Quien lo...diria?

"Conviviendo" juntos

Estaban cargando unas 6 cajas algo pesadas, o bueno, la mayoría la estaba cargando Karma, ya que Nagito, el podía con al menos dos.

-Realmente eres fuerte, aunque era de esperarse Akabane-kun

-...

Veo que eres de pocas palabras aunque cuando nos vimos por primera ves hablabas mucho.

-...

-Eres especial o bueno en-

-Callate

Karma estaba fastidiado, había escuchado hablar a ese sujeto toda la tarde y se sentía una tortura, quería acabar rápido e irse, así que tan rápido llegaron al almacén, puso las cajas una encima de la otra formando un torre para irse rápido dejando solo a nagito, pero vio como este estaba de espaldas y esa torre empezaba a inclinarse con la intención de caer encima de el.

-Cuidado!!

Se había lanzado empujandolo antes de que las cajas impactaran en el cuerpo, ambos salieron rodando chocando en una pared deteniendolos.

-agh, mi cabeza..- karma fue quien más recibió el impacto en la pared, tenía los ojos cerrados por lo que llevo su mano a la cabeza para sostenerla un poco.

-Estas bien Akabane-kun?- el albino se había preocupado por el chico debajo de el, su suerte de nuevo había intervenido lo cual no le gusto para nada.

-Si, estoy bien, ahora..sal de encima- Karma ya para este punto había abierto los ojos mirando a Nagito con algo de incomodidad.

-Oh si- Salió rápidamente de su lugar con un pequeño rubor que se notaba bastante por su color de piel- Déjame pedirte perdón invitando te una comida por favor.

-No gracias- hablo entre dientes esforzandose para no insultar al chico de cabellos desordenados.

-No se si sepas pero soy el afortunado definitivo, mi suerte se divide en dos, buena y mala, y está ves intervino la mala, por lo que es mi culpa, peor entiendo si no quieres perdonarme, nadie querría hacerlo, ni mucho menos pasa la tarde con alguien tan despreci-

-Ya, ya  ya, basta- Tenía que aceptar si quería que el chico se callara- Bien, por está ves, veamos que tan buena está esa comida, dependiendo de eso, te perdonare.

-SI! muchas gracias Akabane-kun- tan pronto escucho esto el albino jalo del brazo al chico sacando a ambos del almacén y dirigiendose a dónde su buena suerte está ves los guie a su destino

Karma mientras corría junto al chico pensaba, no podía mentir que le agradaba un poco la presencia de Nagito, le gustaría molestarlo, pero también conócerlo a más profundidad, pero no Hiba a tomar confianza de golpe, preferia ir de apoco.