🌻𝕃𝕒 𝕧𝕚𝕕𝕒 𝕒 𝕥𝕣𝕒𝕧𝕖́𝕤 𝕕𝕖 𝕥𝕦𝕤 𝕠𝕛𝕠𝕤🌼|| 𝙷𝚊𝚗𝚖𝚊

🌸𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 20🌸

🌸𝑁𝑎𝑟𝑟𝑎 𝐻𝑎𝑟𝑢🌸

Al despertarme ví el techo blanco, característico de los hospitales, debía ser muy pronto ya que estaba aún todo muy oscuro y silencioso.

Me senté en la cama para observar a mi alrededor, y ví a Hanma con el móvil.

Haru: No sabía que estabas despierto
Hanma: -Gira su cabeza para mirarla- No podía dormir

Nos quedamos en silencio, por el pasillo se empezaron a escuchar algunas enfermeras hablar entre ellas de algunos pacientes.

Haru: ¿Cuanto crees que estarás aquí?
Hanma: -Apaga el móvil y suspira- Ni idea, pero hay que poner orden en la pandilla y Kisaki se ha unido a la ToMan... Asique Valhalla está sin líder... Otra vez...

No sabía bien que decir asique me quedé en silencio y me volví a tumbar, pero esta vez girada hacia él para mirarle.

Hanma: Joder, las camas son muy incómodas, me duele todo
Haru: Tendrás que aguantar unas semanas. ¿Que hora es?
Hanma: Son las ocho menos veinte -Mirando la hora en su móvil-

Se volvió a quedar la habitación en silencio, hasta que él lo rompió.

Hanma: Haru... ¿Porque lloraste cuando me dispararon? Me prometiste no llorar si yo llegaba a morir

Sus palabras no me las esperaba, le miré curiosa, y, sin decir nada, le acaricié la mano

Haru: No me imagino un mundo sin ti Hanma, y... No podría no llorar si tu te alejaras de mi lado
Hanma: He hablado con Kisaki -Mira al techo y suspira- Me ha dicho que tengo que ir pensando en dejar Valhalla y unirme a la ToMan con él para destruir a Mikey... Está obsesionado con él, está loco

Al terminar de decir eso soltó una pequeña risa, pero paró de inmediato, al parecer le dolía la herida del disparo al hablar mucho o reírse.

Me levanté para andar un rato por el hospital, busqué las zapatillas que me habían dado, eran azules y  calentitas, abrí la puerta de la habitación de Hanma y un olor a medicina y desinfectante inundaron mis fosas nasales.
Comencé a caminar entre los médicos, camillas y algunas mesas hasta llegar al comedor y coger algo de comer, además, a Hanma le encantaban las galletas de chocolate que acompañaban al café o vaso de leche.

Cocinero: Buenos días! ¿Que te gustaría tomar? -Con una gran sonrisa-
Haru: Un vaso de leche, gracias
Cocinero: ¿Solo eso? Mmmmm, no! Le pondré unas galletas para que se las coma cuando quiera, ahora mismo vengo
Haru: Gracias -Sonríe-

El cocinero no tardó mucho en llegar con mi desayuno, me despedí de él y fui a de regreso a la habitación de Hanma.

Al entrar el olor de la colonia de Hanma me llegó a la nariz y suspiré relajada, el olor a hospital me ponía enferma.

Hanma: ¿Y esas galletas?
Haru: Me las ha dado el cocinero -Se sienta en su cama- Le parecía poco con solo un vaso de leche
Hanma: -Alarga su brazo hasta coger una- Dejame probar
Haru: Siempre dices eso y acabas comiendotelas todas

Hanma probó una de las galletas, después de saborearla me miró, sonrió y cogió otra del plato.

Haru: -Suspira- En fin..

Comencé a beberme mi vaso de leche y de vez en cuando le pegaba un mordisco a alguna galleta, aunque sólo me comí una ya que Hanma se las comió todas.

Haru: Toma, -Le da la galleta que acompaña al vaso de leche- Esta si era para ti, todas estas eran mías, ahora te traerán tu desayuno
Hanma: Soy muy alto necesito comer para crecer más
Haru: ¿Más?
Hanma: -Con un pedazo de galleta en la boca- Shi, necesito ser más alto