Bloody Naked (Jennie y tú) (G!P)

14. Sin consentimiento

Jennie

Terminamos de organizar nuestras pertenencias, preparamos la cena y comimos. Rutinario, pero estoy feliz. Cuando estoy con T/N siempre me siento así, no es casualidad que ahora sienta que vuelo. 

—Me siento algo incomoda porque me ofreces un departamento. —Menciono frente a ella en la sala, estamos viendo un película después de cenar. —No quiero que pienses que me aprovecho de ti. 

—Sé que no lo haces, solo quiero ayudarte. —Besa mi cabello y acaricia mi mano. —Deja de pensar en eso. Mejor arreglémonos. 

—¿Para?

—Hay una fiesta en una de las casas, nos invitaron. 

—¿Una fiesta? Pensé que íbamos a relajarnos. 

—Nos vamos a relajar, pero también se puede en la fiesta. —Se levanta de su asiento y tiende su mano hacia mí. —Vamos, cariño.

(...)

La cabaña está llena, es una de las primeras que pasamos, hay muchos adolescentes por aquí y por allá. Apenas entramos se podía oler las diferentes tipos de drogas, me maree un poco pero T/N siempre me estuvo sosteniendo la mano. 

—¿Quieres bailar? —Pregunta sobre mi oído acariciando mi espalda, se nota por su mirada que lo único que quiere hacer es pasarla bien conmigo. 

—Claro. —Entrelaza nuestros dedos y nos lleva directo a la pista de baile, suena bachata, Romeo Santos llega a nuestros oídos y no puedo estar más agradecida de que T/N me quiera tener fuerte hacia ella. —Me encanta esta canción.

—A mí igual. —Me toma de las caderas moviéndonos al ritmo de la música, la química entre nosotras se hace notar, nos dejamos llevar de una manera tan perfecta que simplemente ya ni me preocupaba el ambiente de la casa, en ese momento solo éramos las dos, con nuestras frentes unidas en tacto y nuestros cuerpos entrelazados sin dejar el mínimo espacio. Es increíble como me consume la pasión de sus ojos. —Nunca me cansaré de ti, Jennie. 

—Quiero estar solo contigo, no me dejes. 

—No lo haré. —Junta nuestros labios ansiosamente, al fin. No sé de dónde provino la necesidad palpante de desahogarnos sobre nuestros sentimientos pero tarde o temprano debía pasar, no hemos terminado de expresar todo pero paso a paso se hace. —Te necesito siempre. 

—Te quiero demasiado. —Acaricia su nuca y cuando nuevamente queremos unir nuestros labios alguien jala un poco a T/N fuera de mi contacto, mierda. 

—¡¿Qué mierda?! —Dirige su mirada furiosa hacia un chico medianamente bajo con gafas redondas y cabello castaño, aparentemente muy tímido. —¡Hey Trevor! No pensé verte, ya me preguntaba yo por el anfitrión. 

—Tuvimos un inconveniente con las bebidas, pero te acabo de ver. ¿Qué tal la escuela? 

—Bien, últimos meses al fin. —Soy una espectadora de su conversación hasta que T/N pasa su brazo por mi hombro acercándome a ellos caminando juntos hacia el jardín para mejor conversación. —Ella es mi chica, Jennie. Jen, es mi amigo Trevor.  

—Un placer. —Trato de mantener mi emoción por su presentación 'Su chica', joder, suena tan bien de su boca. Estiro mi mano hacia Trevor que la estrecha con una sonrisa. 

—Me alegra conocerte Jennie. 

—Igual. —Nos sentamos en un gran sofá mirando hacia el río. T/N sosteniendo mi manos con los dedos entrelazados, espero no note mi mirada fija allí. 

—¿Qué tal tu madre? No la he visto desde aquel día en el centro. 

—Ella y papá están de viaje, ya sabes, efectos colaterales de tener dinero. —Ambos ríen y Trevor se levanta de golpe. —¿Quieren algo de beber?