño— fue lo último que dije antes de quedar inconsciente

Al despertar estaba cubierto de tubos, agujas y me sentía adolorido. No podía moverme y no recordaba lo que me había sucedido

Entonces entró una chica joven con un uniforme de enfermera

—Veo que ya despertaste ¿Cómo te sientes?

—Donde está mi madre, ella enloquecerá si no sabe dónde estoy

—No te preocupes, tu padre ya viene y un oficial vendrá a hablar contigo

—¿M-mi papá?

—Si

Me quedé un momento en silencio, mi mente me estaba regresando los recuerdos de lo sucedido

—¡Laura! ¿¡Dónde está mi amiga Laura!?

—Ella está bien, sus padres están con ella

—Menos mal— me sentí casi aliviado, recordaba lo que me había dicho de su padre, solo espero que no suceda nada

Iba a preguntar por mi madre pero entro Laura y no tuve la oportunidad de hacerlo

—¡Laura! Menos mal estás bien

—Lo siento. Y...yo no quería hacerlo— su llanto se hizo fuerte y doloroso

—¿Hacer que?— pregunté confundido, ella me salvó la vida ¿Porque está pidiendo perdón?

—Niña, no puedes estar aquí— Un oficial de policía nos interrumpió y saco a Laura de la habitación

Estaba muy confundido, no tenía idea de lo que estaba sucediendo y tenía miedo

—Tu papá no tarda en llegar, él te explicará lo que sucedió

Mi padre llegó y me contó lo que pasó, mi madre había muerto. Callo del séptimo piso cuando intento hacerle daño a Laura

No sabía cómo sentirme al respecto, mi cabeza era un lío y no podía pensar con claridad. Intenté contactarme con Laura pero no fue posible, no logré encontrarla

Cuando estuve mejor mi padre me envió fuera del país para que estudiara, luego de 10 años regrese

Sería mi nueva vecina, la tenía tan cerca pero a la vez tan lejos, su rostro era el mismo, es más hermosa que cuando la conocí, simplemente es perfecta

Solo espero que se acuerde de mi ¿O no?

Maldito Romance: Él inició (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora