Nyoko es una niña que vive en una Aldea donde la pobreza abunda y los aldeanos negaban la existencia de los Demonios, sin embargo esta vive algo lejos de esta. Vive con su Madre y Hermanas ya que su Padre nunca quiso hacerse responsable de ellas y n...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-ˋˏ ༻❁༺ ˎˊ-
Un nuevo día...
Desde aquella masacre, la pequeña niña que ahora se encontraba en las calles en medio de una nevada sentada en un callejón mientras abrazaba sus piernas y mirando la pared sin poder asimilar todo lo que tuvo que pasar aquella noche, su estomago rugió por el hambre que seguro ella tenía, pero esta andaba en sus pensamientos intentando asimilando todo, en sus ojos no se podría ver algún brillo que siempre la caracterizaba.
Luego vio su mano que llevaba aquél adorno que siempre tenía su Hermana en él mango de su Katana que su Madre le dio según "Una reliquia familiar" para cada hija. Pero ahora no sabía que hacer quizás morir aquí debido al frío, al hambre, ya que no conocía nadie de aquél pueblo todos eran unos ignorantes, recordar aquella noche como ella corría por los callejones en busca de ayuda tocando puerta en puerta desesperada a que alguien la abra, pero nadie la ayudó lo único que pudo hacer fue sentarse en aquel callejón sin salida que fue el único lugar donde pudo quedarse pero no pudo conciliar el sueño y cuando nose dio cuenta ya había amanecido.
No sabía que habrá pasado con aquel Demonio, quizás huido después de la masacre en busca de más presas o aún siguiera por ahí esperando a que anochezca para atacar a todos y seguramente a ella para completar lo que habría dejado ir.
Suspiró y cerró sus ojos dejando que el aire saliera de su boca, uno caliente debido a la alta temperatura, se levantó del lugar en el que estaba para luego formar un nudo en aquél adorno que tenía para ponerlo alrededor de su mano para seguido tomar rumbo por las calles y ver las tiendas de madera por el lugar ofreciendo su mercancía ya sea pan, verduras, frutas, carnes aúnque eran muy pocas debido a la escasez de la cosecha y ganadería. Una que otra gente también ofrecía objetos de valor ya sea sacado de sus casas o reliquias para poder ganar algo de dinero, esta paso por esos puestos mientras la gente pasaba por su lado algunos empujándola y otros ignorandola.
Esta sintió más su estomago gruñir al ver todo lo que había sobre aquellas tiendas, el hambre la carcomia por dentro simplemente quería agarrar algo para comer pero no tenía nada de dinero solo llevaba su kimono que estaba algo desgastado y sucio debido al callejón y aquel adorno perteneciente de su Hermana.
No sabía que hacer ahora, ¿Acaso habrá alguien tan bondadoso en regalarle algo de comer?, quizás no, si ellos la ignoran estando en medio del callejón de seguro nadie le ofrecería algo.
Se quedó metida en sus pensamientos no hasta que vio como una multitud se formaba cerca de una tienda, esta decidió en hacercarse y ver que sucedía y vio como una pandilla de niños le robaban algo de la mercancía de un señor que fue tras ellos mientras estos reían a carcajadas con lo que robaron en sus manos. Eso le dio una idea...
Todos permanecían atentos mirando como los niños pasaban entre ellos con lo que robaron en manos perdiéndose y dejando atrás a aquél viejo vendedor y sin que nadie se de cuenta la peli-azul tomo algo de pan que había en una canasta y ponerlo en la manga de su kimono que era algo largo hacique logro guardarlo. No sabia si tomar más aquella carne cruda pero al escuchar como llegaba aquél propietario del puesto sin pensarlo tomo aquél pedazo de carne y se fue corriendo a toda prisa escuchando como ese vendedor le gritaba y ella solo se perdió por ahí hasta llegar aún callejón.
