━━━ umbrigde.

607 59 0
                                    

—¡Buenas tardes a todos! —saludó a los alumnos cuando por fin éstos se sentaron

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Buenas tardes a todos! —saludó a los alumnos cuando por fin éstos se sentaron

Unos cuantos respondieron con un tímido «Buenas tardes»—. ¡Ay, ay, ay! —exclamó—. ¿Así saludan a su profesora? Me gustaría oírlos decir: «Buenas tardes, profesora Umbridge.» Volvamos a empezar, por
favor. ¡Buenas tardes a todos!

—Buenas tardes, profesora Umbridge —gritó la clase.

—Eso está mucho mejor —los felicitó con dulzura—. ¿A que no ha sido tan difícil? Guarden las varitas y saquen las plumas, por favor.

Unos cuantos alumnos intercambiaron miradas lúgubres; hasta entonces la orden de guardar las varitas nunca había sido el preámbulo de una clase que hubieran considerado interesante. Atenea metió su
varita en la mochila y sacó la pluma, la tinta y el pergamino.

La profesora Umbridge abrió su bolso, sacó su varita, que era inusitadamente corta, y dio unos golpecitos en la pizarra con ella; de inmediato, aparecieron las siguientes palabras:


Defensa Contra las Artes Oscuras: regreso a los principios básicos


—Muy bien, hasta ahora vuestro estudio de esta asignatura ha sido muy irregular y fragmentado, ¿verdad? —afirmó la profesora Umbridge volviéndose hacia la clase con las manos entrelazadas frente
al cuerpo—. Por desgracia, el constante cambio de profesores, muchos de los cuales no seguían, al parecer, ningún programa de estudio aprobado por el Ministerio, ha hecho que estéis muy por debajo del
nivel que nos gustaría que alcanzarais en el año del TIMO. Sin embargo, os complacerá saber que ahora vamos a rectificar esos errores. Este año seguiremos un curso sobre magia defensiva cuidadosamente
estructurado, basado en la teoría y aprobado por el Ministerio. Copiad esto, por favor.

Volvió a golpear la pizarra y el primer mensaje desapareció y fue sustituido por los «Objetivos del curso».

1. Comprender los principios en que se basa la magia defensiva.
2. Aprender a reconocer las situaciones en las que se puede emplear legalmente la magia defensiva.
3. Analizar en qué contextos es oportuno el uso de la magia defensiva.

Durante un par de minutos en el aula sólo se oyó el rasgueo de las plumas sobre el pergamino. Cuando los alumnos copiaron los tres objetivos del curso de la profesora Umbridge, ésta preguntó:

—¿Tienen todos un ejemplar de Teoría de defensa mágica, de Wilbert Slinkhard? —Un sordo murmullo de asentimiento recorrió la clase—. Creo que tendremos que volver a intentarlo —dijo la profesora Umbridge—. Cuando les haga una pregunta, me gustaría que contestarais «Sí, profesora
Umbridge», o «No, profesora Umbridge». Veamos: ¿tenéis todos un ejemplar de Teoría de defensa mágica, de Wilbert Slinkhard?

—Sí, profesora Umbridge —contestaron los alumnos al unísono.

—Estupendo. Quiero que abran el libro por la página cinco y lean el capítulo uno, que se titula «Conceptos elementales para principiantes». En silencio, por favor.

powerful  |  harry potter  (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora