Pues bien, la aplicación de la respiración profunda es algo bastante sencillo, fácil de emplear y que nos sirve para el control de las emociones.
¿Cómo se practica?Inspira profundamente mientras cuentas mentalmente hasta 4.Después, mantén la respiración mientras cuentas de nuevo mentalmente hasta 4.A continuación suelta el aire despacio mientras cuentas mentalmente hasta 8.
Repite el proceso anterior durante varias veces. De esta manera te vas a oxigenar y vas a conseguir que el ritmo en la respiración sea más lento y más intenso de lo habitual.
No olvides colocar tu mano sobre el abdomen, y si se sube y baja con cada movimiento, significará que lo estás haciendo de verdad, de manera profunda y de manera adecuada.
ESTÁS LEYENDO
Manejo Emocional: Claves para Gestionar las Emociones
Short StoryEn este post vamos a continuar con el complejo mundo de las emociones, temática y sobre emociones positivas y también en el de emociones negativas. En esta ocasión vamos a continuar con la gestión emocional, esto es, una vez que hemos identificado l...